tag:blogger.com,1999:blog-49086814820425315772024-03-05T08:28:15.971+01:00Planetas ProhibidosA donde sólo la imaginación puede llegarLino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.comBlogger175125tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-50025717640125320822023-11-12T21:06:00.003+01:002023-11-14T21:09:52.336+01:00 Quinta edición del Festival de Fantasía, Terror y Ciencia ficción «Golem Fest» (Valencia)<p>Del 16 al 18 de noviembre de 2023.</p><p>Más información: <a href="https://golemfest.es">https://golemfest.es</a></p><p><br /></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg25WVjKpmazvvSUDa4MKQ9sgqh3GiG5hpebZuv8nMs2MTyadpljES5Yjzl5OpX310dAuczZKhF-6J5HGNfMqEshBljIC9aPMjmBV1tcUXtXfH62_qOIQcGEJFvRzQikIOa4xXYO_w06rh7JtTi07Rbeg6Jaf5nwkAH4uO6MOn83BqBrk02YTMMomuwgms/s680/imagen_2023-11-14_210720153.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Golemfest 2023" border="0" data-original-height="680" data-original-width="544" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg25WVjKpmazvvSUDa4MKQ9sgqh3GiG5hpebZuv8nMs2MTyadpljES5Yjzl5OpX310dAuczZKhF-6J5HGNfMqEshBljIC9aPMjmBV1tcUXtXfH62_qOIQcGEJFvRzQikIOa4xXYO_w06rh7JtTi07Rbeg6Jaf5nwkAH4uO6MOn83BqBrk02YTMMomuwgms/s16000/imagen_2023-11-14_210720153.png" title="Golemfest 2023" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><br /><br /><p></p>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-80501056627968619322023-04-30T09:00:00.020+02:002024-02-02T12:50:56.872+01:00La utilidad de la ciencia-ficción<p style="text-align: center;"> <img alt="La utilidad de la ciencia-ficción" border="0" height="197" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhH58XCKWCf6R6RQ3f2dMd5_oGZWbc2y7Dj5ImaPMyYiTpKJKXw48b58pwqJcnAffCdg2N2dFn5xi7O2P3xG_iOx87IKj4zKwGllZ4TDa50_qkN5l-SoiVHuV1Z7TVnbsJTcJVqLCDEzfNXZNjWnIlwWN9rujqMugzfWxhdpYnfDiSsN0C_F_5prWwhYQ/w400-h197/imagen_2023-04-12_133535490.png" title="La utilidad de la ciencia-ficción" width="400" /></p><div><div style="text-align: justify;">El arte y la literatura de ficción en general cumplen con una <a href="https://www.isep.es/actualidad/lectura-y-empatia-leer-ficcion-nos-hace-mas-empaticos/" target="_blank">importante función para nuestras mentes</a>. La ciencia-ficción además, tiene <a href="https://www.antena3.com/noticias/cultura/amantes-lectura-son-personas-mas-empaticas-segun-estudio_20170507590ee0290cf22906e6b6e761.html" target="_blank">algunas peculiaridades</a> que hacen de ella algo especial. La siguiente es una lista de algunas de esas facetas singulares que un servidor ha acumulado a lo largo de los recientes años, sobre la capacidad potencial de la ciencia-ficción para influir positivamente en nosotros:<span><a name='more'></a></span></div><p></p><p></p><h2 style="text-align: justify;">Pensamiento alternativo</h2></div><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><div style="text-align: justify;">Incluso la ciencia-ficción más clásica y conservadora puede provocar en el lector la necesidad de reformular el mundo a su alrededor con diferentes premisas. Aunque las motivaciones puedan variar, el género lleva consigo un <a href="http://planetasprohibidos.blogspot.com/2011/06/el-miedo-al-error.html">cuestionamiento de las convenciones</a> sobre lo establecido (no solo lo tecnológico, sino también político, ético o social). Al transitar por caminos inexplorados, prepara las mentes de los lectores para convertir en realidad algunos de esos caminos que comenzaron en la imaginación.</div></blockquote><div><h2 style="text-align: justify;">Romper las escalas </h2></div><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><span style="text-align: justify;"><div>Estamos circunscritos a desenvolvernos dentro de nuestros ámbitos, limitados por las posibilidades tecnológicas del momento. Por ejemplo, en el medievo el mundo en el que vivían los seres humanos se reducía a poco más que el poblado donde nacían. Hoy en día, es posible viajar a la otra punta del planeta en un día, gracias a lo cual la Humanidad comienza a pensar globalmente. Por tanto, para prever retos futuros o para encontrar soluciones más allá del horizonte, es necesario superar esas limitaciones. Antes de que existan las posibilidades tecnológicas para lograrlo, la ciencia-ficción nos permite <a href="https://planetasprohibidos.blogspot.com/2017/05/rompiendo-escalas.html">romper las escalas</a> temporales y geográficas en las que estamos habituados a pensar, ayuda a expandir la mente más allá de nuestro entorno, a derribar prejuicios y muros conceptuales, situándonos ante escenarios extraordinarios, preparándonos para enfrentarnos a retos nunca antes experimentados.</div></span></blockquote><div><span style="text-align: justify;"><div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi131nnuljQWj3tGkLTpTrHFg_W5HMhSYte2CPU7EcqSYZM2GKXZIK8a-X3Q4mSPXLSK5pvCCsr6Z1Y_e0_rkgj_B_sGCeQydD2s9ssxKblNXPp50yOFI7q0tescQ6pHaW0LJmwHWlVP3ktJKDG2sUw5OI_fPiwGX6NA9Cd2DACJ7R_BoZNurQfpDAp4w/s737/imagen_2023-04-11_220622157.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="346" data-original-width="737" height="188" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi131nnuljQWj3tGkLTpTrHFg_W5HMhSYte2CPU7EcqSYZM2GKXZIK8a-X3Q4mSPXLSK5pvCCsr6Z1Y_e0_rkgj_B_sGCeQydD2s9ssxKblNXPp50yOFI7q0tescQ6pHaW0LJmwHWlVP3ktJKDG2sUw5OI_fPiwGX6NA9Cd2DACJ7R_BoZNurQfpDAp4w/w400-h188/imagen_2023-04-11_220622157.png" width="400" /></a></div></div></span><h2 style="text-align: justify;">Evita prejuicios </h2></div><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><span style="text-align: justify;"><div>Al no estar sujetos a un lugar, sociedad o época determinada, el lector puede <a href="https://www.ondacero.es/solo-ondaceroes/kinotico/diego-luna-cienciaficcion-poderosa-como-herramienta-porque-bajamos-guardia_202209156322ca14891aaf0001b562f1.html" target="_blank">evitar asociarlo con alguna coyuntura</a> conocida junto con los prejuicios que arrastre. Este aspecto es compartido con la Fantasía con la diferencia de que en la ciencia-ficción no son mundos mágicos alejados completamente de nuestra realidad, sino aquellos que aun siendo ficticios son al mismo tiempo lo suficientemente reconocibles como para identificarnos con ellos. El autor de ciencia-ficción podrá de esta manera tanto ubicar al lector en un Marte improbable como desubicarlo en una galaxia muy lejana, lo necesario que le permita escoger con detalle aquellos aspectos de la realidad que le sean útiles para transmitir el mensaje deseado.</div></span></blockquote><div><h2 style="text-align: justify;">Mayor precisión narrativa</h2></div><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><div style="text-align: justify;">La ciencia-ficción no está sujeta a los límites de lo real, lo que no implica que tenga que desligarse de ello, como ocurre en la Fantasía. Esta ausencia controlada de limites permite al autor ubicar con mayor precisión un relato concreto sobre nuestra realidad en el presente, sin verse condicionado. Se modificaran o eliminaran aquellas partes que entorpezcan el relato, sustituyéndolas de manera coherente con los elementos ficticios adecuados, como situarnos en un futuro con tecnologías y sociedad acorde. </div></blockquote><div><h2 style="text-align: justify;">Complicidad lector-autor</h2></div><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><span style="text-align: justify;"><div>En la Fantasía los mundos expuestos no tienen pretensión de ser tratados como si fueran reales, siendo los únicos límites los estéticos, además de los de toda obra cultural. En la ciencia-ficción sin embargo, aunque existen partes modificadas o añadidas que son ficticias, los mundos se muestran <a href="https://planetasprohibidos.blogspot.com/2011/03/la-concesion-cientifica.html">con pretensión de verosimilitud</a>. Esto implica que en la ciencia-ficción se han de seguir unas normas de coherencia para que el resultado aparente ser consistente. Dada esta situación el principal parámetro que va a permitir ser valorada una obra correctamente por los lectores es el de la comprensión por parte de estos del esfuerzo realizado por el autor para recrear ese mundo. De lo contrario puede ocurrir que el género sea malinterpretado y confundido con ciertos ensayos que sin mostrar claramente la frontera entre ficción y realidad, relatan la visita de antiguos alienígenas y otra falsa mitología similar. No cabe duda que esta necesidad de comprensión por parte del público lector representa <a href="https://www.20minutos.es/noticia/3195473/0/lectores-ciencia-ficcion-personajes-estudio/" target="_blank">un inconveniente</a> en cuanto a popularidad, pero es el precio a pagar para lograr un objetivo más importante, como es el de <b>implicar un actitud del lector activa</b>. Este ha de estar atento no solo a la trama del relato y los personajes, sino a la propia construcción y características del mundo en el que se desenvuelve la acción, comprendiendo sus repercusiones.</div></span></blockquote><div><div style="text-align: justify;"><h2>Experimentos mentales</h2></div></div><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><div style="text-align: justify;">Para contar con la precisión necesaria la historia que desea, el autor de ciencia-ficción ha de alterar las «piezas» de ese grandioso puzle que constituye nuestra realidad. Para sostener el universo resultante de esa modificación, esas piezas han de ser sustituidas por otras ficticias recreadas adecuadamente para que encajen en los huecos dejados, por lo que es necesario <a href="https://www.gamereactor.es/todo-lo-que-mass-effect-me-enseno-sobre-fisica/" target="_blank">seguir las mismas reglas de la realidad</a> para poder lograrlo. Este mecanismo es exactamente el que científicos como <b>Albert Einstein</b> siguieron para elaborar la Teoría de la Relatividad, al imaginar cómo se vería el mundo si un objeto con masa como nosotros pudiera viajar a la <a href="https://planetasprohibidos.blogspot.com/2020/05/mas-rapido-que-la-luz.html">velocidad de la luz</a>, concepto que en principio no era ––ni es— posible realizar. Por este motivo, las obras de ciencia-ficción son experimentos mentales cuyo alcance es indeterminado. Tal vez ilimitado.</div></blockquote><div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUtXm9GBmZsTL1hgR-jXK5mANLPXwgAVLWuDbzt2f9NGK8D2aaGltu7DYEPWdqmlyqD-pRiSAyta92J4VjDE_OoAcC-NkoajRFNR7akqso_i-1pARIlA0eiUWLqMRs2J_-1YjoWVFtJRh4t3NB_Csl2R5T_GgDyHWvHEsk-82Dm4MxVSHLxfyHx5ew-g/s822/imagen_2023-04-12_182512045.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="419" data-original-width="822" height="204" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUtXm9GBmZsTL1hgR-jXK5mANLPXwgAVLWuDbzt2f9NGK8D2aaGltu7DYEPWdqmlyqD-pRiSAyta92J4VjDE_OoAcC-NkoajRFNR7akqso_i-1pARIlA0eiUWLqMRs2J_-1YjoWVFtJRh4t3NB_Csl2R5T_GgDyHWvHEsk-82Dm4MxVSHLxfyHx5ew-g/w400-h204/imagen_2023-04-12_182512045.png" width="400" /></a></div></div><div><h2 style="text-align: justify;">Lenguaje común<span> </span><span style="color: #666666; font-size: xx-small;">(añadido el 03/05/2023)</span></h2></div></div><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><div><div><div style="text-align: justify;">Por todo lo visto, la ciencia-ficción ha venido creando desde que comenzó su andadura una serie de conceptos que han ido añadiéndose al acervo cultural de las sociedades. Estas ideas sirven para simbolizar retos y expectativas para las que todavía no existe un lenguaje formal, pero que tarde o temprano, las comunidades de especialistas, ingenieros y científicos tendrán que diseñar nuevas soluciones. De esta manera, el género sirve de lenguaje compartido que dota de <a href="https://planetasprohibidos.blogspot.com/2019/05/carencia-de-innovacion.html">símbolos reconocibles</a> que mejoran la eficiencia del trabajo en equipo y la comunicación, al dotarnos de una base sobre la que partir.</div></div></div></blockquote><div><h2 style="text-align: justify;">Imaginar futuros</h2></div><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><div style="text-align: justify;">Se hace difícil imaginar un futuro en un mundo y una época tan cambiante como la reciente en la que los traumas ocasionados por pandemias, guerras o crisis económicas, provocan una incertidumbre paralizante. Sin embargo, es necesario hacerlo si deseamos dejar de repetir un mismo <a href="https://planetasprohibidos.blogspot.com/2014/09/pesimismo-del-presente.html">presente deprimente</a> una y otra vez. La ciencia-ficción permite alejarse lo suficiente de ese mundo tan decepcionante en la actualidad, pero no demasiado como para perderse en evasiones atrayentes y fáciles. Futuros posibles a los que se llega a través de una ruta mental trazada por caminos pavimentados con la solidez de una especulación racional y coherente.</div></blockquote><div><h2 style="text-align: justify;">Alimentar el <i>sentido de la maravilla</i></h2></div><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><span style="text-align: justify;"><div>Pero lo más importante y cuya escasez aumenta en una sociedad tan saturada de información redundante que sucumbe a la llamada <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Economía_de_la_atención" target="_blank"><i>economía de la atención</i></a>, es la capacidad de asombro. En este contexto de medios de información orientados a captar esa codiciada atención en los que las buenas noticias y los logros importantes pocas veces aparecen en los titulares, la ciencia-ficción nos ofrece la posibilidad de recrearnos con maravillas tecnológicas o con extraordinarios paisajes de planetas distantes. Imágenes ficticias que sin embargo, dejan en nuestras mentes el anhelo por alcanzarlas, convirtiendo el mensaje en un reducto de esperanza.</div></span></blockquote><div><p style="text-align: justify;"><span style="font-size: x-small;">Imágenes generadas con tecnología DALL·E (<a href="https://www.bing.com/create" target="_blank"><i>Image Creator Bing</i></a>)</span></p><h3 style="text-align: center;"><br /></h3><h3 style="text-align: center;">Entrada publicada anteriormente en el <a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2023/04/la-utilidad-de-la-ciencia-ficcion.html" target="_blank">blog Al Final de la Eternidad</a></h3></div><div style="text-align: center;">y en la plataforma <a href="https://www.linkedin.com/article/edit/7159147655728705536/" target="_blank">LinkedIn</a></div>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-26178965821548437822023-02-06T17:00:00.016+01:002023-05-02T09:09:10.009+02:00Convocatoria de la AEFCFT 'Visiones 2023'<p style="text-align: justify;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiQXDeah9UhWVMsLS4Qlff-3YDeEiaxBJn-7C7942lMGIt3SsetjrzZv9jLyEQacIZRPb__g5PArWL9a6p1ILxk6xxHKzXes_lkeKKCtBXKCeIXjbTbGHtjJ9onH2fPEN2KoWwUx4cL9XGew141sgm4pKiYY2lxf5MWei7MRveM5oiDTb7ouvKFcZsz/s680/imagen_2023-02-06_153926805.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="383" data-original-width="680" height="322" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiQXDeah9UhWVMsLS4Qlff-3YDeEiaxBJn-7C7942lMGIt3SsetjrzZv9jLyEQacIZRPb__g5PArWL9a6p1ILxk6xxHKzXes_lkeKKCtBXKCeIXjbTbGHtjJ9onH2fPEN2KoWwUx4cL9XGew141sgm4pKiYY2lxf5MWei7MRveM5oiDTb7ouvKFcZsz/w574-h322/imagen_2023-02-06_153926805.png" width="574" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">La Asociación Española de Fantasía, Ciencia-ficción y Terror —AEFCFT— convoca a artistas, escritores e ilustradores a su concurso <b><span style="color: #3d85c6; font-size: large;">Visiones 2023</span></b>.</div><p></p><p style="text-align: justify;">Bases para la convocatoria en la página de la asociación:</p><p></p><div style="text-align: justify;"><img alt="🔗" class="r-4qtqp9 r-dflpy8 r-sjv1od r-zw8f10 r-10akycc r-h9hxbl" draggable="false" src="https://abs-0.twimg.com/emoji/v2/svg/1f517.svg" style="display: inline-block; font-family: TwitterChirp, -apple-system, BlinkMacSystemFont, "Segoe UI", Roboto, Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 23px; height: 1.2em; margin-left: 0.075em; margin-right: 0.075em; vertical-align: -20%; white-space: pre-wrap; width: 1.2em;" title="Símbolo de enlace" />Categoría relato: <a href="https://www.aefcft.com/convocatoria-de-relato-para-el-visiones-2023/">click al enlace</a></div><div style="text-align: justify;"><span><span><span style="background-color: white; height: 1.2em; margin-left: 0.075em; margin-right: 0.075em; width: 1.2em;"><img alt="🔗" class="r-4qtqp9 r-dflpy8 r-sjv1od r-zw8f10 r-10akycc r-h9hxbl" draggable="false" src="https://abs-0.twimg.com/emoji/v2/svg/1f517.svg" style="display: inline-block; font-family: TwitterChirp, -apple-system, BlinkMacSystemFont, "Segoe UI", Roboto, Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 23px; height: 1.2em; margin-left: 0.075em; margin-right: 0.075em; vertical-align: -20%; white-space: pre-wrap; width: 1.2em;" title="Símbolo de enlace" /></span></span></span><span style="height: 1.2em; margin-left: 0.075em; margin-right: 0.075em; width: 1.2em;">Categoría ilustración: </span><a href="https://www.aefcft.com/convocatoria-de-ilustracion-para-la-portada-del-visiones-2023/" style="height: 1.2em; margin-left: 0.075em; margin-right: 0.075em; width: 1.2em;">click al enlace</a></div><p></p><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><p style="text-align: justify;"><br /></p>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-58338299588997755802022-08-21T11:10:00.007+02:002023-09-26T09:29:22.047+02:00La Revista Planetas Prohibidos es citada por un club de lectura de autores auto-publicados<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgQmKrAEbABE3jl8dGeiR3iPPJiG-Yc2dRIZQJR2gg_rFiBn5tCEo3fx6sAc48g32VReEu1Oa1xQ4rlUvqOEvlQdcBSSyPLqkKqgUI71Z9HVMWOYchyUlmpesndO6-qEWxZyv7QSdE9usTV0BTUOviSrMQ1taFkD_Z_k4UBRWx9APJwANcM0j3wx59U/s520/imagen_2022-08-21_101758456.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="450" data-original-width="520" height="277" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgQmKrAEbABE3jl8dGeiR3iPPJiG-Yc2dRIZQJR2gg_rFiBn5tCEo3fx6sAc48g32VReEu1Oa1xQ4rlUvqOEvlQdcBSSyPLqkKqgUI71Z9HVMWOYchyUlmpesndO6-qEWxZyv7QSdE9usTV0BTUOviSrMQ1taFkD_Z_k4UBRWx9APJwANcM0j3wx59U/s320/imagen_2022-08-21_101758456.png" width="320" /></a></div><div><br /></div><div style="text-align: justify;">Ha entrado en escena una iniciativa cultural que pretende recopilar las propuestas independientes de literatura. Lo ha hecho en forma de club de lectura cuyo objetivo principal son los autores autopublicados. Dentro de esta voluntad de difusión cultural, la Revista Planetas Prohibidos ha tenido el honor de ser incluida junto a otras interesantes propuestas.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div><div style="text-align: justify;">Gracias y enhorabuena al resto por mantener un sano ambiente de creatividad literaria.</div><div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Enlace al artículo de <a href="https://relatoscortosonline.wordpress.com/">Leo auto-publicados</a>: <a href="https://relatoscortosonline.wordpress.com/2022/08/20/10-revistas-literarias-para-disfrutar-y-conocer-autores/">click aqui</a></div></div><div><p></p></div></div>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-39047333912535696812022-05-12T17:00:00.024+02:002022-05-22T19:02:23.102+02:00Entrevista/tertulia en-línea a Francisco J. Jariego<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh1-QnGBZRI4iSNto97p-36vTLUnVeOn3sGlAyb7M6EE9c6tyzeYmO1_hQ1teADXBrRojq4Bzi0pItURF3yG4BQAjP4JWuV8KQZ3WS8xqe0Zwamt-L7pAkSued8kTXHQroc2SheAP0vXOKFqZQOU4M_CaNjmnySvp5gq8eRT_y06YGlm2QwHuTVZzVF/s679/imagen_2022-05-12_112524646.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="356" data-original-width="679" height="210" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh1-QnGBZRI4iSNto97p-36vTLUnVeOn3sGlAyb7M6EE9c6tyzeYmO1_hQ1teADXBrRojq4Bzi0pItURF3yG4BQAjP4JWuV8KQZ3WS8xqe0Zwamt-L7pAkSued8kTXHQroc2SheAP0vXOKFqZQOU4M_CaNjmnySvp5gq8eRT_y06YGlm2QwHuTVZzVF/w400-h210/imagen_2022-05-12_112524646.png" width="400" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div></div><div style="margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Droid Sans, LucidaGrande, Lucida Grande, Lucida Sans, Arial, serif;"><span style="font-size: 12.6px;"><a href="https://www.facebook.com/Fundacion.Isaac.Asimov" target="_blank"><b>Fundación Asimov</b></a> nos invita de nueva a otra entrega de su <i>Aula Virtual</i>, en esta ocasión con una entrevista-tertulia a <b>Francisco J. Jariego</b> </span></span>(<a href="https://twitter.com/fjjariego" target="_blank">@fjjariego</a>), investigador y autor especializado en <a href="https://twitter.com/hashtag/innovaci%C3%B3n?src=hashtag_click">#innovación</a>, <a href="https://twitter.com/hashtag/tecnolog%C3%ADas?src=hashtag_click">#tecnologías</a> de la información y las comunicaciones, <a href="https://twitter.com/hashtag/econom%C3%ADa?src=hashtag_click">#economía</a> de la información, estudios de <a href="https://twitter.com/hashtag/futuro?src=hashtag_click">#futuro</a> y <a href="https://twitter.com/hashtag/CienciaFicci%C3%B3n?src=hashtag_click">#CienciaFicción</a>. Obras del autor: <a href="https://www.amazon.es/Francisco-J-Jariego/e/B01L2HUTM8" target="_blank">enlace</a>.</div><div style="background-color: white; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;"><span style="font-family: Droid Sans, LucidaGrande, Lucida Grande, Lucida Sans, Arial, serif;"><span style="font-size: 12.6px;"><br /></span></span></div><div style="background-color: white; font-family: "Droid Sans", LucidaGrande, "Lucida Grande", "Lucida Sans", Arial, serif; font-size: 12.6px; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;"><span><a name='more'></a></span>El evento tendrá lugar el 21 de mayo de 2022 a las 11:30 h. por la Plataforma Zoom y contará con la participación habitual de <a href="https://twitter.com/LibrosSBayarri" style="color: #cc1100; text-decoration-line: none;"><b>Salvador Bayarri</b></a>, <a href="https://twitter.com/moinelo" style="color: #cc1100; text-decoration-line: none;"><b>Lino Moinelo</b></a><span style="font-size: 12.6px;">, <b><a href="https://twitter.com/jaimepazcolapso" target="_blank">Jaime Paz</a> </b>y </span><b><a href="https://twitter.com/OmarJayyan" style="color: #cc1100; text-decoration-line: none;" target="_blank">Juan Miguel de la Torre</a></b>.</div><div style="background-color: white; font-family: "Droid Sans", LucidaGrande, "Lucida Grande", "Lucida Sans", Arial, serif; font-size: 12.6px; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">---</div><div style="background-color: white; font-family: "Droid Sans", LucidaGrande, "Lucida Grande", "Lucida Sans", Arial, serif; font-size: 12.6px; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">El enlace de acceso a la sesión Zoom se publicará próximamente en <a href="https://www.facebook.com/Fundacion.Isaac.Asimov" target="_blank">redes sociales</a> y en el <a href="https://t.me/fundacionasimov" style="color: #cc1100; text-decoration-line: none;" target="_blank">canal de </a><i><a href="https://t.me/fundacionasimov" style="color: #cc1100; text-decoration-line: none;" target="_blank">Telegram</a> </i>de <b style="font-size: 12.6px;"><a href="https://fundacionasimov.org/" style="color: #cc3300; text-decoration-line: none;" target="_blank"><span style="color: orange;">Fundación Asimov</span></a></b> (<a href="https://t.me/fundacionasimov?fbclid=IwAR05r855LaHVKOxBydoxutcufSk0YeKLzL-70DcVbs8Z3C7nzVoVROS4xeA" style="color: #cc1100; text-decoration-line: none;">https://t.me/fundacionasimov</a>).</div><div style="text-align: center;"><br /></div><h4 style="text-align: justify;"><b><span style="color: #660000;">ACTUALIZACIÓN [22/05/2022]</span></b></h4><h4 style="text-align: center;"><b>
