A donde sólo la imaginación puede llegar
Hace poco, debido a varios artículos de opinión aparecidos en ciertas páginas, me pregunté cual sería mi definición de Ciencia Ficción. Desde hace décadas, esta pregunta ha venido “atormentando” a los aficionados al tema, e incluso los más reconocidos escritores del género (Asimov, Heinlein, Dick, etc) dieron su propia definición. Por ejemplo, la definición de Asimov sobre la Ciencia Ficción es: "La ciencia ficción es la rama de la literatura que trata sobre las respuestas humanas a los cambios en el nivel de la ciencia y la tecnología." Pero esta definición constriñe a la CiFi a los campos de la ciencia, cosa que enseguida veremos no tiene por que ser así. Además, otra definición del propio Asimov declara:
“Las historias de ciencia-ficción son viajes extraordinarios a uno de los infinitos futuros concebibles…
pero entonces, ¿sólo existe la ciencia ficción en base a posibles futuros?
Ha habido otros términos para intentar definir la Ciencia Ficción: Literatura de Anticipación (que, como la científica, sería una parte del todo que representa la CiFi); Literatura de Género (realmente, toda la literatura se engloba en algún género; negro, suspense, terror, fantasía, biografías, etc.)
La confusión, llamémosla así, puede venir de los inicios, si no de los primeros tiempos de la ciencia ficción (sería arduo discutir ahora cuando se puede considerar que comenzó lo que hoy conocemos como tal), sí de los tiempos en que se popularizó por su inclusión en las revistas pulp, a principios del siglo XX. Fue en el año 1926 cuando Hugo Gernsback utilizó el término sciencefiction en la revista Amazing Stories. Dicho término venía a significar “ficción de la ciencia”, y una mala traslación al castellano lo acabó convirtiendo en Ciencia Ficción, tergiversando así su sentido originario. De todas maneras, como hemos comentado antes, el término originario, en su pleno sentido, tampoco nos sería válido para todo lo que hoy en día abarca. Sí que podemos estar bastante de acuerdo en la definición que de ella dan los autores españoles Eduardo Gallego y Guillem Sánchez cuando dicen que:
“La ciencia ficción es un género de narraciones imaginarias que no pueden darse en el mundo que conocemos, debido a una transformación del escenario narrativo, basado en una alteración de coordenadas científicas, espaciales, temporales, sociales o descriptivas, pero de tal modo que lo relatado es aceptable como especulación racional.”
Y digo estar de acuerdo porque mi pensamiento acerca de qué es la CiFi es una idea básica sobre lo mismo que expresan ambos autores; para mí, es la literatura de lo que, en las condiciones actuales de conocimiento y técnica, es difícil que suceda en nuestra sociedad tal y como la conocemos. Como comento más arriba, la Ciencia Ficción es un todo que engloba muchas partes, y al mismo tiempo podemos decir que también forma parte de algo mayor, como puede ser el Género Fantástico, y eso es parte de la dificultad en definirla. Hay quien engloba los Mitos y Leyendas en este género. Para mí, en mi humilde opinión, sí que tendrían cabida en el género de la Fantasía, similar en ciertos aspectos a la Ciencia Ficción, pero normalmente muy alejada de ella. Aunque, como en todos los aspectos de la vida, se puede dar un mestizaje que aglutine ambos géneros; pero vamos a mantener ahora alejada la CiFi de otros géneros con los que se podría emparentar, dentro del aún más amplio abanico del fantástico.
Vamos a establecer el corte en la popularización de las revistas Pulps. Mientras que Weird Tales ya publicaba tanto terror, fantasía, como lo que hoy consideraríamos ciencia ficción, ésta como tal no se conoció como tal hasta años después, cuando como hemos dicho, Hugo Gernsback lo utilizó en la portada de la revista Amazing. Después se popularizó el pulp, y aparecieron docenas de revistas, algunas excesivamente especializadas. A partir de ahí es historia, que tal vez contemos en otro momento. Baste decir que el género fue evolucionando de acuerdo con el mercado y el gusto del público, y esa se podría decir que fue la base de los diferentes “subgéneros” dentro de la ciencia ficción.
Y así pasamos del tema del significado del término Ciencia Ficción, a todos los posibles subgéneros que ello engloba. Como todo género, ya sea literario, musical, pictórico, etc, se puede y se suele dividir en subgéneros. En el caso de la Ciencia Ficción, debido a su condición de narraciones imaginarias con unas coordenadas alteradas y aceptable como especulación, esa subdivisión se torna muy amplia, tal vez en exceso. Y al hecho de no saber exactamente qué es la Ciencia Ficción, se le suma el agravante de una serie de subgéneros a veces muy tangencialmente relacionados con lo que el público en general considera ciencia ficción. Pero eso es parte de su riqueza, fruto de su evolución y de su ansia de anticipación o de explorar tanto los espacios interiores como los exteriores del ser humano.
Así surgen etiquetas y divisiones que en otro momento veremos. Baste decir que, en general, la CiFi se ha subdividido más o menos así:
Pero esto sería casi una etiquetación por épocas. Indudablemente, se pueden dar otros sistemas de etiquetado, y alguna de las etiquetas puede coincidir con la anterior subdivisión. Una probable podría ser:
En fin, esto ha sido una breve introducción a qué es la ciencia ficción, y en qué subgéneros se puede subdividir. En posibles futuros artículos podremos ampliar el conocimiento sobre cada uno de ellos, comentando algunos de sus autores y obras más relevantes de cada uno.
J. Javier Arnau
Lluvia de albóndigas |
Materiales: acrílicos. Tamaño: 45x29 cm.
"Era un placer quemar. Era un placer especial ver cosas devoradas, ver cosas ennegrecidas y cambiadas. Empuñando la embocadura de bronce, esgrimiendo la gran pitón que escupía un kerosene venenoso sobre el mundo, sintió que la sangre le golpeaba las sienes, y que las manos, como las de un sorprendente director que ejecuta las sinfonías del fuego y los incendios, revelaban los harapos y las ruinas carbonizadas de la historia. Con el simbólico casco numerado -451- sobre la estólida cabeza, y los ojos encendidos en una sola llamarada anaranjada ante el pensamiento de lo que vendría después, abrió la llave, y la casa dio un salto envuelta en un fuego devorador que incendió el cielo del atardecer, y lo enrojeció, y doró, y ennegreció. Avanzó rodeado por una nube de luciérnagas (...), mientras los libros, que aleteaban como palomas, morían en el porche y el jardín de la casa. Mientras los libros se elevaban en chispeantes torbellinos y se dispersaban en un viento oscurecido por la quemazón. Montag sonrió con la forzada sonrisa de todos los hombres chamuscados y desafiados por las llamas." (De la traducción de Ediciones Minotauro; 2007).
Detalle del emblema metálico del casco.
[Ilustración originalmente publicada el 14 de Abril de 2010 en Ilustraciones Guillermo de la Peña].
«Cualquier tecnología suficientemente avanzada es indistinguible de la magia»