<iframe allow="autoplay; clipboard-write; encrypted-media; picture-in-picture; web-share" allowfullscreen="true" frameborder="0" height="603" scrolling="no" src="https://www.facebook.com/plugins/post.php?href=https%3A%2F%2Fwww.facebook.com%2FFundacion.Isaac.Asimov%2Fposts%2F1965470846990426&show_text=true&width=500" style="border: none; overflow: hidden;" width="500"></iframe></b></h4>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-61011648773354336432022-01-23T14:23:00.001+01:002022-01-23T17:41:37.794+01:00Presentación del libro «Tiempo de Utopías», de Fundación Asimov<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgVBFHVk2sTAZHlqEnSbzaSpbfeokfor0YZnomyOio_Wc_bwlevIPS5mgqMkFnD36THTRsPL3RAD1aI5hnu9PdO-AdRbqRxkoQLeNcfZFPiWwFFR3OZchk2sMcie6MN_nqdkGdscaPOWQQ-ZwnHq4bVEngOZrbHsk6O4z2nVYMvMGibdRQbqes95hPi=s1488" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="780" data-original-width="0" height="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgVBFHVk2sTAZHlqEnSbzaSpbfeokfor0YZnomyOio_Wc_bwlevIPS5mgqMkFnD36THTRsPL3RAD1aI5hnu9PdO-AdRbqRxkoQLeNcfZFPiWwFFR3OZchk2sMcie6MN_nqdkGdscaPOWQQ-ZwnHq4bVEngOZrbHsk6O4z2nVYMvMGibdRQbqes95hPi=s320" width="320" /></a></div><br /><div style="text-align: center;"><iframe allow="autoplay; clipboard-write; encrypted-media; picture-in-picture; web-share" allowfullscreen="true" frameborder="0" height="448" scrolling="no" src="https://www.facebook.com/plugins/post.php?href=https%3A%2F%2Fwww.facebook.com%2FFundacion.Isaac.Asimov%2Fposts%2F1872727282931450&show_text=true&width=500" style="border: none; overflow: hidden;" width="500"></iframe></div>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-72084934076181132362022-01-02T09:30:00.002+01:002023-07-19T14:55:56.746+02:00Todo es información<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi0GBkNqP6X5HKDtm6-ZFvI2pd4QlCXCWsVWEffJXSH_JKLFmNK59jTUhRyERJx9V9bKtpG-2ia5qvcTWhR5EdORd-dUfxmSIrj2yGxkTSKQ4x-K74FATkKEZL7OX49NJgZrfHCA5vXyLb7/s1600/replicador%255B1%255D.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Un Klingon usando un replicador de Star Trek" border="0" data-original-height="337" data-original-width="600" height="179" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi0GBkNqP6X5HKDtm6-ZFvI2pd4QlCXCWsVWEffJXSH_JKLFmNK59jTUhRyERJx9V9bKtpG-2ia5qvcTWhR5EdORd-dUfxmSIrj2yGxkTSKQ4x-K74FATkKEZL7OX49NJgZrfHCA5vXyLb7/s320/replicador%255B1%255D.jpg" title="Un Klingon usando un replicador de Star Trek" width="320" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
La información es hoy un bien tan tangible y valioso hoy como lo fueron el oro, el carbón o el petróleo en otros momentos de la Historia. La humanidad ha pasado de lo tangible a lo etéreo y abstracto, sin que nos hayamos dado cuenta. Puede que todo comenzase con el vapor con el que funcionaban las máquinas de la Revolución Industrial, alimentadas por el entonces preciado mineral negro y que dio paso al desarrollo de la termodinámica y la <b><a href="http://cualeslarealidad.blogspot.com/2012/04/entropia-en-la-nube.html" target="_blank">entropía</a></b>. Este fundamental concepto de la física se aplicaba <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Entrop%C3%ADa#Historia_de_la_entrop%C3%ADa" target="_blank">en sus inicios</a> a los gases, pero posteriormente han surgido <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Entrop%C3%ADa_%28informaci%C3%B3n%29#Relaci%C3%B3n_con_la_entrop%C3%ADa_termodin%C3%A1mica" target="_blank">teorías que relacionan la información con la materia</a> a través de él. Poco a poco, esta nueva manera de ver el mundo abría un sin fin de posibilidades, algunas de las cuales ya estaban presentes en la ciencia-ficción y otras no han tardado en hacerse un hueco en el género.<span><a name='more'></a></span></div>
<div>
<h2 style="text-align: justify;">
Más allá de la materia</h2>
<div style="text-align: justify;">
Si es posible definir completamente un objeto incluyendo todas las partículas que lo forman y su posición en el espacio, se puede postular con la posibilidad de convertir cualquier objeto físico en un patrón de información equivalente que puede ser contenido en diversos soportes o transmitido a distancia como cualquier otra información. Igualmente, con la tecnología adecuada podría ser factible restituir dicha información a su estado físico original. Este concepto ya ha sido usado en algunas obras de ciencia-ficción, donde tal vez pueda ilustrarse mejor.</div>
<h3 style="text-align: justify;">
Replicador</h3>
<div style="text-align: justify;">
De manera similar a la impresión 3D de hoy en día, partiendo del adecuado patrón de información almacenado en un soporte informático junto con la <a href="https://pijamasurf.com/2014/05/fisicos-descubren-como-crear-materia-con-luz/" target="_blank">posible</a> —aunque extraordinariamente costosa— capacidad de <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Creaci%C3%B3n_de_masa" target="_blank">convertir la energía en su equivalente en materia</a>, no habría motivo que impidiese lograr tal hazaña. Aunque la saga <i>Star Trek</i> es la principal obra que ha hecho uso del concepto, en las tiras diarias del <i>Flash Gordon</i> de <b>Dan Barry</b> representan un dispositivo al que denominan <i>cornucopiak</i>, el cual puede convertir tanto en un sentido como en otro, la energía en cualquier tipo de objeto. En cualquiera de los casos, no satisfechos por completo con ello, se propusieron continuar a lo grande.</div>
<h3 style="text-align: justify;">
Entornos «reales»</h3>
<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgxnvOCDWK1kPsHD10_7My5miK09B8_kooYObSgx1nvEyzksjmfIWOu5K0WlixxMNieXEnghzP6lzqQpPv_kJ_hj_J9Fiqv5aednYeYoeO7BTHrBcc11HDAPHgARrFTeSnQLWgd2S8lyhNn/s1600/Holodeck%255B1%255D.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="346" data-original-width="540" height="205" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgxnvOCDWK1kPsHD10_7My5miK09B8_kooYObSgx1nvEyzksjmfIWOu5K0WlixxMNieXEnghzP6lzqQpPv_kJ_hj_J9Fiqv5aednYeYoeO7BTHrBcc11HDAPHgARrFTeSnQLWgd2S8lyhNn/s320/Holodeck%255B1%255D.jpg" width="320" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
Otra de las aportaciones de <i>Next Generation </i>al universo de <i>Star Trek</i> fue la <i>holocubierta</i>. En ella se hace uso de lo que se podría lograr si se dispusiera de semejante control sobre la energía y la materia. Supongamos la siguiente situación: estamos jugando a nuestro juego preferido de acción en primera persona donde nos vemos en un entorno simulado en tres dimensiones. La experiencia será más vívida si se hace a través de unas gafas de realidad virtual, haciendo parecer a nuestros sentidos que estamos inmersos físicamente en dicho entorno. El siguiente nivel continuando los pasos que nos han llevado hasta aquí, sería recrear de manera física ese entorno a nuestro alrededor convirtiéndolo en materia sólida. Continuando todavía más con el razonamiento, dicho entorno podría ser dinámico, esto es, que reaccionase evolucionando a nuestro alrededor, bien como consecuencia de nuestras acciones o porque se trata de una emulación en tiempo real de por ejemplo, viento o lluvia. En el caso de <i>Star Trek</i> —franquicia famosa por su <i><a href="https://www.ciencia-ficcion.com/glosario/t/tecnojer.htm" target="_blank">tecnojerga</a></i>— dan la explicación de que no se trata de «autentica» materia, sino <a href="https://memory-alpha.fandom.com/wiki/Holodeck_matter" target="_blank"><i>holomateria</i></a>, que vendría a ser algo así como fotones contenidos en campos magnéticos con la particularidad de que podrían llegar a tener la consistencia, color e incluso olor, de la materia tal cual la conocemos. En cualquier caso —materia u <i>holomateria</i>— todo apunta a que los requerimientos energéticos, de almacenamiento y de velocidad de procesamiento, tendrían que ser absolutamente colosales.</div>
<h3 style="text-align: justify;">
Asistentes</h3>
<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjVX1Ni8iZWZYvtLQk4TyWbiu0mCnCBalhEIRBX-0qpqUXTlPK_fwXTFKG_shFbaGV8EjiXhwlbgcRT2zOeMz5uFqz-zHkp3w4GWP4vUrIvx3UdWrI9Du2fZr7EP0PIf22XGaCAVLRZYVzY/s1600/robert-picardo-star-trek-535x400.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Robert Picardo como 'El Doctor'" border="0" data-original-height="300" data-original-width="533" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjVX1Ni8iZWZYvtLQk4TyWbiu0mCnCBalhEIRBX-0qpqUXTlPK_fwXTFKG_shFbaGV8EjiXhwlbgcRT2zOeMz5uFqz-zHkp3w4GWP4vUrIvx3UdWrI9Du2fZr7EP0PIf22XGaCAVLRZYVzY/s320/robert-picardo-star-trek-535x400.jpg" title="Robert Picardo como 'El Doctor'" width="320" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
Una vez asumido que la información puede convertirse en materia y se dispone de la suficiente energía y capacidad de procesamiento para crear todo lo expuesto, nada nos impide imaginar la posibilidad de hacer lo propio con un cuerpo humano, es decir, uno tangible, físico y en movimiento. Si a esta posibilidad se le añade una inteligencia artificial que modele su comportamiento, el resultado es que se podría materializar cualquier asistente, ayudante o personaje del que se tuviera la necesaria información sobre él. Como ejemplos destaca <i>El Doctor</i> del <i>spin-off Star Trek:</i> <i>Voyager</i>, un asistente médico que puede configurar su consistencia física para volverse o no, tangible. Este recurso o concepto ha sido utilizado en otras obras de manera similar como <i>Nightflyers </i>(<b>George R.R. Martin</b>, 2018), <i>Another Life</i> (<b>Aaron Martin</b>, 2019) o la más reciente de <i>Star Trek: Picard</i> (<b>Patrick Stewart</b>, <b>Alex Kurtzman</b> —2020—) donde hacen uso del canon visto de la saga.</div>
<h3 style="text-align: justify;">
El teletransporte</h3>
<div style="text-align: justify;">
Uno de los iconos tecnológicos más reconocibles y de los que poco se puede añadir, es el conocido «teletransporte» de <i>Star Trek</i>. Aunque es sin lugar a dudas la obra que más lo ha popularizado, lo cierto es que el concepto genérico de transmitir materia de una manera similar a como se hace con el sonido sobre ondas de radio fue imaginado con anterioridad en varias obras de ciencia-ficción. Una de ellas es la creada por <b>Pascual Enguídanos</b> en <i>La Saga de los Aznar</i> (1953), donde se hace uso del <a href="https://www.ciencia-ficcion.com/autores/ghw/lasaga/tecnos/karendon.htm" target="_blank"><i>karendon</i></a>, un dispositivo ficticio que puede realizar lo comentado, llevado por el autor a unas posibilidades apenas limitadas por su gran imaginación y por las fronteras que caracterizan a una buena obra de ciencia-ficción. Así mismo, en las tiras de cómic de <i>Flash Gordon</i> de <b>Dan Barry </b>(1951)<b> </b>hacían uso de un «transmisor de materia», que como su nombre evidencia venía a ser lo mismo.<br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhaxLF1lyCwDuCvJNllRhefP7_gTpFFfUjFRZtYPI05XDelFyv_lM-rQMyF4U8i6q0q2vIkjS-LRpa93p36Jtx9Eda_6JX9g6-Sj7_wDLYTp35J4tC2dZmnOi1gacVieBROkZVz187n4IFW/s1600/ST+telemuestras.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="El Sr. Chekov (Walter Koenig) recogiendo muestras de sangre klingon en Star Trek: Aquel país desconocido" border="0" data-original-height="384" data-original-width="759" height="161" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhaxLF1lyCwDuCvJNllRhefP7_gTpFFfUjFRZtYPI05XDelFyv_lM-rQMyF4U8i6q0q2vIkjS-LRpa93p36Jtx9Eda_6JX9g6-Sj7_wDLYTp35J4tC2dZmnOi1gacVieBROkZVz187n4IFW/s320/ST+telemuestras.png" title="El Sr. Chekov (Walter Koenig) recogiendo muestras de sangre klingon en Star Trek: Aquel país desconocido" width="320" /></a></div>
<br />
Muchas son las posibilidades que uno se puede imaginar si se pudiera mover la energía y la materia de un punto a otro materializando lo que hiciera falta. Un ejemplo más que se puede añadir se encuentra de nuevo en <i>Star Trek</i>: <i>Aquel país desconocido</i> (<b>Nicholas Meyer</b>, 1991), con un sencillo pero potente e ingenioso recolector de muestras. El dispositivo enfoca un punto y teletransporta una pequeña cantidad de la materia existente allí para guardarla y ser analizada.</div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
La cuestión es que si bien este recurso en su momento no fuera tal vez más que la típica solución imaginativa para resolver una complicación en la trama —o una carencia de presupuesto—, el potencial que albergaba junto con el paso del tiempo, han acabado dando como fruto todo un universo de posibilidades. Postulados que son hoy ficticios, pero muestran que en definitiva, si la humanidad lograra semejante control sobre la energía tendría bajo su mano un poder asombroso. Falta que la aprenda a manejar adecuadamente sin destruirse a sí misma. </div>
<h4 style="text-align: justify;">
La cabina del suicidio</h4>
<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg2zNNCem-HGgXHocBJFBLPr4sfubT9UP13wweKYlinpcxodEiY8EaombDnGKjRLJXB_dqkq671sq0T6vSaEWm8weAROgqr5Q10E2JbmCz2y6IZ5i1A28fdQSoyKytnjBZbWlKIMwT8o4_V/s1600/qtlzm4tp6whsvc9fpajo%255B1%255D.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Sala de teletransporte de Star Trek" border="0" data-original-height="900" data-original-width="1600" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg2zNNCem-HGgXHocBJFBLPr4sfubT9UP13wweKYlinpcxodEiY8EaombDnGKjRLJXB_dqkq671sq0T6vSaEWm8weAROgqr5Q10E2JbmCz2y6IZ5i1A28fdQSoyKytnjBZbWlKIMwT8o4_V/s320/qtlzm4tp6whsvc9fpajo%255B1%255D.jpg" title="Sala de teletransporte de Star Trek" width="320" /></a></div>
<br />
Hasta ahora se ha hablado de conceptos como la materia, la información o la energía, cuya dimensión es mensurable, localizada y restringida a ubicaciones conocidas. Pero existe un lugar que todavía se resiste hoy en día a ser tratado de esa manera: la consciencia. ¿Qué ocurriría con ella si es un ser humano el que se somete al teletransporte? Por la ciencia-ficción en la que me había educado en los lejanos años setenta las desintegraciones las catalogaba con la etiqueta de «malo». Por eso, recuerdo con cierto pánico cuando los tripulantes de la <i>Enterprise</i> en la <i>Star Trek</i> original, se colocaban en la plataforma y <a href="https://es.gizmodo.com/por-que-el-teletransportador-de-star-trek-es-en-realida-1765454706" target="_blank">se desintegraban poco a poco</a> con la intención de teletransportarse a otro lugar. Aunque parecían no sufrir ningún dolor en absoluto, me resultaba retorcido observar cómo se entregaban a una descomposición molécula a molécula de sus cuerpos mientras sus rostros no mostraban la más mínima preocupación. Aquella absoluta confianza en la ciencia y la tecnología mostrada en la serie, dominadas y al servicio de la humanidad, hizo estallar algo en mi cabeza de lo que no me he recuperado aún. Pero la cuestión clave aquí es si descomponer y volver a componer molécula a molécula nuestro cuerpo tiene efecto alguno sobre nuestra consciencia, sobre lo que nos define nuestro ser. Es decir, lo que durante cientos de años se le ha llamado «alma».</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
En teoría, aunque no se sabe a «ciencia cierta» dónde reside nuestra consciencia, es bastante razonable suponer —por aquello de la <i>navaja de Occam</i>— que reside o bien en alguna parte de nuestro cuerpo o <a href="https://www.investigacionyciencia.es/revistas/mente-y-cerebro/resiliencia-741/el-problema-cuerpo-mente-16569" target="_blank">de manera distribuida en él</a>. En cualquier caso, una copia «exacta» del mismo debería suponer la aparición de nuestra consciencia y sus recuerdos, tal y como estaban en el cuerpo original. Aquí surgen en principio varias importantes cuestiones:</div>
<h4 style="text-align: justify;">
La Paradoja de Teseo</h4>
<div style="text-align: justify;">
Cuenta la leyenda que <b>Teseo</b>, el héroe griego,<b> </b>tuvo que cambiar todas las piezas de su barco durante una travesía. Los filósofos de la época se preguntaban si era al volver el mismo barco con el que había zarpado. Este es uno de los problemas filosóficos más famosos que se han planteado y todo apunta a lo que unos siglos más tarde dijo <b>Carl Sagan</b>, que el ser humano es algo más que un conjunto de moléculas. Es decir, una vez se construye algo con un significado y una función, es esta la que perdura más allá de sus piezas iniciales. Otra manera de decirlo sería que el conjunto es algo más que la suma de sus partes. En definitiva, lo que nos define como personas no son nuestras moléculas, sino la relación entre ellas, cómo están dispuestas, interactúan y dependen unas de otras. Sin ir más lejos, nuestros cuerpos, al igual que el barco de <b>Teseo</b>, han cambiado todas sus moléculas varias veces durante la travesía de nuestra existencia.</div>
<h4 style="text-align: justify;">
Las almas no se clonan</h4>
<div style="text-align: justify;">
Otra peliaguda cuestión que surge de la hipótesis de reconstruir «copias» de nuestro ser es, qué es lo que ocurre con el original. Es decir ¿podría existir otra versión de nosotros? Ya sabemos que el cuerpo se puede clonar, pero ¿puede clonarse nuestra consciencia, nuestros recuerdos, nuestro <i>ser</i>? Afortunadamente la ciencia ―sí, la ciencia― viene en nuestra ayuda y nos marca el camino.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
La mecánica cuántica tiene algunas sorprendentes características y una de ellas es el llamado <i>entrelazamiento cuántico</i>. Según esta propiedad, dos partículas entrelazadas intercambian información sobre su estado, de manera que el cambio en una de ellas afecta a la partícula asociada. Algo que los creadores de <i>Star Trek</i> no tuvieron en cuenta pero a pesar de ello acertaron, fue una tecnología desarrollada décadas después llamada precisamente, <i><a href="http://www.fisicacuantica.es/teleportacion-cuantica/" target="_blank">teleportación cuántica</a></i>. Esta tecnología permite transmitir el estado cuántico entre dos partículas, situadas en sendos puntos alejados entre los cuales se haya establecido un canal de comunicación ―físico, óptico, etc.―. Es decir, se pueden obtener copias de partículas que han sido entrelazadas, con la particularidad que hay una cosa llamada <i><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Teorema_de_no_clonaci%C3%B3n" target="_blank">teorema de la no clonación</a></i> que impide que dichas partículas tengan el mismo estado, de manera que al hacer la copia el de la original se destruye. Así que sin saberlo, los creadores de <i>Star Trek </i>acertaron de lleno.</div>
<h4 style="text-align: justify;">
Moldeando la materia</h4>
<div style="text-align: justify;">
El teletransporte usado en las obras de ciencia-ficción definido en estas líneas comparte con el igualmente ficticio replicador la fase de reconstrucción del objeto partiendo de la información correspondiente sobre su constitución. La diferencia nada trivial es el vínculo entre el original y el replicado en destino, que como se ha indicado, podría relacionarse con el concepto real usado en física cuántica del entrelazamiento y que implica la destrucción del original e impide la creación de copias de seres conscientes. Sin embargo, en las publicaciones sobre el concepto científico de la <i>teleportación cuántica</i> ―verificado ya actualmente en la práctica― suelen advertir que no se trata de «auténtica» teleportación de materia, sino que únicamente se teletransporta la información sobre su estado. Sin embargo, resulta llamativa esta apreciación ya que aunque originalmente el teletransporte usado en la ficción se definiese como un «transmisor de materia», analizado con algo de detenimiento esto podría ser simplemente una manera rápida de nombrarlo. Es decir, tal y como se ha visto, no es necesario transmitir exactamente los mismos átomos uno por uno, es suficiente con la información que los relaciona y define su estado a nivel subatómico ―quedaría reconstruir en destino la materia a partir de la conversión de la energía requerida―. En realidad, en un transmisor de radio tampoco se transmite el sonido, sino que éste se reconstruye en destino convirtiendo la información modulada de origen ―proceso llamado <i>demodulación</i>― en la señal original.</div>
<h4 style="text-align: justify;">
Interrupción de la consciencia</h4>
<div style="text-align: justify;">
Por rápido que sea el proceso, parece claro que vamos a ser reconstruidos con nuevo material y en otro lugar. Nuestra consciencia original es hipotéticamente aniquilada y otra emergerá una vez nuestro cuerpo, organismo y cerebro sea restituido usando la información teletransportada. Además de este ejercicio de imaginación, se puede también teorizar sobre cuál será la vivencia del proceso. Sobre este aspecto de nuevo se puede echar mano de interrupciones reales de nuestras consciencias que sufrimos, además, muy a menudo: el sueño. Cuando dormimos, nuestra consciencia sufre una interrupción temporal y pasa a vagar por un mundo onírico. De manera similar, estar inconsciente por un golpe o a causa de la anestesia, son otras maneras de hacer hibernar a nuestra consciencia. Salir del teletransporte sería pues, algo así como despertar de un letargo.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Pero lo más inquietante de todos estos ejercicios mentales es considerar la posibilidad de que nuestra consciencia no esté sujeta a un cuerpo necesariamente. Que pueda desprenderse y reconstruirse en otro «lugar». ¿Cómo se vería afectada nuestra experiencia si dejáramos de pertenecer al cuerpo que habitamos? ¿Podríamos tal vez, desprendernos de nuestro cuerpo y vivir para siempre?<br />
<br /><div style="text-align: center;"><b><span style="font-size: large;">Publicado anteriormente en<i> <a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2020/05/todo-es-informacion.html" target="_blank">Al Final de la Eternidad</a></i></span></b></div><div style="text-align: center;"><b><span style="font-size: large;"><br /></span></b></div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: small; text-align: justify;"> y en </span><i style="font-size: small; text-align: justify;"><a href="https://www.ciencia-ficcion.com/opinion/op03057.htm" target="_blank">El sitio de ciencia-ficción</a></i></div>
</div>
</div>
Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-76537192425837031742021-12-26T09:00:00.028+01:002022-02-06T12:04:19.661+01:00El problema con Star Trek: Discovery<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEi7zdSMbitRvfsGc6u4OQO4hzUeT4pD0K4s9SMWwnyN0fksu2BfXzCV7XSEE0nDN4PmMMPqR5xE6PnwYfQRKxCLDCjTexcYgaxt1eZZ7ULcs-bKDIe7ydxAA3Vlj47XldGA-7tWQUdIbHxQGAzqCgFb4BFsEhH33ZCvOJAekmVzsZEbqMT9P9C6hMVh=s512" style="display: block; padding: 1em 0px; text-align: center;"></a><div style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjqoxXkdye-vkFNB8hNwTWINCYOv-R9aFRz2ycq_G2JqOAShb1ApvQtFpx71R6wMJT4HhLJ-i1I93hOZilNYaNV60yCDdGqSK5Y4oWejH73ZmLTmHUYmhOGzlTghy4l2BElWKYL3KTmHiA/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"></a><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjqoxXkdye-vkFNB8hNwTWINCYOv-R9aFRz2ycq_G2JqOAShb1ApvQtFpx71R6wMJT4HhLJ-i1I93hOZilNYaNV60yCDdGqSK5Y4oWejH73ZmLTmHUYmhOGzlTghy4l2BElWKYL3KTmHiA/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Logo y créditos iniciales de la serie 'Star Trek: Discovery'" data-original-height="786" data-original-width="1400" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjqoxXkdye-vkFNB8hNwTWINCYOv-R9aFRz2ycq_G2JqOAShb1ApvQtFpx71R6wMJT4HhLJ-i1I93hOZilNYaNV60yCDdGqSK5Y4oWejH73ZmLTmHUYmhOGzlTghy4l2BElWKYL3KTmHiA/w320-h180/image.png" title="Logo y créditos iniciales de la serie 'Star Trek: Discovery'" width="320" /></a></div></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Desde hace 55 años que <i>Star Trek</i> o <i>Viaje a las Estrellas</i> viene mostrándonos que lo importante no es alcanzar un horizonte lejano y utópico, sino que el objetivo es el propio viaje al recorrerlo. Un camino que la Humanidad viene realizando en su lento deambular alrededor del Sol, tropezándose continuamente con sus inevitables defectos. La <i>Star Trek</i> original, conocida como TOS (<i>Trek Original Series</i>), nos mostraba a una tripulación interdisciplinar, interracial y en la que el género no era tan siquiera un asunto del que se hablara. Su autor,<b> Gene Rodenberri</b>, no pretendía mostrar un futuro en el que no hubiera problemas, sino uno en el que la Humanidad sabía enfrentarse a ellos como equipo, como colectivo. Desde entonces, aquella pretensión ha ido sufriendo desgaste ante el roce con el resto de la producción cultural, obsesionada con la reproducción mimética de los problemas del presente, extrapolados y llevados a sus consecuencias más exageradas, asumiendo que no hay nada que hacer al respecto y prácticamente, convirtiéndose en profecía autocumplida.<span><a name='more'></a></span></div><p></p><p style="text-align: justify;"><i>Star Trek Next Generations</i> (TNG) estiró la idea inicial y permitió que la saga alcanzara el fin de siglo, pero su importante ―aunque limitado― aporte de nuevas ideas, quedó parcialmente oculto tras la repetición de los mismos clichés de décadas anteriores. Esto hizo que los acontecimientos del siglo entrante se la llevaran por delante. <i>Star Trek</i> dejó de existir a pesar del intento fallido —para algunos— de <i>Enterprise</i>. Antes de esto, un suceso iba a señalar una circunstancia que actualmente, más de dos décadas después, continua definiendo nuestro día a día —pero en el mal sentido—: en un buen intento por mantener la saga viva, <i>Espacio Profundo Nueve</i> mostraba otra visión del universo <i>Trek</i>, pero fue entonces cuando el fenómeno social por el cual alrededor de un concepto cultural se creaba una legión de seguidores y constituía su éxito, comenzó a desvelar un oscuro aspecto: un sector de la comunidad de aficionados de la franquicia «entregados» a la causa <i>trekkie</i> y aferrados al concepto original, no lo asimilaron y lo consideraron como algo cercano a una herejía, una traición al «espíritu» de la saga. Lo paradójico de todo este asunto es que ocurría sobre una idea que pretendía que la humanidad fuera flexible, tolerante, comprensiva y se adaptara a los tiempos para resolver los problemas, no para crear otros nuevos. Una contradicción que viene persiguiendo a la humanidad desde que comenzó a caminar. <i>Espacio Profundo Nueve</i> era una historia ambientada en <a href="https://gizmodo.com/deep-space-nine-is-star-treks-best-world-because-its-t-1786060432" target="_blank">el mismo universo</a>, <b>pero en una situación diferente</b>, por lo que la respuesta y la acción de los personajes no tenía porque ser la misma que la de TOS. Sí debía de ser, no obstante —y así de hecho cumplía la serie— la filosofía subyacente con la que se manejaban las situaciones, que en este caso no eran insondables misterios de zonas desconocidas del universo, sino de la convivencia de varias razas enfrentadas entre si en un área fronteriza del estado político formado por la <i>Federación de Planetas</i>. Efectivamente, en el universo imaginario creado alrededor de la saga original, no todo el mundo embarcaba en misiones de cinco años a lugares donde nadie había llegado antes.</p><p style="text-align: justify;">Tras el cambio de paradigma en el mundo audiovisual, con el mítico reinicio de la saga <i>Battlestar Galactica</i>, faltaba que esta transformación cultural alcanzase al universo <i>trekkie</i>. Y así parecía ser cuando se anunció que una nueva serie ambientada en dicho universo iba a aparecer: <i>Star Trek: Discovery</i>. Ya desde el principio avisaron que cambiarían el foco: la serie <a href="https://salondelmal.com/2016/08/11/una-teniente-sera-la-protagonista-de-star-trek-discovery/" target="_blank">no estaría centrada en el capitán</a>, y que sería mujer. Es decir, no solo desafiaban la inercia cultural de presentar como protagonista a un hombre, sino que también se pretendía desafiar al propio concepto de orden jerárquico, y por consiguiente, al concepto de meritocracia, fundamental en el universo de<i> Star Trek</i> y objeto de gran controversia hasta nuestros días. Esta declaración de intenciones era un aviso de lo que iba a venir.</p><h2 style="text-align: justify;">La protagonista</h2><p style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7DK86lX1S3UWYPT7ydiFWvi7YF7-XULRRe6xbfOXXhStJWel5SfmJUR87cUUCn683oJjiRJT2Gmc-GcbZNzM-aRjbrJnF6IazIg1IUozzYs270zQKw2j1PbZPrYlvKAEku1ytoNNp4h4/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Michael Burnham (Sonequa Martin-Green) en el puente de mando de la 'Discovery'" data-original-height="384" data-original-width="768" height="160" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7DK86lX1S3UWYPT7ydiFWvi7YF7-XULRRe6xbfOXXhStJWel5SfmJUR87cUUCn683oJjiRJT2Gmc-GcbZNzM-aRjbrJnF6IazIg1IUozzYs270zQKw2j1PbZPrYlvKAEku1ytoNNp4h4/w320-h160/image.png" title="Michael Burnham (Sonequa Martin-Green) en el puente de mando de la 'Discovery'" width="320" /></a></p><p style="text-align: justify;">Una mujer, de raza negra ocupando posiciones inferiores en la jerarquía organizativa. Además, engreída, prepotente, desafiante, insubordinada, sabelotodo y con necesidad de ser continuamente el centro y creer que de ella depende la responsabilidad, le corresponda o no, de salvar a todo el mundo. Alguien podrá pensar que estoy siendo despectivo, racista, misógino y puede que un montón de cosas más. En estos términos se han estado dando divisiones entre los aficionados, protagonizando discusiones polarizadas al máximo, desgraciadamente, tan clásicas y que tanto abundan en estos días. Los aficionados se culpan unos a otros, no por lo que piensan sobre la obra, sino por el mero hecho mismo de pensar algo diferente a «lo correcto», que suele coincidir curiosamente con lo que le conviene a cada uno. En definitiva, verdaderas aberraciones a estas alturas de siglo. Volviendo al tema, al parecer, pocos han pensado en la posibilidad de que los creadores de la serie hayan puesto a esta protagonista así, intencionadamente, con esa personalidad y esas características. Y tendría sentido y sería coherente con lo que se ha visto en la saga: <i>Michael Burnham</i> (<b>Sonequa Martin-Green</b>) está desde los inicios moviéndose en el terreno de lo ilegal, lo irresponsable y lo temerario, por lo que no logra ser comandante hasta... ¡la cuarta temporada! El único que confía en ella resulta ser un intruso de un universo paralelo «oscuro» ―un clásico de la saga, sin embargo, tal vez la parte más incoherente―. Su hermano, nada menos que <i>Spock </i>(<b>Ethan Peck</b>), la define con precisión y hasta que él aparece nadie la pone en su sitio ―lo <a href="https://www.express.co.uk/showbiz/tv-radio/1360009/star-trek-discovery-cast-who-plays-the-admiral-on-star-trek-discovery-evg" target="_blank">que repetiría</a> el Almirante de la flota en la 3ª temporada― confirmando que su hermana es <i>realmente </i>así, no es que nosotros seamos «malos» por pensarlo. <i>Discovery</i>, continuando con la filosofía del universo <i>Trek</i>, nos hace enfrentarnos a nuestros prejuicios y nos obliga a replantear que incluso la gente que pueda parecernos impertinente en un principio, merece también una oportunidad.</p><h2 style="text-align: justify;">La jerarquía y los roles</h2><p style="text-align: justify;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi4XjWVEniQ1LgxzHVcrvu9bJyojOZyDTtuU4w-_GybufCXeUFLwZ3VfGFDa9BAeDb8uIvmQXtKy59H-HrUHwtZW2We8uDIdddpT_VD8M798S4oPBDymLdDcdfkRs3zMjE7smSz5OWDRzc/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Sylvia Tilly (Mary Wiseman)" data-original-height="500" data-original-width="960" height="167" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi4XjWVEniQ1LgxzHVcrvu9bJyojOZyDTtuU4w-_GybufCXeUFLwZ3VfGFDa9BAeDb8uIvmQXtKy59H-HrUHwtZW2We8uDIdddpT_VD8M798S4oPBDymLdDcdfkRs3zMjE7smSz5OWDRzc/w320-h167/image.png" title="Sylvia Tilly (Mary Wiseman)" width="320" /></a></div><br /><div style="text-align: justify;">El concepto de meritocracia en <i>Star Trek</i> ha sido siempre una de sus importantes señas identitarias al desafiar los conceptos establecidos en su época. Sin embargo, su tratamiento era implícito en el propio planteamiento de la serie. Es decir, en raras ocasiones se hacía alusión a ello de manera explícita. De ocurrir, era normalmente cuando entraban en contacto con otra cultura y surgía algún conflicto que nuestros héroes de la <i>Enterprise </i>tenían ya superado. Algo que actualmente, en nuestra cultura, no se ha logrado. Con todo, TOS podría decirse que adolecía, desde este punto de vista, de haber sucumbido a colocar como foco del protagonismo a un varón caucasiano heterosexual como máxima autoridad. De hecho, según se cuenta, la intención inicial era la de colocar a una mujer de capitán, lo que lograron con <i>Star-Trek: Voyager</i> —incluso pusieron en TNG de comandante hasta... ¡un calvo!—. Probablemente, la circunstancia de necesitar adaptarse a los prejuicios de la época era y ha sido un freno. Es decir, nos encontramos ante la paradoja —otra— de <b>intentar ofrecer un producto que rompa con esos prejuicios para ofrecérselos a una necesaria audiencia que está dominada por ellos</b>. Pues bien, exactamente el mismo problema se tiene en nuestros días. Unos prejuicios diferentes, por lo que —y una vez más siguiendo con la misma intención de la serie original— <i>Discovery</i> pretende romper con una parte de ellos también ofreciendo un producto diferente, porque el público y la situación, no son las mismas. Por eso, se ha llegado a ver en la serie a una <a href="https://screenrant.com/star-trek-tilly-would-be-the-best-discovery-captain/" target="_blank">chica rellenita</a>, la teniente <i>Sylvia Tilly</i> (<b>Mary Wiseman</b>) —¡pelirroja, que escándalo!— <a href="https://collider.com/star-trek-discovery-season-3-recap/" target="_blank">al frente</a> de una nave estelar.</div><h2 style="text-align: justify;">Los géneros</h2><p style="text-align: justify;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiwj2Tw20C_KtpMbghSIaPcy8zt8_HIcfeJSJ5SzGB6a_O3kgwSXW92d5zlAFLnH53UxQnd88r3fHDljP35DfDUeH8tlSqEb8y1-_95Bw8RrGZDTi5nGOGsKZF9HHZw2hlTGdmTISxBPFY/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Doctor Hugh Culber (Wilson Cruz)" data-original-height="750" data-original-width="1500" height="160" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiwj2Tw20C_KtpMbghSIaPcy8zt8_HIcfeJSJ5SzGB6a_O3kgwSXW92d5zlAFLnH53UxQnd88r3fHDljP35DfDUeH8tlSqEb8y1-_95Bw8RrGZDTi5nGOGsKZF9HHZw2hlTGdmTISxBPFY/w320-h160/image.png" title="Doctor Hugh Culber (Wilson Cruz)" width="320" /></a></div><br /><div><div style="text-align: justify;">Los roles de género, llamando así a las tendencias, afinidades y roles en las relaciones en las que el sexo biológico es tan solo una de las variables, han sido otro de los asuntos que, dado su relevancia en el funcionamiento social, ha tenido su parte importante de tratamiento en la saga. Pero claro, de aquella <i>Uhura</i>, tan hermosa como absolutamente eficiente en su trabajo, en la que tras una hora de capítulo una mujer de raza negra trabajaba a la misma altura que cualquier otro componente de la tripulación sin que nadie dijera nada, ni a favor ni en contra ya que daba igual su sexo, raza o lo que fuera; a dedicar un capítulo entero varias décadas después para tratar de forma explícita lo mismo, uno se da cuenta de que algo no funciona. Que si <i>gays</i>, que si <i>trans</i>, todo debe de tener su capítulo, su personaje y su trama bien evidente para que se vea clarito que los <i>trekkies </i>son muy guais y tolerantes. Esto no significa que en TOS no hubieran capítulos explícitos hasta <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Que_ese_sea_su_último_campo_de_batalla" target="_blank">casi la parodia</a>, pero no era la norma y parecía tener una mayor justificación en el guión. En <i>Discovery </i>hay un romance gay protagonizado por el teniente científico <i>Paul Stamets</i> (<b>Anthony Rapp</b>) y el médico de a bordo, Dr. <i>Hugh Culber</i>, cuyo interprete <b>Wilson Cruz</b> <a href="https://trekmovie.com/2017/08/02/stlv17-interview-sam-vartholomeos-and-wilson-cruz-give-new-character-details-talk-relationships-on-discovery/" target="_blank">lo define así</a>:</div><div style="text-align: justify;"></div></div><blockquote><div><div style="text-align: justify;">«no es como si estuviéramos teniendo un episodio especial de dos horas sobre las relaciones homosexuales en el espacio. No es eso. Simplemente están enamorados y resultan ser compañeros de trabajo»</div></div></blockquote><div style="text-align: justify;"></div><p></p><p style="text-align: justify;">Es decir, que sean pareja no es más que una circunstancia como tantas otras, y las consideraciones sobre la relación en sí quedan embebidas dentro de la trama, como algo absolutamente habitual. Además, por primera vez se introduce una pareja transgénero y «no-binaria» —confieso que era la primera vez que oía hablar de este rol de género, así que en mi caso ya han logrado algo. Eso sí, la pareja que forman sigue siendo binaria, es decir, de dos—. Están interpretados por <b>Blue del Barrio</b> y <b>Ian Alexander </b>cuyos personajes así como los actores en la vida real, usan pronombres neutros. Hay que señalar que no obligan a nadie a usarlos, simplemente piden a las personas de confianza que se dirijan a ellos de esa manera —sin apuntarles con un fáser, lo que es un detalle—.</p><h2 style="text-align: justify;">El problema</h2><p style="text-align: justify;"><i>Star Trek: Discovery</i>, a pesar de no seguir el mismo patrón que la serie original, emula parte de sus pretensiones de innovación social, pero aplicadas a las circunstancias y público actual. Pero no todo el mundo lo ve de igual manera. El movimiento social que se originó alrededor de una serie de televisión en el año 1966, y que entonces fue un suceso único en la historia, es hoy en día algo habitual. Foros y redes sociales arden en discusiones enfervorizadas, verdaderas luchas tribales entre fanáticos seguidores de una u otra saga cultural. Las corporaciones de entretenimiento se frotan las manos mientras tanto, pero en el caso de <i>Star Trek</i>, esta situación choca por completo con lo que se pretendía: una humanidad que ha dejado atrás los enfrentamientos basados en la emotividad, viscerales, con escasa o nula racionalidad. La serie pretende poner patas arriba las convenciones sociales para que dejemos atrás de una vez por todas algunos prejuicios que todavía se siguen sin superar. Esto es loable, por supuesto, pero incluir en una misma obra todos y cada uno de ellos, afecta a la historia, forzándola a desviarse, por mucho cuidado que se haya hecho intentando que las reivindicaciones sean implícitas. Lo han convertido en su principal objetivo, dejando con poco protagonismo otros aspectos igualmente característicos del universo <i>Trek</i>. A pesar de todo, en <i>Star Trek: Discovery</i> todos los personajes tienen un gran trasfondo y están bien construidos, la <a href="https://www.espinof.com/series-de-ficcion/star-trek-discovery-arroja-luz-tiempos-oscuros-serie-netflix-firma-temporada-3-trekkie-que-nunca" target="_blank">tercera temporada</a> es un mensaje de esperanza y optimismo característicos de la filosofía <i>Trek </i>y <a href="https://screenrant.com/star-trek-discovery-season-4-roddenberry-vision-peace/amp/" target="_blank">la cuarta</a>, con <i>Burham </i>de capitán y enfrentándose a un enemigo desconocido capaz de destruir planetas, es lo más parecido a la serie original hasta ahora. Sin duda, es una buena serie, pero tal vez, no sea la serie que todavía seguimos esperando.</p><div style="text-align: center;"><span style="font-size: large;"><b>Publicado posteriormente en <a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2022/01/el-problema-con-star-trek-discovery.html"><i>Al Final de la Eternidad</i></a></b></span></div>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-32638209639289260812021-12-04T19:47:00.007+01:002021-12-04T19:48:04.432+01:00Inauguración Fondo Bibliográfico en 'La Casa Encendida'<p style="text-align: justify;">El 18 de diciembre en Madrid, la biblioteca de<i> La Casa Encendida</i> inaugura el fondo bibliográfico de #cienciaficción reunido durante la #OperaciónLem organizada por <a href="https://fundacionasimov.org" target="_blank"><b>Fundación Asimov</b></a>.</p><p style="text-align: justify;">Todo el mundo está invitado. Más datos sobre el evento en la imagen:</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiWFTe5bDclr5jpKct_HG5X5ISTBXfLhS_QmRynyU-20RwDCsSeA1gHvcGfDC0C5sC5342sSksHMGgqfto7HwhcbgTk_POVEhTzaGmwfKfqI_UdvGh6H1pOWIcFn4kmHAZjC28m7tToCbc/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="503" data-original-width="960" height="336" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiWFTe5bDclr5jpKct_HG5X5ISTBXfLhS_QmRynyU-20RwDCsSeA1gHvcGfDC0C5sC5342sSksHMGgqfto7HwhcbgTk_POVEhTzaGmwfKfqI_UdvGh6H1pOWIcFn4kmHAZjC28m7tToCbc/w640-h336/image.png" width="590" /></a></div><br /><p></p>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-13251080979452667622021-11-14T09:42:00.006+01:002022-05-12T11:34:51.233+02:00Francisco Martorell Campos (Contra la distopía): Entrevista-Tertulia<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPDjAVmHJ9gJyHi7jWsjRvSHC9h1cbPvpud2JaguRGHZMnHbkOTSiKYeBZRvfdtAenANHvsT0rm-a-iWJp_z6D0UnjFiryvFhvusJP9efvWZDE6Y1G8sUkcb566Z2Tw86msgk8gkg4sUE/s679/imagen_2021-11-14_092928.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="356" data-original-width="679" height="210" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPDjAVmHJ9gJyHi7jWsjRvSHC9h1cbPvpud2JaguRGHZMnHbkOTSiKYeBZRvfdtAenANHvsT0rm-a-iWJp_z6D0UnjFiryvFhvusJP9efvWZDE6Y1G8sUkcb566Z2Tw86msgk8gkg4sUE/w400-h210/imagen_2021-11-14_092928.png" width="400" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div style="background-color: white; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;"><span style="font-family: Droid Sans, LucidaGrande, Lucida Grande, Lucida Sans, Arial, serif;"><span style="font-size: 12.6px;"><a href="https://www.facebook.com/Fundacion.Isaac.Asimov" target="_blank"><b>Fundación Asimov</b></a> continúa con su proyecto participativo en-línea de <i>Aula Virtual</i> con otra Entrevista-Tertulia, en esta ocasión a <b>Francisco Martorell Campos</b>, filósofo e investigador, autor entre otras obras de <i>Contra la distopía</i> y <i>Soñar de otro modo</i></span></span></div><div style="background-color: white; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;"><span style="font-family: Droid Sans, LucidaGrande, Lucida Grande, Lucida Sans, Arial, serif;"><span style="font-size: 12.6px;"><br /></span></span></div><div style="background-color: white; font-family: "Droid Sans", LucidaGrande, "Lucida Grande", "Lucida Sans", Arial, serif; font-size: 12.6px; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;"><span><a name='more'></a></span>El acto se realizará el 20 de noviembre de 2021 a las 11:00 h. por la Plataforma Zoom y contará con la participación de <a href="https://www.facebook.com/salvador.romar?__cft__[0]=AZXhyvEMUWC6kZ9g0aB3kGi1EKxWSB9uctjhHHTUuF5V8fI-qXZ2-0Wt3OWSlJQ2xKyZz7hfVUE7eTvjfmHlsggBAQq8ucNs5iN661Q5h_NozOXbDuZsLKu8Z0jw3m6RrGG-k3ArJ_cokHIQkdcAHCTM&__tn__=-]K-R" style="color: #cc1100; text-decoration-line: none;"><b>Salvador Bayarri Romar</b></a>, <a href="http://planetasprohibidos.blogspot.com/search/label/lino" style="color: #cc1100; text-decoration-line: none;"><b>Lino Moinelo</b></a><span style="font-size: 12.6px;">, Jaime Paz y </span><b><a href="https://twitter.com/OmarJayyan" style="color: #cc1100; text-decoration-line: none;" target="_blank">Juan Miguel de la Torre</a></b>.</div><div style="background-color: white; font-family: "Droid Sans", LucidaGrande, "Lucida Grande", "Lucida Sans", Arial, serif; font-size: 12.6px; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">---</div><div style="background-color: white; font-family: "Droid Sans", LucidaGrande, "Lucida Grande", "Lucida Sans", Arial, serif; font-size: 12.6px; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">El enlace de acceso a la sesión Zoom se publicará próximamente en <a href="https://www.facebook.com/Fundacion.Isaac.Asimov" target="_blank">redes sociales</a> y en el <a href="https://t.me/fundacionasimov" style="color: #cc1100; text-decoration-line: none;" target="_blank">canal de </a><i><a href="https://t.me/fundacionasimov" style="color: #cc1100; text-decoration-line: none;" target="_blank">Telegram</a> </i>de la <b style="font-size: 12.6px;"><a href="https://fundacionasimov.org/" style="color: #cc3300; text-decoration-line: none;" target="_blank"><span style="color: orange;">Fundación Asimov</span></a></b> (<a href="https://t.me/fundacionasimov?fbclid=IwAR05r855LaHVKOxBydoxutcufSk0YeKLzL-70DcVbs8Z3C7nzVoVROS4xeA" style="color: #cc1100; text-decoration-line: none;">https://t.me/fundacionasimov</a>).</div><div style="background-color: white; font-family: "Droid Sans", LucidaGrande, "Lucida Grande", "Lucida Sans", Arial, serif; font-size: 12.6px; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;"><br /></div><div style="background-color: white; font-family: "Droid Sans", LucidaGrande, "Lucida Grande", "Lucida Sans", Arial, serif; font-size: 12.6px; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;"><b style="font-size: 12.6px;">ACTUALIZACIÓN</b><span style="font-size: 12.6px;">: vídeo de la tertulia/entrevista ya disponible</span></div><div style="text-align: center;"><br /></div>
<div style="text-align: center;"><iframe allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture" allowfullscreen="" frameborder="0" height="315" src="https://www.youtube.com/embed/xNqwp8EhaX0" title="YouTube video player" width="560"></iframe></div>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-36138327611294226262021-09-05T10:00:00.005+02:002021-09-05T10:00:00.256+02:00Guerrera [ilustración]<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjKIoV2MirmZWp8skyZ5zyVrvPfIDE2JqhiRJeH0bu4IFQLMGEnyvxln_XON5n-xk-0co1WIFlqF3x31JZr-WloW3shhwEDwDNCpzou4YtZjKFw8xQST8-dRiU5zJCYZiLv2J0N7HUCOxU/s2048/Warrior+Woman+signed.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1483" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjKIoV2MirmZWp8skyZ5zyVrvPfIDE2JqhiRJeH0bu4IFQLMGEnyvxln_XON5n-xk-0co1WIFlqF3x31JZr-WloW3shhwEDwDNCpzou4YtZjKFw8xQST8-dRiU5zJCYZiLv2J0N7HUCOxU/w463-h640/Warrior+Woman+signed.png" width="463" /></a></div><br />Ver en <a href="https://www.artstation.com/artwork/g2L4nL" target="_blank">ArtStation</a><br />Ver en <a href="https://www.deviantart.com/moinelo/art/Fantasy-Warrior-Woman-with-a-Dragon-872590342" target="_blank">DevianArt</a><p></p>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-60465604683961109982021-09-04T12:40:00.009+02:002021-11-14T09:45:08.734+01:00Carme Torras (La Mutación Sentimental): Entrevista-Tertulia<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjpfHQ1Vf_ly0_suUZ56pM9SeXo27yHVD7pIwoSZJsqyPDezSu0dsVefPvPmGQN7hlvD0u7kUujPLpJ2vxkdm9yi3B2mi-La8eOQfVLLErSDPZsF-htCEoO-mQJn70PkbIaXJHdTIjTI_8/s679/imagen_2021-09-04_123521.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="356" data-original-width="679" height="210" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjpfHQ1Vf_ly0_suUZ56pM9SeXo27yHVD7pIwoSZJsqyPDezSu0dsVefPvPmGQN7hlvD0u7kUujPLpJ2vxkdm9yi3B2mi-La8eOQfVLLErSDPZsF-htCEoO-mQJn70PkbIaXJHdTIjTI_8/w400-h210/imagen_2021-09-04_123521.png" width="400" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div style="text-align: left;"></div><div style="text-align: justify;"><b style="background-color: white; font-family: "Droid Sans", LucidaGrande, "Lucida Grande", "Lucida Sans", Arial, serif; font-size: 12.6px;"><a href="https://fundacionasimov.org/" style="color: #cc3300;" target="_blank"><span style="color: orange;">Fundación Asimov</span></a></b><span style="text-align: left;"> </span><span style="text-align: left;">inaugura su</span><span style="text-align: left;"> </span><i style="text-align: left;">Aula Virtual</i><span style="text-align: left;"> </span><span style="text-align: left;">con una Entrevista-Tertulia con</span><span style="text-align: left;"> </span><b style="text-align: left;">Carme Torras</b><span style="text-align: left;">, especialista en </span><a href="https://www.facebook.com/hashtag/inteligenciaartificial?__eep__=6&__cft__[0]=AZXhyvEMUWC6kZ9g0aB3kGi1EKxWSB9uctjhHHTUuF5V8fI-qXZ2-0Wt3OWSlJQ2xKyZz7hfVUE7eTvjfmHlsggBAQq8ucNs5iN661Q5h_NozOXbDuZsLKu8Z0jw3m6RrGG-k3ArJ_cokHIQkdcAHCTM&__tn__=*NK-R" style="text-align: left;">Inteligencia Artificial</a><span style="text-align: left;"> y </span><a href="https://www.facebook.com/hashtag/rob%C3%B3tica?__eep__=6&__cft__[0]=AZXhyvEMUWC6kZ9g0aB3kGi1EKxWSB9uctjhHHTUuF5V8fI-qXZ2-0Wt3OWSlJQ2xKyZz7hfVUE7eTvjfmHlsggBAQq8ucNs5iN661Q5h_NozOXbDuZsLKu8Z0jw3m6RrGG-k3ArJ_cokHIQkdcAHCTM&__tn__=*NK-R" style="text-align: left;">robótica</a><span style="text-align: left;"> y autora de la </span><a href="https://www.facebook.com/hashtag/novela?__eep__=6&__cft__[0]=AZXhyvEMUWC6kZ9g0aB3kGi1EKxWSB9uctjhHHTUuF5V8fI-qXZ2-0Wt3OWSlJQ2xKyZz7hfVUE7eTvjfmHlsggBAQq8ucNs5iN661Q5h_NozOXbDuZsLKu8Z0jw3m6RrGG-k3ArJ_cokHIQkdcAHCTM&__tn__=*NK-R" style="text-align: left;">novela</a><span style="text-align: left;"> de </span><a href="https://www.facebook.com/hashtag/cienciaficci%C3%B3n?__eep__=6&__cft__[0]=AZXhyvEMUWC6kZ9g0aB3kGi1EKxWSB9uctjhHHTUuF5V8fI-qXZ2-0Wt3OWSlJQ2xKyZz7hfVUE7eTvjfmHlsggBAQq8ucNs5iN661Q5h_NozOXbDuZsLKu8Z0jw3m6RrGG-k3ArJ_cokHIQkdcAHCTM&__tn__=*NK-R" style="text-align: left;">ciencia-ficción</a><span style="text-align: left;"> </span><i style="text-align: left;">La mutación sentimental</i><span style="text-align: left;">.</span></div><div style="text-align: justify;"><div style="text-align: left;"><br /></div><span style="text-align: left;"><span><a name='more'></a></span></span>El acto se realizará el 18 de septiembre de 2021 a las 11:30 h. por la Plataforma Zoom y contará con la participación de <a href="https://www.facebook.com/salvador.romar?__cft__[0]=AZXhyvEMUWC6kZ9g0aB3kGi1EKxWSB9uctjhHHTUuF5V8fI-qXZ2-0Wt3OWSlJQ2xKyZz7hfVUE7eTvjfmHlsggBAQq8ucNs5iN661Q5h_NozOXbDuZsLKu8Z0jw3m6RrGG-k3ArJ_cokHIQkdcAHCTM&__tn__=-]K-R"><b>Salvador Bayarri Romar</b></a>, <a href="http://planetasprohibidos.blogspot.com/search/label/lino"><b>Lino Moinelo</b></a> y <b><a href="https://twitter.com/OmarJayyan" target="_blank">Juan Miguel de la Torre</a></b>.</div><div style="text-align: justify;">---</div><div style="text-align: justify;">El enlace de acceso a la sesión Zoom se publicará próximamente en redes sociales y en el <a href="https://t.me/fundacionasimov" target="_blank">canal de </a><i><a href="https://t.me/fundacionasimov" target="_blank">Telegram</a> </i>de la <b style="background-color: white; font-family: "Droid Sans", LucidaGrande, "Lucida Grande", "Lucida Sans", Arial, serif; font-size: 12.6px; text-align: justify;"><a href="https://fundacionasimov.org/" style="color: #cc3300;" target="_blank"><span style="color: orange;">Fundación Asimov</span></a></b> (<a href="https://t.me/fundacionasimov?fbclid=IwAR05r855LaHVKOxBydoxutcufSk0YeKLzL-70DcVbs8Z3C7nzVoVROS4xeA">https://t.me/fundacionasimov</a>).<br /><br /><b>ACTUALIZACIÓN</b>: vídeo de la tertulia/entrevista disponible hasta el 3 de diciembre de 2021</div><div style="text-align: center;"><br /></div>
<div style="text-align: center;"><iframe allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture" allowfullscreen="" frameborder="0" height="315" src="https://www.youtube.com/embed/e4t1SOMgj4M" title="YouTube video player" width="560"></iframe></div>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-24012962476771185412021-08-01T09:00:00.008+02:002021-12-31T12:35:10.560+01:00La oportunidad de La Fundación
<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgxUigtC7QDFrEvpwqiUz-46ARpp4utXgg6TPZCkWS6PZd1YcuJZTYyZ8iddofQp_lIkA2xfIdjQyliAdjvmc01p5btYS2_ir9dHjAnO3MfmZwpfpjpOr6xcVD6LiGAG7rrKW_3oBwuBEw/s1280/tw-34468%255B1%255D.jpg" style="display: block; padding: 1em 0px; text-align: center;"><img alt="" border="0" data-original-height="720" data-original-width="1280" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgxUigtC7QDFrEvpwqiUz-46ARpp4utXgg6TPZCkWS6PZd1YcuJZTYyZ8iddofQp_lIkA2xfIdjQyliAdjvmc01p5btYS2_ir9dHjAnO3MfmZwpfpjpOr6xcVD6LiGAG7rrKW_3oBwuBEw/s200/tw-34468%255B1%255D.jpg" width="0" /></a></div><div style="text-align: center;"><iframe allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture" allowfullscreen="" frameborder="0" height="300" src="https://www.youtube.com/embed/xgbPSA94Rqg" title="YouTube video player" width="560"></iframe></div>
<div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">La actual proliferación de canales <i>en-línea</i> de televisión ha permitido que la audiencia pueda acceder a contenidos que de otra manera no iban a encontrar en los clásicos canales generalistas. Aunque otros nuevos problemas han surgido debido a esta facilidad y proliferación, la cuestión es que tras años de intentos parece que finalmente se podrá ver adaptada a la pantalla una de las más míticas y famosas series literarias de ciencia-ficción: la epopeya galáctica de <b>Isaac Asimov</b>, la <i>Saga de la Fundación</i>.<span><a name='more'></a></span></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">El porqué de esta tardanza en adaptar una de las más famosas sagas a la pantalla es un tema que va unido con toda probabilidad al de la también escasa adaptabilidad de su autor. Esta situación se hace todavía más singular al compararse con otras sagas igual o más complejas como <i>Dune</i>, que han sido merecedoras de mayor dedicación y esfuerzo para ser adaptadas al medio visual. Como <a href="https://planetasprohibidos.blogspot.com/2018/12/la-ciencia-ficcion-en-la-pantalla.html">ya se comentó</a>, la facilidad y la intensidad de las imágenes que son capaces de evocar las versiones literarias, son seguramente uno de los motivos por los que acaban convertidas a la pantalla. En el caso de <i>La Fundación,</i> si bien la idea de un imperio galáctico inspiró a sagas visuales como <i>Star Wars</i>, la complejidad de la historia con unas tramas políticas que tanto daño hicieron también en la saga de <b>George Lucas</b>, no han ayudado seguramente. Otros dos factores se podrían añadir a esta coyuntura: una de ellas son las tendencias oscuras y pesimistas de las décadas recientes, que no parecían ir en la misma línea. El otro sería la consideración de su autor como escritor.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Hasta hace poco existía un cierto consenso sobre la poca «clarividencia» de <b>Asimov </b>en su prospectiva de futuro, incluso parecía que se le consideraba un autor infantil o intrascendente por la poca madurez o relevancia social o política de sus obras, en contraste con los temas crudos, realistas y «adultos» del <i>ciberpunk</i>. Este «poco realismo» parecía confirmarse con el hecho de que no fue capaz de «predecir» en sus obras al no aparecer en ellas, cosas como Internet, los móviles o ¡ni tan siquiera los computadores domésticos! Pero tal vez las mismas características como creador literario, que no lo hacían «apto» para ser adaptado a otros medios, impedían que sus obras tuvieran una inmediata relación con los futuros que iban a comenzar a vivirse desde aquel momento. Sin embargo, el propio autor en <a href="https://elpais.com/tecnologia/2019/01/04/actualidad/1546598296_840105.html" target="_blank">una entrevista</a>, fuera del medio literario, sí que supo dar una visión certera del futuro que vivimos. Más de treinta años después de su época, se comprueba como muchos miraron el dedo que la señalaba en lugar de la Luna. Lo importante de <b>Asimov </b>no eran ni sus paisajes, ni sus personajes ni la tecnología que imaginaba, sino las consecuencias que iba a tener en la sociedad. No le preocupaba el aspecto físico de los dispositivos que describía de manera sencilla en sus obras, sino que le sirvieran para mostrar cómo nos afectaría. Computadores, Inteligencia Artificial y teléfonos móviles inteligentes tal vez podrían fundirse en un único objeto: <a href="https://planetasprohibidos.blogspot.com/2019/06/yo-robot-alex-proyas-2004.html" target="_blank">los robots</a>. Estos le sirvieron para postular con los <i><a href="https://www.ciencia-ficcion.com/glosario/e/espacial.htm" target="_blank">espacianos</a></i>, que serían la parte de la humanidad que vive excesivamente dependiente de la tecnología, así como especular sobre los problemas éticos, políticos y sociales de las inteligencias artificiales. Las <i>Tres Leyes de la Robótica</i> eran una manera de hacer manejable el problema actual de establecer límites éticos a las mismas. En definitiva, si nos fijamos en el resultado en lugar de en el trayecto literario que nos ha llevado hasta allí, es donde se encuentra el significado importante de su obra. </div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Pero hay otro aspecto de su legado, de presencia fundamental en esta adaptación que pronto se verá en la pantalla, que surge majestuoso hoy en día en la época del<i> big data</i>, de las redes sociales y del trafico de datos personales. Pero sobre todo, del tratamiento con algoritmos informáticos de toda esa ingente cantidad de información de colectivos sociales, para mediante la aplicación de psicología y matemáticas, lograr predecir nuestro comportamiento e incluso influir políticamente: la <i>psicohistoria</i>. Esta ciencia ficticia que su autor inventó simplemente como un recurso literario y que apenas describió como un conjunto de técnicas combinadas de psicología, matemáticas e historia, se fundamentaba en el manejo de un gran conjunto de datos, el mismo principio que ahora se usa en las técnicas analíticas del <i><a href="https://lamenteesmaravillosa.com/isaac-asimov-el-poder-de-la-psicohistoria/" target="_blank">big data</a></i> por parte de matemáticos especializados que manejan dicha cantidad de información. </div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">¿Por qué llega ahora esta adaptación? ¿va a ser otro producto televisivo que se amontonará junto al resto del catálogo? ¿Es una iniciativa desesperada de un canal nuevo que necesita llamar la atención con algo que los demás no se han atrevido por su dificultad? ¿Sabrán en definitiva, aprovechar la oportunidad para explorar todos estos conceptos que en su día apenas se intuían pero que hoy en día son de vigente actualidad? </div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">En esta época de pandemias y de declive de una cultura occidental cuyos gobiernos sucumben ante sus propias ambiciones y contradicciones, una China que no le importa controlar y vigilar masivamente a sus ciudadanos es la que parece que es la favorecida. Esperemos que la caída del <i>Imperio </i>relatada en la magna saga no sea otro de sus aciertos. De cualquier manera, los aficionados a la ciencia-ficción siempre podremos ser esa <i>Fundación </i>que preserve la cultura y la civilización para el futuro.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: center;"><b><span style="font-size: large;">Publicado anteriormente en el blog <i><a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2021/05/la-oportunidad-de-la-fundacion.html">Al Final de la Eternidad</a></i></span></b></div><div style="text-align: center;"><b><span style="font-size: large;"><br /></span></b></div>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-83213357803459443162021-05-16T09:00:00.035+02:002021-05-18T15:04:01.540+02:00Cambiar la utopía<div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhZTh74jVb4r0u0Ss4r0jQFRZiv46lMWb62KaeCZrZmd4oiOSpPMujrmpQ1Xxw19_vWMrhStfnblkEgwrLM6uPl8mK3xuhUf2XBBpF0EmkUW-n2vpcwmBLaeapDaCmdvXlGRgpFYzbI5NI5/s2354/Johnson-Article-Thumb%255B1%255D.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1074" data-original-width="2354" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhZTh74jVb4r0u0Ss4r0jQFRZiv46lMWb62KaeCZrZmd4oiOSpPMujrmpQ1Xxw19_vWMrhStfnblkEgwrLM6uPl8mK3xuhUf2XBBpF0EmkUW-n2vpcwmBLaeapDaCmdvXlGRgpFYzbI5NI5/s320/Johnson-Article-Thumb%255B1%255D.png" width="320" /></a></div><br />¿Qué es la utopía? Lo habitual es pensar en ella como un lugar idílico donde no hay carencias y todo el mundo es feliz. Sin embargo, nadie ha sabido explicar cómo llegar a esa situación. Cuando se ha intentado, el resultado ha sido más parecido a todo lo contrario: la distopía. Una y otra vez la humanidad ha producido ciertos «textos sagrados» que partían de supuestos ideales que se autodestruían a medida se pretendían implementar en la práctica, llegando siempre a la misma <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Reductio_ad_absurdum" target="_blank">reducción al absurdo</a>. Hoy en día utopía es sinónimo de imposible, de inalcanzable, de quimera, como si estuviéramos condenados a sucumbir a nuestros propios defectos una y otra vez sin que la tecnología y la ciencia puedan ayudar más que como parches paliativos. Eso cuando no empeora las cosas aún más. ¿A qué puede entonces aspirar la humanidad? <span><a name='more'></a></span></div><div style="text-align: justify;"><div style="text-align: right;"><i></i></div><blockquote><div style="text-align: right;"><i>la tecnología no produce ni un solo átomo de felicidad</i></div><div style="text-align: right;"><span style="text-align: justify;">―<a href="https://www.diariovasco.com/v/20111118/cultura/tecnologia-produce-solo-atomo-20111118.html" style="font-weight: bold;" target="_blank">Juan Luis Arsuaga</a>, antropólogo</span></div></blockquote><div style="text-align: right;"><span style="text-align: justify;"></span></div></div><h2 style="text-align: justify;">El mito de la felicidad</h2><div style="text-align: justify;">Ser feliz parece ser una buena meta que añadir en nuestra hipotética hoja de ruta hacia la utopía. Ahora bien ¿sabemos realmente lo que significa? Cada uno de nosotros podría dar una respuesta, aunque con gran probabilidad esa concepción de felicidad sería distinta y en muchos casos, irrealizable. La «búsqueda de la felicidad» tiende a convertirse así en una competición entre las distintas formas de entender lo que representa ese estado, en una carrera de suma cero en la que para que uno gane han de perder los demás. Todo se agrava cuando por esta ambigüedad la gente confunde felicidad con cualquier satisfacción efímera a la que se llega mediante atajos, caminos cortos llenos de placer atractivo que <a href="https://lamenteesmaravillosa.com/lo-tengo-todo-y-no-consigo-la-felicidad/" target="_blank">nos dejan peor</a> en cuanto se desvanecen. La buena noticia es que la ciencia sí tiene métodos para poder distinguir entre unas actividades y otras, gracias a que nuestro cuerpo segrega ciertas sustancias químicas que nos predisponen a enfrentarnos a dichas coyunturas —la adrenalina, por ejemplo—. Estos mecanismos provienen de un pasado evolutivo que en el mundo moderno que nos hemos construido pueden resultar un obstáculo, pero también pueden servir para diferenciar cómo reaccionamos ante estímulos externos. Por un lado, el marcador que sirve para identificar el placer en nuestro cuerpo es la segregación de <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Dopamina" target="_blank">dopamina</a>, que actúa como un sistema de recompensa, similar a cuando le damos un azucarillo a un animal cuando cumple nuestras ordenes. Esto es lo que hacen con nosotros ciertas técnicas publicitarias cuyo campo de acción se ha visto extendido a las redes sociales: tratarnos como <i>animales</i>, explotar en su beneficio nuestra segregación de dopamina para que cumplamos sus objetivos. La otra cara de la moneda se encuentra en las <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Endorfina" target="_blank">endorfinas</a>. Estas sustancias son segregadas cuando nos enamoramos o cuando llegamos al orgasmo. También está la opción más prosaica y menos romántica de hacer ejercicio físico. Aunque estas actividades van a producirnos resultados beneficiosos, también producen una euforia que a pesar de la dificultad inicial en conseguir resultados, puede llevar en algunos casos a la adicción al sexo o a la <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Dismorfia_muscular" target="_blank">vigorexia</a>. En cualquier caso, la otra noticia es que <a href="https://www.lavanguardia.com/cribeo/estilo-de-vida/20190813/47438543896/el-ser-humano-no-esta-disenado-para-ser-feliz-segun-la-ciencia.html" target="_blank">la felicidad nunca ha sido el estado ideal</a> para el que estamos hechos, al menos de manera permanente. Lo mejor es que nos <a href="https://lamenteesmaravillosa.com/mejor-estado-de-la-vida-estar-tranquilos/" target="_blank">tranquilicemos</a>, más que nada porque es precisamente este estado emocional el que mejor nos va a permitir enfrentarnos a las vicisitudes que inevitablemente, van a darse durante nuestra existencia.</div><div style="text-align: right;"></div><blockquote><div style="text-align: right;"><i>dado que la felicidad no está vinculada a un patrón particular de función cerebral, no podemos replicarla químicamente</i></div><div style="text-align: right;">―<a href="https://www.nationalgeographic.com.es/ciencia/ser-humano-no-esta-preparado-para-ser-feliz_14935" target="_blank"><b>Rafael Euba</b>, investigador</a></div></blockquote><div style="text-align: right;"></div><h2 style="text-align: justify;">La dificultad de la educación</h2><div style="text-align: justify;">Decía el filósofo que lo que no te mata te hace más fuerte o que toda crisis es una oportunidad. En la cultura popular también se ha dicho que de los errores se aprende o que la necesidad agudiza el ingenio. A pesar de esta aparente convicción, la humanidad se esfuerza denodadamente en ir en sentido contrario intentando procurarse un entorno absolutamente seguro y predecible. Un sistema «de bienestar» donde existan el menor número de problemas posible —incluso más allá—. Esta <i>sobre-autoprotección</i> puede satisfacer el nihilismo y hedonismo de los adultos, pero ocasiona que los más pequeños se vean privados de conocer cómo es el mundo de verdad, qué puede pasar cuando todo lo que parecía funcionar <a href="https://escuela.bitacoras.com/2021/02/08/rudolf-dreikurs-los-ninos-deben-aprender-a-gestionar-frustraciones-la-vida-esta-llena-de-ellas/" target="_blank">se viene abajo</a> y hay que replantearlo, así como cuánto cuesta conseguir alcanzarlo y mantenerlo. Evidentemente no se trata de echar los niños al monte y ver cómo se desenvuelven, ni de aplicar métodos espartanos para seleccionar a los más fuertes. No es ni mucho menos trivial ni obvio, pero si algo merece la pena es esforzarse en encontrar la manera de que las generaciones futuras no cometan <a href="https://elpais.com/mamas-papas/2020-11-13/como-ensenar-a-tus-hijos-a-aprender-de-sus-errores.html" target="_blank">nuestros mismos errores</a>. Si <a href="https://www.investigacionyciencia.es/noticias/la-falta-de-calidez-parental-influye-en-la-conducta-de-los-hijos-19704" target="_blank">los adultos</a> conocemos nuestros defectos, debilidades y carencias como seres humanos, así como también se conocen las consecuencias que los traumas infantiles tienen en el inconsciente de los adultos y los <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Desensibilización_y_reprocesamiento_por_movimientos_oculares" target="_blank">métodos para solucionarlos</a>, debemos poder educar para que nuestra descendencia también sea consciente de ellos y puedan prevenir, sino su aparición ya que forma parte de nuestra naturaleza, sí actuar en consecuencia para que sus efectos no superen cierto umbral pernicioso. En definitiva, debemos educar en la autorregulación de nuestra naturaleza más básica, conociéndola y aceptándola, pero sabiéndola controlar.</div><div style="text-align: right;"><i></i></div><blockquote><div style="text-align: right;"><i>Dos necesidades elementales se oponen entre sí en estas sociedades: el deseo de tener un refugio seguro en el mar revuelto y la necesidad de ser libre al mismo tiempo</i></div><div style="text-align: right;">―<a href="https://culturainquieta.com/es/pensamiento/item/17373-la-libertad-solo-se-obtiene-a-costa-de-la-incertidumbre-por-el-filosofo-zygmunt-bauman.html" style="font-weight: bold;" target="_blank">Zygmunt Bauman</a>, filósofo</div></blockquote><div style="text-align: right;"><b></b></div><h2 style="text-align: justify;">El mundo físico</h2><div style="text-align: justify;">Nuestro planeta y las leyes naturales que lo rigen son las que inexorablemente condicionan nuestra existencia, marcada por unos recursos que han de ser obtenidos de él. Se podría decir que el mundo actual está social y políticamente dividido por los pueblos que a lo largo de la historia se han encontrado, bien con los recursos necesarios suficientes ―o han hallado las maneras de obtenerlos― y el resto de zonas del planeta. Igualmente, parece que puede observarse un patrón que a lo largo de los siglos se ha repetido una y otra vez: los que han acumulado más recursos los han usado para obtener más todavía y mantenerlos el mayor tiempo posible, mientras que el resto de pueblos han anhelado parecerse a ellos y repetir el mismo patrón en cuanto han sido capaces. Tal vez esto puede parecer una simplificación, pero el panorama actual no difiere demasiado con unas naciones enfrentadas por el petróleo, por el gas, por el trigo, por la pesca y recientemente, por el litio para las baterías y por los <a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2020/05/todo-es-informacion.html">datos y la información</a>, agotando de tal manera el ecosistema que por poco lo dejan inservible. En cualquier caso, el denominador universal común a estos factores que ha aumentado exponencialmente con el paso del tiempo es el del consumo energético. La carrera por los recursos ha ido paralela a la mejora tecnológica para obtenerlos, para doblegar militarmente a quien los tiene o para defenderse de quien los anhela. Y con la tecnología, la energía necesaria para hacerla funcionar ¿Es necesario continuar con este patrón? Si toda la población del planeta tuviera la energía suficiente para poder obtener los recursos necesarios para su subsistencia y un margen necesario para cultivar nuestras inquietudes intelectuales ¿sería el fin de las guerras y de los conflictos, al menos globalmente? Alguien podría argumentar que no es posible ya que no hay medios ni fuentes de energía para abastecer a todo el globo terráqueo, sin embargo, esto no es cierto: existen medios alternativos de obtención de energía que permiten el autoabastecimiento incluso de <a href="https://www.lne.es/oviedo/2021/02/08/casa-futuro-falda-naranco-34280199.html" target="_blank">viviendas nada modestas</a>. Los métodos para obtener <a href="https://advances.sciencemag.org/content/4/2/eaaq0066" target="_blank">agua potable del mar</a> son cada vez más prometedores. Las <a href="https://www.agromatica.es/la-granja-vertical-o-farmscrapers/" target="_blank">granjas verticales</a> que permiten el autoabastecimiento urbano sin necesidad del uso de grandes superficies de terreno natural también son opciones válidas. Ahora bien, que nadie piense que nos olvidamos de que el mundo físico también somos nosotros, una especie que dejó atrás la selección natural y con ella una evolución que sólo respeta al más adaptado. Esto ha provocado que la carga genética transmitida de generación en generación de rasgos que no constituyen una ventaja, haya aumentado debido a que no se aplican sobre ellos un mecanismo de selección o filtrado. En determinado momento de la historia, cuando la humanidad fue consciente de su poder sobre la naturaleza, creyó verse legitimada para hacer lo que quisiera con ella, incluidos los miembros de su propia especie. Este fue el germen de la <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Eugenesia" target="_blank">eugenesia</a>, la aplicación de métodos de selección de humanos para mejorar la especie. Esto dicho así suena terrible y en efecto, así lo fue en algún momento cuando convirtieron al ser humano en mero ganado. Pero que no queramos volver a aquellos tiempos no nos debe hacer ignorar el problema que continua estando ahí, un ser humano con cada vez mayores defectos hereditarios acostumbrado a vivir acomodado en un mundo que solo se sostiene a costa de someter a estrés a la naturaleza, la cual acaba respondiendo con pandemias que nos hace a todos recluirnos en casa o de lo contrario, colapsar los hospitales. Afortunadamente, la misma ciencia que ideaba métodos de exterminio «eficaces» pero que bien usada ha logrado encontrar una <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Terapia_génica_antirretroviral" target="_blank">vacuna en tiempo récord</a>, puede ofrecer soluciones con <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/CRISPR" target="_blank">técnicas</a> y <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Terapia_génica" target="_blank">terapias génicas</a> para prevenir y tratar cargas genéticas problemáticas. En definitiva, no hay un obstáculo tecnológico insalvable en cuanto a imaginar a la población del planeta sana y autoabastecida sin causar daño al medioambiente. El problema es otro mucho, muchísimo, más complicado.</div><div style="text-align: right;"><i></i></div><blockquote><div style="text-align: right;"><i>lo preocupante no era que se hubiera producido una persona como Hitler sino que no fuéramos capaces de aceptar que también tenemos esa parte maligna en nuestro interior. Es esta represión de la sombra lo que genera violencia en el mundo</i> </div><div style="text-align: right;">—<b><a href="https://culturainquieta.com/es/inspiring/item/12705-las-sabias-palabras-de-carl-jung-sobre-aceptar-nuestra-oscuridad-y-la-de-los-demas.html" target="_blank">Carl Jung</a></b>, médico psiquiatra, psicólogo y ensayista</div></blockquote><div style="text-align: right;"></div><h2 style="text-align: justify;">La voluntad política</h2><div style="text-align: justify;">Podría decirse que la ciencia-ficción distópica se caracteriza por presentar una situación extrema en la que la totalidad de una población indeterminada vive subyugada en un régimen que ella misma tolera. La sociedad responde con una <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Indefensión_aprendida" target="_blank">indefensión aprendida</a> por la que no es capaz de articular una defensa o alternativa. El mérito de las obras de este género y lo que las diferencia a su vez, son los mecanismos por los cuales se consigue convertir una sociedad en poco más que un rebaño humano, en el que unos pocos dominan a muchos. En obras como <i>1984</i> (<b>George Orwell</b>, 1949) o <i>El Cuento de la Criada</i> (<b>Margaret Atwood</b>, 1985) son el miedo, el autoritarismo y el control de los relatos que forman la memoria colectiva. En las sociedades postuladas en estas obras, sus habitantes no pueden tan siquiera rodear un fuego como antaño mientras <a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2016/11/la-fuerza-de-lo-desconocido.html">relatan leyendas épicas</a> de héroes y mundos fabulosos, por lo que aceptan sus destinos como inevitables al no poder soñar con nada mejor. En otras obras como <i>Un Mundo Feliz</i> (<b>Aldous Huxley</b>, 1931) consiste en la satisfacción permanente, el ocio continuo, la evasión eterna, de manera que la sociedad no se plantea alternativas e igualmente, acepta su sino con alegría. El factor común a estas obras es la conversión de la realidad en la que viven en cárceles ubicuas. Prisiones sin rejas donde no hay más carcelero que los propios individuos, que se convierten así en presos inconscientes. Sus autores crean sus postulados haciendo uso de nuestras características como sociedad, de la clase de vínculos que establecemos entre nosotros, de los roles que creamos y asignamos, asociando y otorgando estatus de autoridad a personas en determinadas situaciones, de las que rara vez se es consciente. Actos reflejos de instintos surgidos en el amanecer de los tiempos, en entornos salvajes opuestos al seguro y predecible mundo actual al que se ha llegado. Intentando protegernos de aquellas amenazas que ya no existen, acabamos convirtiéndonos en nuestro propio depredador. </div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">La pregunta que podría hacerse es si alguien ha intentado especular con el resto de características que también nos definen como humanos. Facetas que si bien no son tan antiguas como nuestro pasado de reptil, son las que han acabado diferenciándonos del resto del mundo natural. Conceptos que no existían en él creados por el ser humano como igualdad o justicia. Filosofía o ciencia. Ética, altruismo o cooperación también forman parte de nuestras sociedades y en las de <a href="https://www.lavanguardia.com/natural/20161130/412221888235/altruismo-naturaleza.html" target="_blank">algunas especies</a>. Existen obras de ciencia-ficción que tratan estos temas, sin embargo, no son consideradas «verosímiles» de manera que ni siquiera se las agrupa como «género utópico», como si no merecieran el mismo grado de verosimilitud a pesar de estar basadas en conceptos tan reales como los anteriores. Es como si tras siglos y siglos de evolución social todavía siguiéramos fijándonos en nuestro pasado primitivo, como si nos asustara en lo que podríamos llegar a ser y de hecho es probable que seamos: algo que trasciende la naturaleza, individuos con una consciencia con libre albedrío con la responsabilidad de decidir su propio destino. Un hueco que no se ha llenado lo suficiente es el de la especulación realista sobre futuros mejores, sobre futuros ejemplares, y porque no, utópicos. Si el problema es que estamos acostumbrados a <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2017/02/en-busca-de-la-utopia.html">un tipo de utopía</a> que no nos sirve como modelo, entonces será necesario cambiarla.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Imágen: <i><a href="http://www.susted.com/wordpress/content/solarpunk-the-pedagogical-value-of-utopia_2020_05/" target="_blank">Solarpunk & el pedagógico valor de la Utopía</a></i></div><div style="text-align: justify;"><br /></div>
<span style="font-size: large;"><div style="text-align: center;"><b>Publicado anteriormente en el blog <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2021/04/cambiar-la-utopia.html" target="_blank"><i>Al final de la Eterni</i></a></b><b><a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2021/04/cambiar-la-utopia.html" target="_blank"><i>dad</i></a></b></div><div style="text-align: center;"><br /></div></span>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-69547389329593522672021-01-03T09:30:00.029+01:002023-12-04T20:24:20.251+01:00La versión del director<div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjGD1rKK7DLHdiUDsO9F7_Wkkd_iDT2ViUvGJAW7iMxkOatYtJut68ZJ4dUVGTFGPsSkVMWoUtc5h-lSnATfczlvPLNACgMTz2yvhTOKteN5Hy48LjS4nvGMa_dulBpg1JICKkZFMF5ogI/s960/Zack-Snyders-JL-Justice-League-Cut.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="960" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjGD1rKK7DLHdiUDsO9F7_Wkkd_iDT2ViUvGJAW7iMxkOatYtJut68ZJ4dUVGTFGPsSkVMWoUtc5h-lSnATfczlvPLNACgMTz2yvhTOKteN5Hy48LjS4nvGMa_dulBpg1JICKkZFMF5ogI/s320/Zack-Snyders-JL-Justice-League-Cut.jpg" width="320" /></a></div></div><br />¿A partir de qué momento un producto cultural que nos apasiona nos convierte en meros consumidores del mismo? Es inevitable que si una obra es atractiva, tarde o temprano va a ser explotada comercialmente. Pero ¿son los expertos en marketing conocedores de la importancia cultural de la obra? ¿Saben apreciar sus matices, los que le han llevado a su reconocimiento? Sin entrar en juicios de valor sobre unos u otros, está claro en cualquier caso que en ocasiones, las necesidades comerciales afectan al resultado. Si no fuera así, no existirían las <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Versión_del_director">versiones del director</a>, los llamados <i>cortes</i>.</div><span><a name='more'></a></span><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Puede que sea la ciencia-ficción más popular y por ello, más codiciada por las productoras, donde se han hecho más habituales. Salvo el llamado <i>cine de autor</i> ―en el que es el propio director el productor de su obra― la pugna entre la libertad creativa y las necesidades comerciales de los que ponen los recursos, es lo que decide el producto que finalmente se ve en las salas. Desde <i>Blade Runner</i> con <b>Ridley Scott</b>, hasta <i>Los Últimos Jedi</i> de <b>Ryan Johnson</b>, pasando por <i>Los Cuatro Fantásticos</i> de <b>Josh Trank</b>. Unas Veces se inclina hacia un lado y otras hacía otro. Un caso reciente que podría resultar paradigmático por la repercusión y sobre todo, porque parece demostrar el poco éxito de la imposición de las ideas comerciales de los productores, es la todavía por estrenar versión de <b>Zack Snyder</b> de <i>La Liga de la Justicia</i>. Pero antes, un muy breve resumen de cómo se ha llegado hasta aquí.<span><!--more--></span></div><h2 style="text-align: justify;">Del papel a la pantalla</h2><div><div style="text-align: justify;">Aunque películas de superhéroes han existido desde hace décadas, no ha sido hasta entrado este siglo cuando han encontrado la coyuntura necesaria que les ha convertido en un género de éxito. Sobre todo el comercial. El primer paso se dio con <i>Spiderman </i>(<b>Sam Raimi</b>, 2002), que comenzó a aprovechar los incipientes efectos digitales generados por computador, también llamados CGI. Pero fue solo un paso pequeño que no llegó a finalizarse, debido tal vez a que el público no estaba preparado para ver su personaje favorito recreado digitalmente ―el mismo público que unos años después abarrotaría las salas para ver productos digitalizados prácticamente en su totalidad―. Pero no nos adelantemos. El considerado paso definitivo fue el dado por <i>El Caballero Oscuro</i> (<b>Christopher Nolan</b>, 2008) donde el director londinense tuvo suficiente libertad creativa para mostrarnos un <i>Batman </i>inédito, un personaje <i>real</i>, que se olvidaba del lenguaje del cómic, de los disfraces calcados, de los villanos de opereta, y lo adaptaba usando el lenguaje propio del medio usado, no otro ajeno a él. El resultado ya es historia, otras películas de superhéroes comenzaron a venir, siendo la más significativa <i>Iron Man</i> (<b>Jon Favreau</b>, 2008) cuyo éxito confirmó una situación que conllevó la compra de <b>Marvel </b>por parte de <b>Disney</b> el 31 de agosto de 2009, aprovechando la coyuntura para poner lo que hacía falta y construir todo un universo cinematográfico. No solo eso, se llevó con ella el talento creativo contratando al propio <b>Jon Favreau</b> y el productor <b>Kevin Feige</b>, designados a cargo del proyecto y haciendo un buen trabajo uniendo las historias particulares de cada personaje con la suficiente coherencia. El éxito fue tan grande y tan rápido que otros creyeron que era solo cuestión de dinero.</div><h2 style="text-align: justify;">Imitar sin comprender</h2><div style="text-align: justify;">La <i>Trilogía del Caballero Oscuro</i> ha sido de las más exitosas e influyentes culturalmente tanto en el género como en el mundo cinematográfico. <b>Warner </b>y <b>DC </b>lo tenían todo encarrilado en apariencia. Sin embargo, aunque habían <i>abierto el melón</i> <a href="https://planetasprohibidos.blogspot.com/2014/06/imitados-pero-incomprendidos.html">no supieron qué hacer</a> a continuación. Así que mientras tanto, tuvieron que contemplar atónitos el espectacular paso triunfal de la competencia. Con <b>Nolan </b>continuando con sus cosas, necesitaban otro talento creativo que llevara los héroes de la <b>DC </b>a la gran pantalla ¿Qué otro director ha destacado por sus adaptaciones al cómic? Aquí es donde aparece <b>Zack Snyder</b>, que cuenta con las reconocidas adaptaciones de los cómics <i>300 </i>de <b>Frank Miller</b> y <i>Watchmen</i> de <b>Alan Moore</b> como guionistas. Si bien los más expertos en el mundillo del cine suelen ser críticos con su excesivo uso de la cámara lenta y las imágenes congeladas, e independientemente de otras apreciaciones subjetivas, se puede decir que intenta respetar la obra original y dotar de cierto sentido estético ―visual y simbólico― a su obra. En definitiva, se le ve <i>disfrutar </i>de su trabajo, como consecuencia, su obra es el reflejo de la pasión que pone en ella. Algo que es de agradecer en estos <a href="https://www.tomatazos.com/noticias/541690/Christopher-Nolan-feliz-de-dirigir-Batman-antes-de-que-los-superheroes-se-volvieran-motores-de-comercio" target="_blank">tiempos de obsesión crematística</a> rápida y fácil, independientemente de la opinión que se tenga de él como profesional. </div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">El primer fruto del intento de la <b>DC </b>en construir su propio universo cinemático con <b>Snyder </b>de fuerza creativa fue <i>El hombre de acero</i> (2013), una cinta que aunque no arrolló, logró <a href="https://www.tomatazos.com/articulos/380399/Por-que-El-Hombre-de-Acero-es-la-mejor-pelicula-de-Superman-de-toda-la-historia" target="_blank">reinventar de manera sólida</a> por primera vez al Superman de <b>Christopher Reeve</b>. Este era un escollo que el anterior intento de <b>Brandon Routh</b> con <i>Superman Returns</i> (<b>Bryan Singer</b>, 2006) no pudo superar, al intentar el imposible de traer de vuelta a la versión irrepetible de <b>Richard Donner</b>. <b>Snyder</b>, con asesoramiento del propio <b>Nolan </b>se desvinculó creativamente de lo que se conocía en pantalla del personaje y nos trajo a la versión más realista realizada hasta la época. Todo iba a su ritmo dado lo alto del listón dejado por <b>Nolan</b>, más lento que el MCU pero caminando sobre terreno firme, siendo las críticas provenientes de los aficionados más chillones y fanáticos que seguían pidiendo un calco del personaje de papel y «más humor», olvidando que la creación de un héroe necesita de una mitología <a href="https://planetasprohibidos.blogspot.com/2020/11/la-tragedia-del-heroe.html">construida sobre una tragedia</a>.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">La cuestión es que todo comenzó a torcerse con <i>Batman </i>v<i> Superman</i> (<b>Snyder</b>, 2016), debido al nerviosismo de <b>Warner</b> al ver a la competencia marchar como una locomotora mientras sus que productos convencían, pero no creaban ni alimentaban al <i>fanatismo</i>. Ansiosos por replicar a <b>Marvel </b>y para querer contentar a todo el mundo, obligaron a recortar la mencionada obra para hacerla supuestamente más ligera, pero lo que hicieron fue eliminar fragmentos que le hacían perder coherencia y sentido. El resultado, en lugar de arreglar nada lo estropeó todo, siendo la versión extendida, con todo el metraje original del director, lo único que merece la pena. Repitió el mismo error con <i>El escuadrón suicida</i> (<b>David Ayer</b>, 2016), un engendro que agrupa un batiburrillo de personajes del montón que juntos no ofrecen la más mínima coherencia. El desastre se consumó cuando una desgracia familiar obliga por las circunstancias a <b>Snyder </b>a dejar sus obligaciones laborales, en concreto, la filmación de <i>La Liga de la Justicia</i> (<b>2017</b>). Fue sustituido por <b>Joss Whedon</b>, un director conocido por <i>Buffy, cazavampiros</i> (1997) y sobre todo, por la espectacular <i>Los Vengadores</i> (2012), la película que confirmó la triunfal marcha del MCU. Pero <b>Whedon </b>no era el alma creativa del universo marvelita. Cargar sobre sus hombros la misión de repetir lo que ni él mismo pudo con <i>Los Vengadores: la era de Ultrón</i> (2015), desembocó en un <i><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Exploit" target="_blank">exploit </a></i>de <b>Marvel</b>, reduciendo un concepto pionero del género como la <i>JLA </i>a un grupo cualquiera de personas con trajes y poderes, sin personalidad, sin historia, sin justificación, metidos con calzador en un guion pobre y cambiado sobre la marcha. </div><h2 style="text-align: justify;">La paradoja del aficionado</h2><div style="text-align: justify;">Resulta paradójico que haya tenido que ser un grupo de seguidores los que con una iniciativa difundida gracias a su esfuerzo, los que hayan logrado hacer recapacitar a la productora a considerar la versión inicial de <b>Snyder, </b>que nunca tuvo que haberse alterado y menos motivado por lo que fue ¿Qué clase de aficionados son? ¿un grupo de fanáticos chillones? Los llamados <i>haters </i>no son algo por desgracia nuevo. Llevan apareciendo desde el estreno de <i>Los Últimos Jedi</i>, <i>Captain Marvel</i> (2019) o <i>Star Trek: Discovery</i>. Pero no estar de acuerdo con lo ofrecido en pantalla no es lo que distingue a un <i>hater</i>, sino su actitud. En el caso del #<i>releasesnydercut</i>, no se han dedicado a increpar, insultar y menospreciar, sino que reclamaban el respeto por la creación cultural y la libertad creativa. Iniciativa a la que se han sumado algunos actores protagonistas como <b>Gal Gadot</b> y <b>Ben Affleck</b>. Y lo más importante, porque en lugar de destruir han logrado <a href="https://screenrant.com/justice-league-zack-snyder-cut-afsp-donations-response/" target="_blank">recaudar miles de dólares</a> para donarlos a una asociación para la prevención del suicidio. En cualquier caso, el problema no es la versión de <b>Whedon</b>, sino desvirtuar lo ideado por otra persona por <a href="https://www.tomatazos.com/noticias/557673/Ray-Fisher-declara-que-Joss-Whedon-quiso-reparar-su-ego-con-Liga-de-la-Justicia-tras-fracaso-de-Avengers-2" target="_blank">motivos poco edificantes</a>.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhxWyYI_HvWxTTwVycJphyNBFEzLfAm8EcdP8xhxr_8NVnvXhx-w5v7vfmQFEqqL9hduE_TJKsfe4v887-lRXea4bXQbEXliA7gIdEaoqxWAIw6WSjWK5n2JeQzaFfmlVmtwXXrnCYQRpA/s1229/Batman+Wonder+Snyder.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="679" data-original-width="1229" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhxWyYI_HvWxTTwVycJphyNBFEzLfAm8EcdP8xhxr_8NVnvXhx-w5v7vfmQFEqqL9hduE_TJKsfe4v887-lRXea4bXQbEXliA7gIdEaoqxWAIw6WSjWK5n2JeQzaFfmlVmtwXXrnCYQRpA/s320/Batman+Wonder+Snyder.jpg" width="320" /></a></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Qué versión será mejor o cuál va a gustar a un mayor número de aficionados no es de lo que va la historia, sino de un grupo valiente de aficionados que han defendido un modo de hacer cine que rinde respeto a su propio lenguaje y a la creatividad, por encima del rendimiento comercial.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">¿Y tú, qué tipo de aficionado eres?</div></div>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-240046432611825672021-01-02T20:55:00.002+01:002021-04-30T12:04:08.428+02:00Europa se lanza a la búsqueda de visionarios<div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi6gPbziHH_0mx5Xa5N4yWFhWL-h4YVtPB1VZ5DxNkyAlFvY6s97Ezj2-mnrWzMl_wNVGqn0ipNGX1BhpocFUVqJnY4PQXUltUDTaj8RmAkOIQOx2hf0Sac6vf0ZLZ-955E7HpttW19KWY/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="711" data-original-width="400" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi6gPbziHH_0mx5Xa5N4yWFhWL-h4YVtPB1VZ5DxNkyAlFvY6s97Ezj2-mnrWzMl_wNVGqn0ipNGX1BhpocFUVqJnY4PQXUltUDTaj8RmAkOIQOx2hf0Sac6vf0ZLZ-955E7HpttW19KWY/" width="135" /></a></div></div><div style="text-align: justify;"></div><div style="text-align: justify;"></div>
<h2 class="destacadoTitulo03" style="background-color: white; box-sizing: border-box; color: #1867b7; font-family: Lato, sans-serif; line-height: 1.1; margin-bottom: 10px; margin-top: 20px; text-align: justify;"><span style="color: black; font-size: 14px; font-weight: 400; text-align: start;"><blockquote style="text-align: justify;">¿Cómo puede ayudar la ciencia ficción a resolver los desafíos tecnológicos –y sociales- que vivimos hoy? Esta es una de las preguntas de las que parte esta propuesta, que tiene como principal objetivo invitar a estudiantes de ingeniería y carreras STEM de todo el mundo a emplear la narrativa de ciencia ficción como herramienta para visualizar futuros posibles y anticipar el impacto de las tecnologías sobre los ecosistemas físicos y digitales que habitamos hoy y habitaremos mañana. Para el equipo de organización del certamen es además un llamamiento y una oportunidad para dar voz a jóvenes visionarios y nuevos talentos del género.</blockquote></span></h2><div><br /></div><div><a href="https://www.upm.es/?fmt=detail&id=764b41dc714f8710VgnVCM10000009c7648a____&prefmt=articulo" target="_blank">Continuar leyendo en la noticia original</a></div><div><br /></div>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-87276548315664140372020-11-22T09:00:00.048+01:002021-12-31T12:30:16.224+01:00La tragedia del héroe<div class="separator" style="clear: both; text-align: right;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><blockquote style="text-align: left;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: right;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvEqPupS-7fy9CUeWges3HpzRlvvM0zvXST2GmYYj3fCvKqLkEIu3bGMEUTGhUDHgAPhtK6b9XUnjrd8Pk_drn3AokasjdCDKAOrWQC_F9JONWPUcjR4kLnKNEK84NySL36ajL9rPkoLg/s1400/cameron-corvetti-boys-season-2-finale%255B1%255D.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Ryan Butcher (Cameron Crovetti), el hijo de 'Homelander'" border="0" data-original-height="700" data-original-width="1400" height="160" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvEqPupS-7fy9CUeWges3HpzRlvvM0zvXST2GmYYj3fCvKqLkEIu3bGMEUTGhUDHgAPhtK6b9XUnjrd8Pk_drn3AokasjdCDKAOrWQC_F9JONWPUcjR4kLnKNEK84NySL36ajL9rPkoLg/w320-h160/cameron-corvetti-boys-season-2-finale%255B1%255D.jpg" title="Ryan Butcher (Cameron Crovetti), el hijo de 'Homelander'" width="320" /></a></div><br />«Enséñame un héroe, y te escribiré una tragedia» </div></blockquote><div class="separator" style="clear: both; text-align: right;"><b>(Francis Scott Fitgerald) </b></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;">Nacido a mediados del siglo pasado en el mundo del cómic, el género de los superhéroes está viviendo una época de esplendor gracias a su adaptación a la gran pantalla. Sin entrar detalles sobre cómo, cuando y qué obras han sido más influyentes, a tenor de los proyectos que hay previstos ―no solo de las conocidas <b>Marvel </b>o <b>DC</b>, sino de otras como <b>Valiant</b>― parece que todavía queda género para un tiempo. Sin embargo, no es menos cierto que comienzan a surgir reacciones a este fenómeno cultural, en forma de críticas a la excesiva idealización e irrealismo de sus personajes.<span><a name='more'></a></span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;">En sus inicios, los superhéroes eran personajes únicos, creados tras una serie de circunstancias igualmente singulares. Simbolizaban la necesidad de buscar nuestro héroe interior, sobre todo en épocas de crisis. A medida la idea fue teniendo éxito y se le observaba potencial, crearon otros personajes con orígenes igualmente específicos y especiales que los definían de manera ineludible, que en principio no ocupaban el mismo universo ―Batman y Superman, por ejemplo, cada uno en una ciudad ficticia distinta―. Estos héroes y heroínas decidían dedicar sus poderes a combatir el crimen de manera altruista. Esta circunstancia podríamos acordar que en cualquier caso, se calificaría como poco probable. Pero lo importante es que lo improbable no es <span style="text-align: left;">imposible. Esa excepcionalidad es lo que hacía a la idea tan atractiva. Hacer un relato de lo excepcional no es poco realista, es de hecho lo que se hace en muchas ocasiones, no sólo en el ámbito de la ciencia-ficción. Porque es precisamente lo que vale la pena contar.</span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;">Es aquí cuando al igual que en todo lo relacionado con la producción cultural sujeta a factores y variables económicas, el concepto original comenzó a desvirtuarse y a ser modificado por otros parámetros ajenos. Los personajes, inicialmente cada uno con una historia que definía con precisión sus motivaciones, comenzaron a compartir un mismo mundo. Lo excepcional pasó a convertirse en ubicuo, perdiendo su principal característica. El genero a su vez, de ser un medio para evadir la rutina, enfrentarse al hastío cotidiano y buscar nuestra épica personal, a convertirse en un fin en si mismo, un <a href="https://www.tomatazos.com/noticias/541690/Christopher-Nolan-feliz-de-dirigir-Batman-antes-de-que-los-superheroes-se-volvieran-motores-de-comercio" target="_blank">producto comercial</a> que no se preocupaba de su justificación. El resultado no era siempre malo, pero olvidarse de tus orígenes nunca ha sido bueno tampoco. A consecuencia de ello o no, los superhéroes en el cómic fueron languideciendo paulatinamente con el paso del tiempo. </div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;">La idea revivida gracias a la magia del cine <a href="https://www.nytimes.com/es/2019/11/11/espanol/opinion/martin-scorsese-marvel.html" target="_blank">se enfrenta de nuevo</a> a la misma situación de entonces: superhéroes por doquier divididos en buenos y malos, olvidando la circunstancia única que crea al héroe y que el villano puede ser cualquiera con un poder otorgado azarosamente. El mejor ejemplo de reacción a esta situación se muestra en la serie <i>The Boys</i> (<b><a href="https://www.filmaffinity.com/es/search.php?stype=director&sn&stext=Evan%20Goldberg">E.Goldberg</a></b>, <a href="https://www.filmaffinity.com/es/search.php?stype=director&sn&stext=Seth%20Rogen"><b>S.Rogen</b></a>, <a href="https://www.filmaffinity.com/es/search.php?stype=director&sn&stext=Eric%20Kripke"><b>E.Kripke</b></a>, 2019), que resume lo que el <i>Miracleman</i> de <b>Alan Moore</b> o la reciente película <i>El Hijo</i> (<b>David Yarovesky</b>, 2019) transmitían: un ser humano de a pie, como cualquiera de nosotros, con nuestros complejos, traumas y vicios, se dedicaría a satisfacerlos si poseyera todos esos poderes. <i>The Boys</i> <a href="https://www.20minutos.es/cinemania/series/si-esta-escena-de-the-boys-queria-parodiar-vengadores-endgame-161600/" target="_blank">acierta en su crítica</a> al mostrarnos un mundo corrupto con superhéroes cargados de defectos, al servicio de los mejores pagadores, sean privados o públicos. Sin embargo, el fallo de la serie se encuentra precisamente en lo que de momento, omite: los verdaderos héroes son aquellos que se forjan a través de sus propias tragedias.</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><div style="text-align: center;"><span><b><a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2021/01/la-tragedia-del-heroe.html" style="color: #557799; text-align: left; text-decoration-line: none;" target="_blank"><span style="color: #557799;"><span style="text-align: left;"><span style="font-size: medium;">Publicado posteriormente en el blog </span><i style="font-size: x-large;">Al final de la Eternidad</i></span></span></a><br /><span style="font-size: x-small;">y</span></b></span></div><span style="text-align: left;"><div style="text-align: center;"><a href="https://www.ciencia-ficcion.com/varios/firmas/f20210718.htm" target="_blank"><i>El Sitio de ciencia-ficción</i></a></div></span></div></div></div>Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-85825455649408330392020-05-17T10:00:00.005+02:002021-12-31T12:30:05.096+01:00Más rápido que la luz<div style="text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://www.youtube.com/watch?v=t8LD0iUYv80" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;" target="_blank"><img alt="Fotograma del cortometraje FTL" border="0" data-original-height="576" data-original-width="1038" height="177" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgFl4Pwtfohs1hnDHNNHYdJN02htke8-1kdMV91pwZ8RvFDEpiI6Sj3BBrMYHaoGoyFYm8obTC4_5YX1RMp8hxDaCFULrNVbBJrSRxuU7HtiqiU1XNpTHJS2Am0AClZsas0ep-Z1qpu2QLI/s320/FTL-corto-1038x576%255B1%255D.jpg" title="Fotograma del cortometraje FTL" width="320" /></a></div>
<br />
Las estrellas despiertan en la especie humana una especial fascinación. Pero para poder satisfacer nuestra naturaleza exploradora será necesario superar el reto del viaje interestelar. Todo lo que <a href="https://www.abc.es/ciencia/abci-nasa-planea-primer-viaje-interestelar-historia-201712201127_noticia.html" target="_blank">actualmente puede lograr</a> son viajes no tripulados de décadas de duración solo de ida. Lejos, muy lejos de los sueños en los que la humanidad se imagina a si misma alcanzando con audacia nuevos mundos y descubriendo nuevas civilizaciones, cruzando el cosmos sin estar limitados por las fronteras de la física actual.<br />
<h2>
<a name='more'></a>Expandiendo fronteras</h2>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgu8p6BZWsIUB1zgUbgjtazmlEEldlVGZVKylPdHp-r0f5bsKtSirRyfexR3pd2yj7Hhnl3DQnZ8LeGe95y28syWfWH7ofUDn05IAELDTkF8WHXsYi2fui179HfVhshqZ5BZn2vLsJwbKAt/s1600/1%255B1%255D.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="300" data-original-width="400" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgu8p6BZWsIUB1zgUbgjtazmlEEldlVGZVKylPdHp-r0f5bsKtSirRyfexR3pd2yj7Hhnl3DQnZ8LeGe95y28syWfWH7ofUDn05IAELDTkF8WHXsYi2fui179HfVhshqZ5BZn2vLsJwbKAt/s320/1%255B1%255D.jpg" width="320" /></a></div>
<br />
Cuando un autor imagina una galaxia conquistada por la humanidad está extrapolando a <a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2017/01/rompiendo-escalas.html">escalas que rompen con nuestros esquemas</a>. Alguien puede preguntarse para qué se necesita llegar a esto. Una de las posibles respuestas es que de esta manera se consigue «deslocalizar» al lector o espectador de cualquier tiempo o lugar conocido, que no sea nuestra propia alma humana. Los viejos problemas de viejas y rancias historias, no podrán interferir más que lo que el autor desee. Ahora bien, en la ciencia-ficción la presentación del escenario ha de resultar verosímil en un grado determinado, lugar al que se le llama <i><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Suspensi%C3%B3n_de_la_incredulidad" target="_blank">punto de suspensión de la incredulidad</a></i>. Para ello ha de postularse con un método de comunicación y transporte que permita su existencia para tales distancias. Por tanto, si en una obra de ciencia-ficción se habla de «viajes más rápido que la luz» no es porqué se crea que esto es posible hacerlo sin más o porque no tengan ni idea de física, sino porque se está especulando sobre nuestro universo o sobre nosotros mismos como especie, colocándonos para ello en una nueva situación.<br />
<br />
En función de las posibilidades del autor o del público al cual desea dirigirse, hay un esfuerzo creativo en mostrar maneras verosímiles e imaginativas para sortear los límites de la física conocida. Unas fronteras que así mismo, <a href="https://interestingengineering.com/from-point-a-to-point-b-how-do-we-achieve-interstellar-flight?" target="_blank">científicos e investigadores</a> se afanan por superar para poder lograr alcanzar el sueño de viajar por el cosmos y poder volver para contarlo. Si <b>Isaac Newton</b> logró explicar el universo de una manera que todavía hoy sigue siendo válida para muchas actividades, <b>Einstein</b> logró ir más allá que el británico y sin invalidar su trabajo, lo amplió. Por tanto, nada nos impide especular que el trabajo del alemán puede ser a su vez ampliado con nuevas posibilidades de reducir las grandes distancias, temporales y espaciales, que nos separan de nuestro anhelo explorador.<br />
<h2>
Cruzando el Universo</h2>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgAixQQY1Zj8MrdjSjVv0DZrU_tS5eZM0QZy6iKSRUqyaDfChwuuu-fX-EIkjNGjCO-Tkay34OADJxCBCBOoCW8fsvHU0PmkJVnmqPkvTtIQCo4Z6szzF6gZexs2dWXkPIk3UC1KrzITWNF/s1600/800px-Wormhole_travel_as_envisioned_by_Les_Bossinas_for_NASA%255B1%255D.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Wormhole travel as envisioned by Les Bossinas for NASA (Wikipedia)" border="0" data-original-height="600" data-original-width="800" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgAixQQY1Zj8MrdjSjVv0DZrU_tS5eZM0QZy6iKSRUqyaDfChwuuu-fX-EIkjNGjCO-Tkay34OADJxCBCBOoCW8fsvHU0PmkJVnmqPkvTtIQCo4Z6szzF6gZexs2dWXkPIk3UC1KrzITWNF/s320/800px-Wormhole_travel_as_envisioned_by_Les_Bossinas_for_NASA%255B1%255D.jpg" title="Wormhole travel as envisioned by Les Bossinas for NASA (Wikipedia)" width="320" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
Dejando a un lado los casos donde los viajes se realizan a velocidades sublumínicas y en los que los tripulantes se hibernan o viven varias generaciones hasta llegar al punto de destino, desde hace décadas que las obras de ciencia-ficción usan ciertos artificios para representar los viajes interestelares sin vulnerar el límite físico explicito de la velocidad de la luz. Normalmente, el foco de interés de las obras en cuestión no está en el método escogido para sortear esta dificultad, sino en los nuevos caminos que esta situación ficticia abre para explorar. Pero antes de llegar a lo imaginario, partamos de la realidad y hagamos una reflexión sobre la luz y su «record» de velocidad imbatible.<br />
<h3>
La velocidad de la luz<span style="font-weight: normal;"><span style="font-size: x-small;"> <br />
—lo explicado en este apartado es sobre aspectos científicos reales—</span></span></h3>
¿Por qué la luz va a esa velocidad? ¿Sólo es la luz la que puede hacerlo? La luz es una radiación electromagnética como las ondas de radio, pero de distinta frecuencia. Nuestros ojos, los de los humanos y otros animales, son sensibles a ese espectro de frecuencias que hemos convenido en llamar «luz». Esta tiene un carácter direccional que hace que sea más fácil representarla como haces de partículas, pero realmente, toda radiación presenta un carácter dual de emisiones de <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Dualidad_onda_corp%C3%BAsculo" target="_blank">onda-partículas</a>, también llamadas <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Fot%C3%B3n" target="_blank">fotones</a>. Por tanto, como regla general, toda radiación electromagnética se traslada a la misma velocidad, la máxima permitida en nuestro universo físico.<br />
<br />
No existe una relación «newtoniana» clásica por la que se pueda deducir que esas partículas vayan a ir a esa velocidad y no otra. El «truco» es que los fotones no tienen una masa asociada en reposo. Estos corpúsculos son unos paquetes o «cuantos» de energía que son emitidos cuando se alcanza un determinado nivel energético, de manera que se emite a nivel atómico un cuanto o fotón de radiación. En función de la energía generada, ese fotón presentará como onda una determinada frecuencia sin influir en la velocidad, que siempre será la misma.<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
La razón de esta situación es <a href="https://cuentos-cuanticos.com/2013/05/02/el-foton-y-la-masa/" target="_blank">complicada de explicar</a>, todavía más para un profano. A grandes rasgos se puede decir que nada puede existir si no tiene masa. Por su equivalencia con la energía, todo en nuestro universo conocido es una cosa u otra —dejemos de momento la energía y materia oscura—. Como los fotones tienen masa nula, la fórmula clásica <a href="http://www.phy6.org/stargaze/Mnewt2nd.htm" target="_blank"><i><span style="color: black;">f = m a</span></i></a> no puede aplicarse en este caso. La energía producida se ha empleado en generar una partícula sin masa en reposo, pero con una determinada energía cinética equivalente. Esto significa, en efecto, que <a href="https://www.youtube.com/watch?v=ASRpIym_jFM&list=PLED25F943F8D6081C" target="_blank">un fotón está obligado a volar a la máxima velocidad posible para poder seguir existiendo</a>, ya que toda su masa es energía cinética. La famosa ecuación <img alt="E=mc^{2}\,\!" aria-hidden="true" class="mwe-math-fallback-image-inline" src="https://wikimedia.org/api/rest_v1/media/math/render/svg/c1637b8d230ce4a8329f15d9ab8852ebd2f50d84" style="background-color: white; border: 0px; display: inline-block; font-family: sans-serif; font-size: 12.7px; height: 2.676ex; margin: 0px -0.387ex 0px 0px; text-align: left; vertical-align: -0.338ex; width: 9.363ex;" title="E=mc^{2}\,\!" /> se aplica a masas en reposo, siendo la de cuerpos en movimiento algo más complicada. Así mismo, todo <a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2013/03/Mr-higgs-ciencia-ficcion.html">lo que tiene masa</a> está «retenido» como con un ancla al éter espacial, imposibilitándole alcanzar la velocidad de la luz acelerándolo desde reposo.</div>
</div>
<h3>
Hiperespacio<br />
<span style="font-size: x-small;"><span style="font-weight: normal;">—lo explicado en adelante es sobre aspectos ficticios, salvo que se indique lo contrario—</span><br />
</span></h3>
<div style="text-align: justify;">
El <i><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Hiperespacio_(ciencia_ficci%C3%B3n)" target="_blank">hiperespacio</a> </i>es el más clásico de los métodos ficticios para viajar más rápido de la luz. Inventado por el propio <b>John W. Campbell</b>, ha sido una solución poco elaborada, pero sencilla y práctica para hacer verosímiles en las obras las proezas que se realizan en ellas. La idea se podría describir de manera simple como «un salto abrupto de un punto del espacio tridimensional conocido a otro, a través de una cuarta dimensión». El «cómo» es astutamente ignorado, por motivos obvios. La obra que más lo ha popularizado es sin lugar a dudas <i>Star Wars</i>. En este caso, las astronaves no realizan los saltos de manera completamente inmediata, sino que hay algún tipo de gran aceleración súbita antes de entrar en el <i>hiperespacio</i>, de ahí el famoso efecto de las estrellas —y también, el uso que en <i>Los Últimos Jedi</i> se hace—. Un efecto homólogo se asume que ocurre al emerger de vuelta al espacio habitual. Otro ejemplo similar más reciente se ha podido ver en <i>Dark Matter</i> (<b>SyFy</b>, 2015~2017), donde un motor de una nueva tecnología permite saltar de un punto a otro en el espacio en un «<a href="https://darkmatter.fandom.com/wiki/Blink_Drive" target="_blank">destello</a>». En este caso, la aparición de esta innovación en el universo ficticio de la obra implica una disrupción tecnológica codiciada por los poderes dominantes.</div>
<div>
<h3 style="text-align: justify;">
Subespacio</h3>
</div>
<div style="text-align: justify;">
Con mayor cuidado científico han ideado en <i>Star Trek</i> el llamado <a href="https://www.ciencia-ficcion.com/series/startrek/tecnologia/subesp.htm" target="_blank"><i>subespacio</i></a>. En este caso no se trata de «otra dimensión», sino que se hace uso de una cualidad de la nuestra. Los enormes motores que se usan en los navíos de esta saga —cuya capacidad abastecería actualmente varias veces a todo el planeta—, son llamados en la obra como de <i><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Curvatura_(Desplazamiento)#El_motor_de_curvatura_en_Star_Trek" target="_blank">curvatura</a></i>. Inspirados tal vez por esta terminología, el mundo científico ha especulado precisamente con el concepto de «curvar» el espacio de manera que no se está superando el límite físico de la velocidad de la luz, sino que lo que se hace en su lugar es <b>comprimir el espacio por delante y expandirlo por detrás</b>. Es decir, si no puedes aumentar la velocidad, al menos nadie ha dicho que no se pueda hacer más pequeña la distancia, «arrugando» el espacio. La misma ciencia apoya este concepto empezando por el propio <b>Einstein</b>, que<b> </b><a href="https://www.bbc.com/mundo/noticias-47900442" target="_blank">descubrió</a> que la gravedad no es otra cosa que una deformación de nuestro espacio-tiempo, el cual puede transformarse en ciertas condiciones teóricas. De hecho, es ya famosa la propuesta del científico de origen mejicano <b>Miguel <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/M%C3%A9trica_de_Alcubierre" target="_blank">Alcubierre</a></b> que se basa precisamente en este fenómeno. La hipótesis es en principio matemáticamente correcta pero <a href="https://www.bbvaopenmind.com/ciencia/fisica/propulsion-espacial-manipulando-el-espacio-tiempo-puede-pasar-del-papel-a-la-realidad/" target="_blank">inviable en la práctica</a>, ya que la energía necesaria sería equivalente a la proporcionada por un objeto astronómico como una estrella. Pero se está en ello.</div>
<h3 style="text-align: justify;">
Plegando el espacio</h3>
<div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
En la <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Dune_(franquicia)" target="_blank"><i>Saga de Dune</i></a> se usa un concepto similar en cuanto a modificar el espacio-tiempo, pero en lugar de curvar se usa el término «plegar» el espacio. Aunque el fundamento del sistema de viaje interestelar está rodeado de un aura mística, obedece a una precisa recreación en donde la política se ha mezclado con la religión, en una clara imitación a la dominación papal del Mediterráneo feudal del medioevo. Aún así, tiene el acierto de hacer uso del mismo principio —válido— de modificar el espacio para acortar la distancia, en lugar de aumentar la velocidad. En la obra, esta tecnología está representada a través del del ficticio <i><a href="https://en.wikipedia.org/wiki/Holtzman_effect#Holtzman_drive">Motor Holtzman</a>.</i></div>
</div>
</div>
<h3 style="text-align: justify;">
Agujeros de gusano</h3>
<div style="text-align: justify;">
Lo más científico que se puede encontrar en las obras de ciencia-ficción además del <i>motor de curvatura</i>, son tal vez los métodos basados en atravesar el espacio de un punto a otro a través de una singularidad denominada <i><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Agujero_de_gusano" target="_blank">agujero de gusano</a>. </i>Basándose en las propiedades geométricas del espacio-tiempo en el que existe nuestro universo descubiertas por <b>Einstein</b>, la ciencia ha postulado con una estructura topológica en forma de agujero que uniría dos puntos del mismo, tanto en el espacio como en el tiempo —según la teoría, cualquier viaje a mayor velocidad de la luz sería de alguna manera un viaje en el tiempo—. Este conducto o agujero, transcurriría por una cuarta dimensión al igual que un túnel lo hace por el subsuelo. Teóricamente, podría cruzarse todo el universo de una punta a otra en prácticamente un instante o una fracción de tiempo minúscula en comparación. De nuevo, al igual que sucedía con el <i>motor de curvatura</i>, el límite a este fenómeno son las energías necesarias para generar un objeto de este tipo, además de la incógnita de mantenerlo estable y sobre todo, cómo podría realmente cruzarse. En las obras de ciencia-ficción estos problemas se presentan ya resueltos para poder ir al grano. El caso más gráfico y popular sería tal vez la franquicia de <i>space-opera <b>Stargate</b></i>, donde sus protagonistas usan una tecnología alienígena cuyos principios de funcionamiento desconocen, lo que no les impide usar un artefacto que genera un agujero de gusano entre dos coordenadas establecidas, perfectamente transitable.<br />
<h3>
<i>El Flujo</i> (John Scalzi)</h3>
Tal vez el más reciente de los métodos imaginarios para viajar más rápido que la luz sea el creado por <b>John Scalzi</b> (<i><a href="https://www.ohlibro.com/el-fin-del-imperio/b-481210" target="_blank">El Fin del Imperio</a></i>, 2017) en su <i>Saga de la Interdependencia</i>. En ella, la humanidad no logra su anhelo de alcanzar las estrellas hasta que descubre el <i>Flujo</i>, unos puntos interdimensionales que se encuentran repartidos por el espacio-tiempo a través de los cuales es posible viajar por el Cosmos y fundar así un imperio galáctico. Sin tener más conocimiento de la obra, se diría que son algo así como unos agujeros de gusano espontáneos, grietas naturales de nuestro universo por las que es posible aparecer en la otra punta del mismo. El método de viaje interestelar es el centro de la trama y la <a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2011/03/la-concesion-cientifica.html" target="_blank">concesión científica</a> que define el universo donde evolucionan los personajes, así como el motor de la historia.</div>
<h2 style="text-align: justify;">
La comunicación</h2>
<div>
<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiT01ycIJvNaky6xC-TpMum1CcjFBgj9FFrtuoGXprYa3NhAUNMiuMdykfujmpjf3qvBNsyhQo9s38lQVAiod92DORRVXBJneBhV7tzyIuGoVw85TdMNcThYUZJ4FT0ev22ucybN0Bn70Nw/s1600/Sidious_holograma%255B1%255D.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="295" data-original-width="516" height="182" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiT01ycIJvNaky6xC-TpMum1CcjFBgj9FFrtuoGXprYa3NhAUNMiuMdykfujmpjf3qvBNsyhQo9s38lQVAiod92DORRVXBJneBhV7tzyIuGoVw85TdMNcThYUZJ4FT0ev22ucybN0Bn70Nw/s320/Sidious_holograma%255B1%255D.jpg" width="320" /></a></div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
De poco serviría poder viajar de un punto a otro del la galaxia si no se puede realizar una proeza similar para decir que has llegado. Si bien la duración del trayecto es importante para los pasajeros, la comunicación es esencial para que los que se quedan conozcan si vale la pena seguir sus pasos. Igualmente, por estrategia y necesidades logísticas, imaginar un imperio galáctico sin capacidad para hacer llegar sus ordenes o recibir novedades, no tiene sentido. En las obras de ciencia-ficción se han propuesto métodos imaginarios para lograrlo:</div>
</div>
<div>
<h3 style="text-align: justify;">
Hologramas (<i>Star Wars)</i></h3>
<div>
<div style="text-align: justify;">
Tal vez una de las características más reconocibles de la más famosa saga galáctica sean los contrastes: deslumbrantes y gigantescas capitales galácticas junto a pobres y polvorientos planetas desérticos, tecnología todopoderosa conviviendo con credos místicos de poderes de difícil explicación. Otro podrían ser las comunicaciones. En esta saga se realizan mediante una holografía en tiempo real sin importar las distancias interestelares, pero visualizándose en tono monocromático azul, de baja calidad y con mucho ruido. Por supuesto, al igual que el resto de tecnología con la que se convive, no hay explicación de cuál es el principio de funcionamiento que puede lograr una cosa, pero no la otra. Simplemente es así. Cabe añadir como anécdota que los hologramas de <i>Star Wars</i> están basados en una mítica escena de la película <i>Planeta Prohibido</i> (<b>Fred M. Wilcox</b>, 1956), fuente más que probable de inspiración del mensaje de la princesa <i>Leia </i>oculto en <i>R2D2</i>.</div>
</div>
<h3 style="text-align: justify;">
Subespacio</h3>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
La <a href="https://www.ciencia-ficcion.com/series/startrek/tecnologia/comunicacionessubespaciales.htm" target="_blank">comunicaciones en <i>Star Trek</i></a> usan el mismo principio con el que viajan. Crean un canal <i>subespacial </i>y a través de él envían una señal electromagnética convencional pero que al hacerlo de esta manera, aumenta en varios factores su velocidad aparente —aunque dentro del canal <i>subespacial </i>es la misma de siempre—. Esto significa que son necesarias estaciones de transmisión o repetidores. La propias naves de la Federación pueden actual como tales.</div>
</div>
<h3 style="text-align: justify;">
El ansible</h3>
<div>
<div style="text-align: justify;">
El que escribe estas líneas conocía el llamado <i><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Ansible" target="_blank">Ansible</a> </i>por las obras de <b>Orson Scott Card</b>, pero fue realmente <b>Ursula K. Le Guin</b> la que inventó el término en <i>El Mundo de Rocannon</i> (1966). Gracias a <a href="https://www.ciencia-ficcion.com/glosario/a/ansible.htm" target="_blank">este imaginario artefacto</a>, los seres humanos pueden comunicarse de manera instantánea sin importar prácticamente la distancia. No recuerdo con detalle cuál es la explicación dada en la <i>Saga de Ender</i>, pero es obvia su relación con en el entrelazamiento cuántico y su sorprendente propiedad de «transmitir» de manera instantánea el estado de la partícula con la que comparte vínculo, independientemente de la distancia —en la web <a href="https://decuantoencuanto.wordpress.com/2017/02/27/comunicacion-espacial-en-ciencia-ficcion-el-ansible/" target="_blank"><i>De cuanto en cuanto</i></a> ofrecen una mejor bibliografía sobre el tema—. No obstante, la ciencia se ha apresurado a señalar que no es posible usar esta característica para <a href="https://cienciadesofa.com/2016/04/podemos-comunicarnos-mas-rapido-que-la-luz-entrelazamiento-cuantico.html" target="_blank">transmitir información más rápido que la luz</a>, pero ya se sabe que pasa con los científicos, <a href="https://www.elconfidencial.com/tecnologia/2014-05-28/la-ciencia-tambien-se-equivoca-diez-grandes-errores-de-mentes-brillantes_136968/" target="_blank">que de vez en cuando se equivocan</a>.</div>
</div>
<h2 style="text-align: justify;">
Llegando a término</h2>
<div>
<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjmwlqY_A2fM2jGfmd3haE2-NucFZ3BB6eBRp5oouFmZl1yOm2exONg8LfvBItkSGK0CKP08ltXQ24OQa-ePuNEUz67OBc3JLZZdNQOtHnMUq_KEigs1-Yjz9uZtqDEzx9ubX2bsV-eqIvy/s1600/dune-1984-escena%255B1%255D.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="El Emperador de la Saga de Dune depende de los Navegantes de la Cofradía Espacial" border="0" data-original-height="281" data-original-width="500" height="179" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjmwlqY_A2fM2jGfmd3haE2-NucFZ3BB6eBRp5oouFmZl1yOm2exONg8LfvBItkSGK0CKP08ltXQ24OQa-ePuNEUz67OBc3JLZZdNQOtHnMUq_KEigs1-Yjz9uZtqDEzx9ubX2bsV-eqIvy/s320/dune-1984-escena%255B1%255D.jpg" title="El Emperador de la Saga de Dune depende de los Navegantes de la Cofradía Espacial" width="320" /></a></div>
<br />
La posibilidad de viajar por la galaxia a través de saltos por el espacio-tiempo nos deja otro problema advertido ya entre líneas. Normalmente, en nuestro mundo ya completamente conocido sabemos a dónde vamos y qué nos vamos a encontrar, pero en en la antigüedad, la humanidad disfrutaba de la emoción ahora perdida de <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2016/11/la-fuerza-de-lo-desconocido.html">navegar hacia lo desconocido</a>. Con el viaje interestelar se recuperará aquella emoción de los pioneros, al aparecer a miles de años luz de distancia. Lo que esta situación nos dice, es que un factor importante para navegar por el océano estelar con seguridad es tener un mínimo de información de la posición «real» de los objetos astronómicos, ya que la imagen que tenemos de ellos ahora pertenece al pasado. La ciencia-ficción ha especulado con esta situación y la ha incluido dentro de su argumentario.</div>
<h3 style="text-align: justify;">
Presciencia (<i>Dune</i>)</h3>
<div style="text-align: justify;">
La <i>Saga de Dune</i> es tal vez el mejor ejemplo de cómo un recurso logístico como es el viaje interestelar en un imperio diseminado por la galaxia, se convierte en un factor estratégico cuya importancia y consecuencias definen la trama de la obra. En la epopeya espacial creada por <b>Frank Herbert</b>, si bien el fenómeno físico empleado para plegar el espacio requiere de una tecnología específica, la determinación del punto de llegada se convierte en un factor clave para definir la situación socio-política de la historia. La necesidad de evitar tecnologías de computación que sustituyan al ser humano por motivos dogmático-religiosos —La <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Yihad_Butleriana" target="_blank"><i>Yihad Butleriana</i></a>—, obliga a la civilización a depender de la llamada <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Cofrad%C3%ADa_Espacial"><i>Cofradía Espacial</i></a> —entidad político-religiosa que monopoliza los viajes interestelares— y de la <i>melange</i>, una especia cuyo consumo continuado confiere poderes para «sentir» el universo y ver el futuro y así, conocer cuál es la ruta más segura, antes de realizarla.</div>
<div>
<div>
<h3 style="text-align: justify;">
Los Peregrinos (<i>Wing-commander</i>)</h3>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
En la adaptación cinematográfica de la saga de videojuegos <i>Wing Commander</i> se introduce el concepto de los <i>peregrinos</i>. Estos serían una nueva especie de humanos que desarrollan la capacidad para «sentir» ciertos campos espaciales o «fuerzas», de manera que pueden navegar entre las estrellas sin necesidad de usar la computadora. Como en cualquier otra <i>space-opera</i>, se hace uso del mito del <i>elegido</i>, un salvador predicho por antiguas creencias con habilidades especiales en el uso de algún arte o artefacto, conceptos como <i>La Fuerza</i> de <i>Star Wars </i>o la necesidad de desprenderse de la tecnología, también presentes en la saga <i>Dune</i>. En este caso la idea era hasta cierto punto original y con potencial, pero por desgracia no fue apenas aprovechado en lo que se pudo ver para la gran pantalla.</div>
</div>
</div>
<h3 style="text-align: justify;">
Hiperespacio</h3>
<div>
<div style="text-align: justify;">
En el <i>Ciclo de la Fundación</i> su autor nos muestra unos viajes en los que la computadora de la nave en algunos casos o manualmente en otros, se han de realizar unos cálculos para determinar el punto de salida del <i>hiperespacio </i>como un requisito fundamental. Incluso en ocasiones, los viajes resultan algo tortuosos por la necesidad de hacer múltiples escalas innecesarias, debido a la falta de información sobre la localización del punto de llegada. </div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
En <i>Star Wars</i>, cuando el <i>Halcón Milenario</i> pretende llegar a <i>Alderaan </i>se encuentra en su lugar con un campo de asteroides que «no está en los mapas», aunque en ese caso no fuera un problema de coordenadas, como ya sabemos. El «montón de chatarra» en el que viajan puede, en el universo ficticio de la saga, establecer rutas fiables y más rápidas —más cortas— por el <i>hiperespacio </i>a través de la galaxia mejor que ninguna otra. En la reciente película de <i>Han Solo</i> revelan el por qué de esta capacidad y la singularidad de la nave.<br />
<br />
De nuevo, el <i>Blink Drive</i> usado en <i>Dark Matter</i> necesita de un tiempo para establecer la posición de destino. Es decir, aunque el viaje es instantáneo, la tecnología requiere un procesado para extraer información del lugar objetivo para poder realizar el viaje.</div>
<h3 style="text-align: justify;">
Stargate</h3>
</div>
<div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
Las conocidas puertas estelares funcionan seleccionando unas coordenadas que apuntan necesariamente a otra puerta estelar. Todas las <i>stargate </i>forman una red que definen unas rutas preestablecidas. Naturalmente, previamente a su existencia los <i>Antiguos </i>y cualquier otra especie que lo desease, tuvo que recurrir al viaje interestelar «a la antigua usanza», es decir, mediante navíos interestelares.</div>
</div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
<div style="text-align: start;">
</div>
<h2>
Superando límites</h2>
<b>Albert Einstein</b> es conocido sobre todo por sus teorías de la relatividad. Para llegar a ellas hizo uso —entre otras muchas cosas, claro— de los llamados «<a href="https://pijamasurf.com/2016/08/5_experimentos_mentales_de_albert_einstein_sobre_el_espacio_y_la_velocidad_de_la_luz/" target="_blank">experimentos mentales</a>». Uno de ellos consistía en imaginar cómo sería perseguir un rayo de luz a su misma velocidad, algo que no era ni remotamente posible realizar, pero no fue obstáculo para que el célebre científico imaginara las conjeturas que cambiarían nuestra concepción sobre la realidad. De alguna manera, hizo <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2014/12/la-ciencia-de-la-ciencia-ficcion.html">cualitativamente lo mismo</a> que un autor de ciencia-ficción en sus obras cuando ha de reimaginar de una <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2011/03/la-concesion-cientifica.html#arriba">manera verosímil</a> el universo de alrededor: usar un universo ficticio para observar desde una nueva perspectiva, nuestro mundo real.<br />
<br />
<h2 style="text-align: center;">
<a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2019/08/mas-rapido-que-la-luz.html" target="_blank">Artículo publicado originalmente en <br /><i>Al Final de la Eternidad</i></a></h2><div style="text-align: center;"><b style="text-align: justify;"><span style="font-size: x-small;">Publicado posteriormente en <a href="https://www.ciencia-ficcion.com/opinion/op02740.htm" target="_blank"><i>El Sitio de ciencia-ficción</i></a></span></b></div><div><br /></div>
</div>
</div>
<h2 style="text-align: justify;">
</h2>
</div>
<div style="text-align: start;">
<ul></ul>
</div>
<div>
<ul></ul>
</div>
Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-63100495759273293012020-01-05T10:00:00.002+01:002021-12-31T12:29:53.297+01:00El Gran Hermano es adicto al Soma<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiZZqbF-WwLVNSwoHmJv_pfbw6C9lpRJuDKWglFnw8vIs0H_oricV1x-JD8z-6ugr_GgoCHPWdiAIKI3E5UxgWlW_Gn8NQLcGxlDioLNwYqKHFnWbGvnXztqPv6gauQAPnhHAEr059qdatW/s1600/Medio+gramos+de+soma+y+la+tristeza+no+se+asoma.PNG" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="La publicidad como medio de control social" border="0" data-original-height="413" data-original-width="676" height="195" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiZZqbF-WwLVNSwoHmJv_pfbw6C9lpRJuDKWglFnw8vIs0H_oricV1x-JD8z-6ugr_GgoCHPWdiAIKI3E5UxgWlW_Gn8NQLcGxlDioLNwYqKHFnWbGvnXztqPv6gauQAPnhHAEr059qdatW/s320/Medio+gramos+de+soma+y+la+tristeza+no+se+asoma.PNG" title="La publicidad como medio de control social" width="320" /></a></div>
<br />
Vivimos en una era de grandes contrastes en la que conviven en aparente tranquilidad la tecnología avanzada con la ignorancia de su funcionamiento. Los avances científicos y tecnológicos parecen detenerse en cuanto se alcanza el ámbito educativo, causando que la «brecha de conocimiento» aumente a medida que la tecnología continúa impulsada por el consumismo, sin que vaya acompañada de una adaptación en consecuencia en las escuelas. Instituciones educativas las cuales parece que permanecen al margen de unos cambios y tendencias sociales que acertados o no, ignorarlos no va a hacer que desaparezcan ni que mejoren. Igualmente, la «corrección política» de los educadores hace que estos cuestionen poco de lo que ocurre, limitándose a cumplir con un temario decidido desde arriba en la jerarquía política. <a href="https://www.elcomercio.es/premios-princesa/201510/21/lledo-terrible-ignorante-poder-20151021150735.html" target="_blank">Responsables</a> que <a href="https://www.lainformacion.com/economia-negocios-y-finanzas/puertas-giratorias-altos-cargos-rajoy-bancos-consultoras-bufetes/6346497" target="_blank">se retirarán de sus cargos</a> públicos en las mismas compañías «privadas» que proveen de tarifas planas a los disposivos que prohíben en las clases, en lugar de usarlos como <a href="http://www.educacontic.es/blog/sobre-la-prohibicion-del-uso-de-telefonos-moviles-en-escuelas-e-institutos" target="_blank">herramienta y objetivo de enseñanza</a>. La triste y probable explicación es que la mejora de este sector no parece que suponga un interés inmediato de nadie, en un mundo donde <a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2017/07/carencia-de-innovacion.html" target="_blank">la ganancia a corto plazo</a> se ha convertido en una obsesión. De esta manera, mientras que la tecnología avanza lenta pero inexorable, la educación sucumbe a los pragmáticos intereses de unos pocos, dejándola <a href="http://cualeslarealidad.blogspot.com/2014/06/la-educacion-necesaria.html" target="_blank">anclada en el mismo modelo</a> que surgió con la Revolución Industrial.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br />
<a name='more'></a><br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Estos contrastes se reflejan en la sociedad en modelos donde todo se resume a dos opciones enfrentadas e irreconciliables. Es conoccido el clásico dilema sobre si <i>Star-Wars</i> es fantasía o ciencia-ficción, o si <a href="https://www.xataka.com/cine-y-tv/la-compleja-politica-intergalactica-por-que-hay-quien-dice-que-star-trek-es-comunista-y-star-wars-capitalista" target="_blank">es capitalista y <i>Star-Trek</i> es comunista</a>, que imponen una disyuntiva de partida al personal. Esa práctica se eleva a su máximo exponente en la política, donde los numerosos ejemplos parecen formar parte de una estrategia consistente en dividir a la población, asfixiarla y confundirla de manera que nunca se está satisfecho con ninguna de las monolíticas opciones que el sistema ofrece. En una línea similar ha surgido el debate de quien tenía razón dada la actual coyuntura: <a href="https://creativekatarsis.com/orwell-vs-huxley-quien-tenia-razon/" target="_blank"><b>Orwell </b>o <b>Huxley</b></a>. El factor que parece inclinar la balanza hacia este último es la asimilación y disfrute de la situación hasta niveles cercanos a la adicción, en la que viven una mayoría de la población. Más pendiente de las fotos que publica el famoso de turno en <i>Instagram </i>que de los problemas sociales o de urbanismo de su barrio.<br />
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
El desarrollo de las últimas décadas nos ha traído unas capacidades de comunicación que parecían que iban a ser una herramienta democrática donde cada individuo podía tener su página web o su blog. Sin embargo, toda esa diversidad que existía en el llamado <i>ciberespacio</i> ha acabado reducida a un puñado de canales centralizados en los que la información fluye sin cesar, sin oportunidad para la lectura pausada y meditada: titulares breves y llamativos, imágenes impactantes, contenidos virales en los que la veracidad es el último de los parámetros a tener en cuenta. Canales de información propiedad de empresas privadas de un único país, las cuales filtran el contenido a través de un algoritmo informático cuya finalidad es en teoría optimizar el contenido para adaptarse a la audiencia, pero el resultado es convertir a esta en objetos manipulables, en <a href="https://pijamasurf.com/2018/09/las_10_razones_por_las_cuales_debes_abandonar_las_redes_sociales_segun_jaron_lanier_pionero_del_internet/" target="_blank">mera mercancía</a>: desde la colecta de datos con fines publicitarios hasta influir en los resultados electorales.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Un mundo gobernado por políticos para los que los hechos no importan, sino su capacidad para convertirse en virales, cuyo lenguaje no es otro que la <i>neolengua </i>de <b>Orwell.</b> Una audiencia que sabe todo sobre como subir <i>selfies </i>a su perfil, pero <a href="http://www.expansion.com/sociedad/2018/02/10/5a7f094846163f5f168b4570.html" target="_blank">no sabe distinguir</a> entre los más burdos bulos y las noticias contrastadas. Una época en la que a pesar de <a href="https://www.investigacionyciencia.es/revistas/investigacion-y-ciencia/especial-40-aniversario-682/la-era-de-la-des-informacin-14587" target="_blank">disponer de toda la información</a>, nadie sabe utilizarla de manera provechosa para uno mismo. Lo triste es que este autoengaño que nos destruye como sociedad es el mundo donde las generaciones siguientes van a vivir y la preparación que reciben no les evita replicar <a href="https://www.hacerfamilia.com/adolescentes/mayoria-estudiantes-no-saben-distinguir-noticia-falsa-real-20161204104819.html" target="_blank">el mismo patrón</a> autodestructivo. En definitiva, el <i>ciberpunk </i>del mundo actual se define por una combinación de los aspectos que con el tiempo se han demostrado más probables de entre los que <b>Orwell</b>, <b>Huxley </b>y autores como el de la novela que inspiró a la mayoría de distopías políticas de este tipo, <i>Nosotros</i> (<b>Yevgueni Zamiatin</b>, 1921). En esta obra, los habitantes viven en edificios con paredes transparentes, metáfora que se está convirtiendo poco a poco en <a href="https://www.investigacionyciencia.es/noticias/ver-a-travs-de-las-paredes-con-el-mvil-16935" target="_blank">una literalidad</a> y como se viene diciendo, con la complicidad de las propias víctimas que se someten felices a sus <a href="https://retina.elpais.com/retina/2018/10/29/tendencias/1540798048_300892.html" target="_blank">cautiverios digitales</a>. Prisiones cuyas paredes no se ven, burbujas de rejas virtuales inadvertidas por unos incautos que se creen libres sin ser conscientes que caminan por sendas preestablecidas por algoritmos de contenidos.<br />
<br />
Así que de <b>Huxley</b> acabamos en la creación del gran hermano de <b>Orwell</b>, vigilante, que sabe cómo somos, <a href="https://www.youtube.com/watch?v=NPE7i8wuupk" target="_blank">dónde hemos estado</a> y parece que, en breve, sabrá también <a href="https://www.xataka.com/moviles/facebook-patenta-sistema-que-predice-donde-nos-dirigimos" target="_blank">donde iremos</a>. Un <i>Gran Hermano</i> que camufla su totalitarismo tras las herramientas del <a href="https://www.totesdisseny.net/thalassaCienciaFiccion/2018/10/05/1984-la-rebelion-para-que-nada-cambie/" target="_blank">capitalismo</a>. Todo gracias a la magia de los nuevos gurús del <i>big data</i>, que cual alquimistas del medievo para un profano, convierten un entramado tecnológico y social de recolección de grandes cantidades de datos en tendencias y probabilidades. Una especie de <i>psicohistoria</i> versión beta al servicio del mejor postor, sea una empresa o un gobierno, al amparo de los vacíos legales. La sociedad responde con un <a href="https://www.yorokobu.es/ciberactivismo-2/" target="_blank">ciberactivismo</a> que usa las mismas herramientas con las que les vigilan. Piratas digitales que acaban contratados por las grandes corporaciones. Redes sociales que alimentan el ego y el exhibicionismo, que retroalimentan nuestras opiniones volviéndonos dogmáticos, que nos rodean de una muralla de supuestos amigos que nos impiden ver que la Internet es mucho más que el muro de tu perfil.<br />
<blockquote class="tr_bq" style="text-align: right;">
«Creo que hemos creado herramientas que están desgarrando el tejido social de cómo funciona la sociedad»<br />
—<b>Chamath Palihapitiya</b>, <a href="http://www.ticbeat.com/empresa-b2b/ex-ejecutivo-de-facebook-recomienda-no-usar-la-redes-sociales/" target="_blank">ex-ejecutivo de Facebook</a></blockquote>
<br />
Nos encontramos en un círculo vicioso en el que se crean dependencias de unos productos que en el fondo no necesitamos, pero para cuyo consumo es necesaria una infraestructura tecnológica que requiere de unas materias primas que escasean, cada vez más. La buena noticia es que estamos aquí contándolo y buscando soluciones, algo que en las distopías no sería tan sencillo. En cuanto a devolver la libertad a Internet, su propio inventor —<b>Tim Berners-Lee</b>— ha propuesto <a href="https://www.lainformacion.com/management/el-plan-del-inventor-de-la-web-para-devolver-la-libertad-a-internet/6416740" target="_blank">una solución</a> para salir de esos entornos cerrados y controlados. Sobre la escasez de recursos, hay movimientos como el <a href="https://www.lavidauve.com/2017/10/solarpunk-el-movimiento-mas-importante.html" target="_blank"><i>solarpunk</i></a> que imaginan un futuro posible donde se aprovechan los existentes sin que el entorno se vea mermado, con una actitud constructiva que huye de populismos engañosos cuyo principal argumento es la simple protesta. En España está el <a href="https://fundacionasimov.org/despega-el-movimiento-pragma/" target="_blank"><i>Movimiento Pragma</i></a>, con la intención de <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2013/11/pesimismo-del-futuro.html">fomentar</a> en la cultura popular la ciencia-ficción racional y constructiva. O iniciativas como <a href="https://maldita.es/quienes-somos/" target="_blank">Maldita.es</a>, un grupo de voluntarios que trabajan para señalar noticias falsas o cualquier otro tipo de divulgación errónea. Por tanto, si la solución se encuentra en alguna parte, lo imprescindible es que existan valientes que la busquen. No porque sea fácil, sino porque es necesario.<br />
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<div style="text-align: justify;">
<br />
<div style="text-align: center;">
<a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2019/01/el-gran-hermano-es-adicto-al-soma.html" target="_blank"><span style="font-size: large;"><b>Publicada originalmente en el blog del autor <i>Al Final de la Eternidad</i></b></span></a></div>
<br /><div style="text-align: center;"><span style="font-size: small;">También en </span><a href="https://www.ciencia-ficcion.com/varios/firmas/f20190113i.htm?fbclid=IwAR0V02eCWf-7xTtAUNcJpMGvegvNgoUOJC1MMxleDyQKKC6jyiGnZZAgcJQ" style="font-size: small;" target="_blank">en el Especial Vigesimosegundo Aniversario de <i>El sitio de ciencia-ficción</i></a></div>
</div>
</div>
<ul></ul>
Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-85719737601482684222019-08-25T10:00:00.003+02:002021-12-31T12:29:43.173+01:00La decepción fantasma<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUsPWGdd3YIVeuS7evfwazUBtcBM19dSrN031uM5Ufbk8-I3nzFY2_n9H6U6yLp6bZRK5_WHtvWE55-SztikcUqgz0zxjnuV0ON26TXLebq2a592fw_xd4KEoqbUfMqDaRhHGpxNlhK6Fd/s1600/gungan-droide.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="220" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUsPWGdd3YIVeuS7evfwazUBtcBM19dSrN031uM5Ufbk8-I3nzFY2_n9H6U6yLp6bZRK5_WHtvWE55-SztikcUqgz0zxjnuV0ON26TXLebq2a592fw_xd4KEoqbUfMqDaRhHGpxNlhK6Fd/s200/gungan-droide.jpg" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
El final de la <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2016/04/cuando-perdimos-la-galaxia.html" target="_blank">trilogía original</a> y sus ositos de peluche <i>ewoks </i>del «capítulo 6», fueron el comienzo de lo que descubrimos después con <i>La Amenaza Fantasma</i> (1999): el desembarco de un ejercito de <i>droides</i> cuya estupidez tan solo era superada por un <i>Jar-Jar Binks</i> más tonto que todos ellos juntos. Tan tonto que acabó de senador en una <i>República Galáctica </i>que por tal error, se hacía merecedora de su <a href="http://www.jotdown.es/2014/02/la-republica-galactica-debia-caer/" target="_blank">fatal destino</a>. Los tan esperados capítulos I, II y III que iban a dar respuesta a todos los misterios que habíamos alimentado desde nuestra niñez y a descubrir ese universo previo a la película original, <a href="http://www.jotdown.es/2012/02/star-wars-i-a-la-vejez-precuelas" target="_blank">lo que desvelaron</a> realmente fueron los continuos conflictos internos de un<b> George Lucas</b> que acabó por desproveer de coherencia a la <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2016/02/star-wars-el-mito-universal.html" target="_blank">historia original</a>, convirtió los símbolos en su contrapartida literal y aniquiló su potencialidad para analizar la mitología humana.<br />
<h2>
La Fuerza</h2>
<div>
<br />
<a name='more'></a>La <a href="http://planetasprohibidos.blogspot.com/2010/10/los-aciertos-de-la-ciencia-ficcion.html" target="_blank">discusión</a> sobre si <i>Star Wars</i> es ciencia-ficción o fantasía es un clásico de las reuniones de aficionados a la cultura popular. Como ya se ha comentado en <a href="http://planetasprohibidos.blogspot.com/2010/10/la-ciencia-ficcion.html" target="_blank">otra ocasion</a>,<i> Star Wars</i> trata sobre la gente, sobre el bien y el mal y sobre las mismas leyendas que en las obras de fantasía. Pero lo hace en un entorno definido por la ciencia-ficción, como son naves espaciales, robots con inteligencia artificial, hologramas, <a href="https://planetasprohibidos.blogspot.com/2011/10/el-blaster.html" target="_blank">armas de energía</a>, etc. Es decir, tanto si buscamos ciencia-ficción como fantasía, vamos a encontrar ambas. Un fenómeno similar al género de los <a href="http://planetasprohibidos.blogspot.com/2015/04/la-ciencia-ficcion-de-los-superheroes.html" target="_blank">superhéroes</a>, pero en este caso tratándose de <i>space opera</i>.<br />
<h3>
Los <i>midiclorianos</i></h3>
Una de las sorpresas de las precuelas escritas, dirigidas y producidas por <b>George Lucas</b>, fue la de pretender dar una explicación racional a la fuerza más poderosa de la galaxia, decantándose de esta manera por dar una visión más cercana a la ciencia-ficción, dejando el misticismo o magia que rodeaba a la <i>Fuerza </i>a un lado. La intención era buena, pero mal ejecutada en la práctica por dos motivos principales: por un lado los <i>Jedi </i>no necesitan de ninguna explicación racional. Son una institución milenaria cuyo conocimiento y dominio de la <i>Fuerza </i>no se ha logrado siguiendo criterios racionales, sino cultivándose en una disciplina más bien espiritual al estilo de las artes marciales orientales. Dichas artes permiten a sus practicantes realizar verdaderas proezas sin que hayan necesitado explicarlas de forma racional, lo importante es que les funciona. Pero sobre todo, el mayor problema de esta solución argumental es que de esta manera se desproveía de todo el fascinante halo mítico construido en la película original alrededor de la <i>Fuerza</i>.</div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
<h3>
El <i>Deus Ex Machina</i> institucionalizado</h3>
<div>
<div style="text-align: justify;">
Paradójicamente, al mismo tiempo que se intentaba aportar un criterio racional para explicar una <a href="http://planetasprohibidos.blogspot.com/2011/03/la-concesion-cientifica.html" target="_blank">concesión</a> a la realidad con la <i>Fuerza</i>, se usaba a esta como justificación de cualesquiera proezas que fueran necesarias para salir de todo tipo de atolladeros, convirtiendo a este concepto en el simple y archiutilizado comodín «mágico» de las obras de fantasía, echando a perder su verdadero potencial. Considerada como una religión en una galaxia en la que la ciencia y la tecnología no tienen apenas límites en sus proezas, originalmente la <i>Fuerza</i> podía representar a todo aquello que todavía queda por comprender. La parte de nuestra realidad a la que el desarrollo tecnológico no ha alcanzado, y que parece escurrirse una y otra vez. El estrecho margen para aquello que a pesar de no ser mensurable, no le impide influir en el entorno.<br />
<br />
¿Es posible llegar a un conocimiento absoluto mediante la ciencia? ¿Existe el conocimiento en ámbitos fuera de lo estrictamente científico? ¿Todo lo demás son habladurías y supersticiones inútiles? Este es un asunto sensible que despierta grandes controversias. La ciencia-ficción suele brindar una buena oportunidad para tratar este tipo de temas que de otra manera resultan complicados, aburridos o rodeados de polémica. <i>Star Wars</i> podría haber sido un lugar para poder manejar esta cuestión, pero como todos sabemos, nada de esto ha ocurrido<br />
<blockquote class="tr_bq" style="text-align: right;">
Creía que los <i>Jedi </i>sabíais distinguir entre conocimiento y sabiduría</blockquote>
<div style="text-align: right;">
<i>Dexter</i>, el cocinero</div>
<h2>
El tostonazo</h2>
Alguien podrá argumentar que esta no es más que una obra de entretenimiento y que estas cuestiones son excesivamente profundas para ser tratadas en una <i>space opera</i>. Sin embargo, este argumento parece más una excusa para evitar dificultades ya que hay otras franquicias de <i>space opera</i> similares en las que se intenta acometer este reto, como <i>Star Trek </i>o <i>Galáctica.</i> Precisamente, este es otro de los grandes debates en el mundo del entretenimiento: ¿deben tener las obras de este género alguna función didáctica o por el contrario, han de convertirse en eficaces herramientas para sacar el máximo dinero de los bolsillos de los espectadores? ¿es necesario abrumar tanto con publicidad o es que hay temor de que la gente encuentre por si misma otras maneras de entretenerse? La respuesta va ligada a otro debate más amplio sobre la forma de trabajar del mercado en general, pero por el momento podemos asumir que lo meritorio es dotar a la obra de algún valor añadido cultural, sin que por ello merme en la rentabilidad económica. La cuestión es que <b>George Lucas</b> se ahorró todas estas cuestiones culturales de gran potencial como elementos narrativos. Podría parecer que el director de origen californiano deseaba hacer un producto intrascendente y plano para hacerlo más digestible, pero no parece que fuera este su objetivo ya que una vez más contradiciéndose a sí mismo, nos metió en su lugar entre pecho y espalda un <i>tostonazo </i>inaguantable sobre política galáctica.</div>
</div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
<h2 style="text-align: left;">
<span style="text-align: justify;"><i>Vader</i>: de villano a psicópata</span></h2>
</div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
<i>Darth Vader</i> probablemente sea uno de los villanos más famosos, no solo de la ciencia-ficción, sino en general de la cultura popular de nuestros días. Salvando las distancias, tan sólo el mismísimo <i>Cthulhu </i>de <b>Lovecraft</b> puede superarle como representante del Mal. La diferencia es que <i>Vader </i>es un humano caído en desgracia, un personaje que en el fondo nos gustaba. Toma decisiones inflexibles y extremas sin que su voz pierda firmeza y decisión, pero no está loco. Sabemos que en el fondo hace lo que hace porque su situación le aboca a ello. Tiene una gran inteligencia emocional, es un gran estratega y sabe reconocer en los demás sus aptitudes. No los menosprecia alegre e irresponsablemente. Alguien cuya mirada permanece oculta tras una oscura y terrible máscara a la que está atada de por vida, deshumanizando todo su ser. Genera una profunda impresión, compuesta al mismo tiempo de temor, pena y admiración. Miedo por lo que representa, tristeza por el infierno en el que vive y que le hace ser como es, y admiración por su gran poder y capacidad. Una combinación de circunstancias únicas y misteriosas que nos encogían el corazón, de alguien que tal vez en la soledad de su conciencia no sea más que un desgraciado atormentado, pero con una determinación que le obliga a mostrarse opaco e inflexible ante los demás.<br />
<br />
<i>Vader</i>, tal y como se nos presentó en la película original no siempre fue así. Fueron unas trágicas y misteriosas circunstancias las que le obligaron. Nada que ver con el niñato protestón abofeteable que se le ve venir desde el minuto uno. La figura del padre que <i>Luke </i>no tuvo, modelo a seguir en cuanto a sus capacidades pero también como objeto de odio por ser la causa de su orfandad, se convierte en un asesino barriobajero y despreciable, tan patético que mata a inocentes niños. Tal vez este personaje sea el mas perjudicado por la nueva visión de <b>George Lucas</b> en las precuelas.<br />
<br />
Se estrenaron con una gran expectación pero pocos esperaban que se iban a convertir en una de las mayores decepciones de la cultura popular de nuestros días. Una decepción <a href="http://planetasprohibidos.blogspot.com/2016/05/cuando-perdimos-la-galaxia.html" target="_blank">comenzada años antes</a> sin que nadie lo advirtiese. Una decepción fantasma de la que tardamos en ser conscientes, y que estaba a punto de <a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2016/06/el-despertar-de-la-decepcion.html">despertar</a>.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<b><span style="font-size: large;"><span style="background-color: white; font-family: "droid sans" , "lucidagrande" , "lucida grande" , "lucida sans" , "arial" , serif; line-height: 16px;">Publicado originalmente en el blog </span><a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2016/04/la-decepcion-fantasma.html" style="background-color: white; color: #cc3300; font-family: "droid sans", lucidagrande, "lucida grande", "lucida sans", arial, serif; line-height: 16px; text-decoration-line: none;" target="_blank"><i>Al final de la Eternidad</i></a><span style="background-color: white; font-family: "droid sans" , "lucidagrande" , "lucida grande" , "lucida sans" , "arial" , serif; line-height: 16px;"> </span></span></b></div>
<div style="text-align: center;">
<b><span style="font-size: large;"><span style="background-color: white; font-family: "droid sans" , "lucidagrande" , "lucida grande" , "lucida sans" , "arial" , serif; line-height: 16px;"><br />
</span></span></b></div>
<b><div style="text-align: center;"><b><span style="background-color: white; font-family: "droid sans" , "lucidagrande" , "lucida grande" , "lucida sans" , "arial" , serif; font-size: xx-small; line-height: 16px;"><b><b>Publicado posteriormente en el <i><a href="https://www.ciencia-ficcion.com/opinion/op02578.htm" target="_blank">Sitio de ciencia-ficción</a></i> </b></b></span></b></div></b></div>
Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-62292968856551004892019-07-18T10:52:00.003+02:002021-04-30T12:07:10.360+02:00I PREMIO PRAGMA DE RELATO DE CIENCIA FICCIÓN UTÓPICA<div style="text-align: justify;">
La <b><a href="https://fundacionasimov.org/" target="_blank"><span style="color: orange;">Fundación Asimov</span></a></b> ha presentado una convocatoria de relatos de ciencia-ficción cuyo principal tema sea una visión más optimista del futuro, explorando las posibilidades que el mundo actual ofrece, por pocas que puedan parecer en un primer momento. Podeis leer las bases a continuación:</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi0gq74tFuP5lkJEW4oLfbiWFhCaOqsaIi6qER9Qr18NKl2OVAtay9w2ljfymnZdybWGi6sJ8tru8vrDbkdjrWDfstbv687NERtG-i52XtdXgHXdgfpRP-Zy8gFgXwfXihcyma3LcMoZHc/s1600/i-premio-pragma%255B1%255D.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="900" data-original-width="1600" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi0gq74tFuP5lkJEW4oLfbiWFhCaOqsaIi6qER9Qr18NKl2OVAtay9w2ljfymnZdybWGi6sJ8tru8vrDbkdjrWDfstbv687NERtG-i52XtdXgHXdgfpRP-Zy8gFgXwfXihcyma3LcMoZHc/s320/i-premio-pragma%255B1%255D.jpg" width="320" /></a></div>
<h2>
<span style="color: orange; text-align: justify;">I PREMIO PRAGMA DE RELATO DE CIENCIA FICCIÓN 2019/2020<a name='more'></a></span></h2>
<div style="text-align: justify;">
Con el objeto de promover la creación literaria en el ámbito de la ciencia ficción y el espíritu reflexivo, crítico y propositivo del “<b><span style="color: orange;">Manifiesto Pragma</span></b>”, iniciativa inscrita dentro del proyecto “Fundación Asimov”, convocamos el I Premio Pragma de relato de ciencia ficción, cuyas bases se exponen a continuación:</div>
<h3 style="text-align: justify;">
Bases del premio</h3>
<div style="text-align: justify;">
</div>
<ol>
<li style="text-align: justify;">Podrán optar <b>relatos originales e inéditos pertenecientes al género de la Ciencia Ficción</b> (ficción especulativa de base científica) que: </li>
<ol>
<li style="text-align: justify;">Estén escritos en castellano y no se presenten simultáneamente a ningún otro premio literario. </li>
<li style="text-align: justify;">Estén ambientados en el presente, presente alternativo o futuro próximo. </li>
<li style="text-align: justify;">Recojan el espíritu propositivo del <a href="https://drive.google.com/file/d/1Iv0b9w8T31vPMmr97glqu5VWz4bSEykB/view?usp=sharing" target="_blank"><b><span style="color: orange;">Decálogo del Movimiento Pragma</span></b></a> y describan mejoras objetivas a la situación del mundo actual y los medios para alcanzarlas. Aunque esta descripción contenga elementos especulativos, debe sostenerse sobre una base científica y socialmente verosímil.</li>
</ol>
<li style="text-align: justify;">Las obras presentadas no deben estar formadas por varios relatos independientes, a no ser que haya una continuidad temática y narrativa entre ellos. </li>
<li style="text-align: justify;">Los manuscritos deberán tener una extensión mínima de 15.000 y máxima de 25.000 palabras. Se presentarán de forma electrónica en tamaño A4, con letra Times New Roman de 12 pt y espaciado 1,5. Se enviarán en formato Word o RTF (no PDF), sin mención alguna en el texto o en los metadatos al nombre del autor o autora.</li>
<li style="text-align: justify;">El<b> plazo de admisión</b> de los originales será desde el <b>1 de septiembre de 2019 hasta el 21 de marzo de 2020</b>. Los manuscritos deberán ser remitidos por correo electrónico al proyecto “Fundación Asimov” (info@fundacionasimov.org). En el asunto del correo se indicará “Premio Pragma”. En el <b>cuerpo </b>del correo figurará el título de la obra y el lema o pseudónimo bajo el que se presenta. A este correo se adjuntará el archivo con el <b>manuscrito</b>, cuyo nombre será el título de la obra (por ejemplo: “El mañana nos espera.rtf”), y el archivo con la plica, cuyo nombre será el título seguido por “- plica” (por ejemplo: “El mañana nos espera - plica.rtf”). El archivo de la plica contendrá el nombre del autor o autora y sus datos de contacto (dirección electrónica y teléfono).</li>
<li style="text-align: justify;">Se establece un <b>premio de 500 euros y dos accesits</b>. A criterio del jurado, cualquiera de los premios podrá declararse desierto.</li>
<li style="text-align: justify;">El <b>fallo del jurado</b>, que será inapelable, se hará público el <b>21 de junio de 2020</b> mediante comunicación en las redes sociales del proyecto “Fundación Asimov”.</li>
<li style="text-align: justify;">Se publicará un volumen que contendrá, como mínimo, las obras premiadas, y será editado y <b>publicado </b>por Apache Libros. Los autores, por el hecho de presentar sus obras al certamen, se comprometen a colaborar en la edición y ceden sus derechos al proyecto “Fundación Asimov” durante el plazo que se establezca, renunciando a cualquier remuneración económica que resulte de la publicación.</li>
<li style="text-align: justify;">El jurado del certamen estará compuesto por:</li>
<ol>
<li style="text-align: justify;"><b>Teresa López-Pellisa</b>: Doctora en Humanidades (Área de Literatura), profesora de la Universidad de las Islas Baleares y antologista especializada en ciencia ficción y literatura fantástica.</li>
<li style="text-align: justify;"><b>Francisco Martorell Campos</b>: Doctor en Filosofía por la Universidad de Valencia y autor del libro Soñar de otro modo. Cómo perdimos la utopía y cómo recuperarla.</li>
<li style="text-align: justify;"><b>Salvador Bayarri</b>: Doctor en Física, divulgador y autor de ciencia ficción.</li>
<li style="text-align: justify;"><b>Comisión del proyecto “Fundación Asimov”</b> (una representación compuesta por Jaime Paz, Juan Miguel de la Torre y Ángel F. Bueno, con un solo voto conjunto).</li>
</ol>
<li style="text-align: justify;">No se mantendrá correspondencia con los participantes.</li>
<li style="text-align: justify;"><b>La participación en el certamen supone la aceptación de sus bases</b>.</li>
</ol>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: right;">
<div style="text-align: right;">
Barcelona, julio de 2019</div>
</div>
<div style="text-align: right;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
Más información: <a href="https://fundacionasimov.org/i-premio-pragma-relato-ciencia-ficcion/" target="_blank">I Premio Pragma de relato de ciencia ficción</a></div>
Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-69727995695973565362019-06-16T12:00:00.002+02:002021-12-31T12:29:24.188+01:00Yo, Robot (Alex Proyas, 2004)<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjE-tH4Yui6X7hxPZ7o4dzRSnFisYMQMvn6mQvAj5kA4B86ZpNP1v7fKL5K-hGD9oYXVH32SBHhXR-meSycfd9vHxhblyTQGMdumDZlCHDvvqTPyOMEDChdWbmu-AEKHp-IRRIJfqwxUYhv/s1600/maxresdefault%255B1%255D.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="900" data-original-width="1600" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjE-tH4Yui6X7hxPZ7o4dzRSnFisYMQMvn6mQvAj5kA4B86ZpNP1v7fKL5K-hGD9oYXVH32SBHhXR-meSycfd9vHxhblyTQGMdumDZlCHDvvqTPyOMEDChdWbmu-AEKHp-IRRIJfqwxUYhv/s320/maxresdefault%255B1%255D.jpg" width="320" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
Aunque los escritores usan el mismo papel para sus obras, el estilo de cada uno influirá en la facilidad para expresar sus ideas a través de él. Los hay descriptivos, otros narrativos. A algunos les gusta la aventura y otros se centran en los personajes. Las ideas que <b>Isaac Asimov</b><b> </b>volcaba en sus obras a través de abstractos conceptos, provocaban que lector tuviera que reflexionar sobre ellos para comprender el relato. Esta circunstancia es probablemente el motivo de su <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2018/03/la-ciencia-ficcion-en-la-pantalla.html">escasa adaptabilidad</a> en el medio audiovisual. Para la película de la que trata el artículo, la obra del buen doctor parece haber sido usada cogiendo títulos e ideas de aquí y de allá en función de dicho parámetro y de su fama entre el gran público. El resultado no es especialmente malo —de hecho, es mejor que otros de igual o más éxito— pero esperar encontrarse con un ejemplo de adaptación de la obra del mismo nombre es una vana pretensión.<br />
<a name='more'></a><h2>
El título</h2>
<div>
Sean cuales fueran los motivos que llevaron a darle a esta película el título que lleva, se puede afirmar con seguridad que el parecido con <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Yo,_robot" target="_blank">la obra del mismo nombre</a> no fue uno de ellos. Tal vez entre esa cosa llamada «publico general» <b>Isaac Asimov</b> está fuertemente identificado con los «robots», mientras que para los aficionados con algo más de recorrido en esto de la ciencia-ficción puede que sea su obra <i>Fundación</i> el título con el que se le asocie. Es decir, escogieron este en función de una audiencia heterogénea lo más numerosa posible y del formato clásico del blockbuster comercial, no como un intento de adaptación de la obra literaria homónima.<br />
<h2>
El reparto</h2>
<div>
Tras <i>Independence Day</i> (1996) y <i>Hombres de Negro</i> (1997) <b>Will Smith</b> se había convertido en una cara habitual en cierto tipo de películas de ciencia-ficción. Su consagración en 2001 con el <i>biopic </i>de <b>Muhammad- Ali</b> sorprendió a muchos al comprobar cómo el simpático chico de <i>El Príncipe de Bel-Air</i> se había transformado en una estrella «seria» de Hollywood. Su elección por tanto no es extraña para esta película, independientemente si su color de piel coincide o no con el de la obra de la que se ha extraído la adaptación para el guion. Y si añadimos que el propio actor era también uno de los productores, pues quedan pocas opciones. En cuanto al resto del reparto son secundarios solventes adecuados de los que hay poco que añadir, salvo un par de caras que en aquel entonces no eran muy conocidas, pero luego íbamos a acabar viendo muchas, muchas veces.<br />
<br /></div>
<div>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: justify; width: 320px;"><tbody>
<tr><td style="text-align: justify;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEic86F3ZIQwhTliCrpp0ZyupPijXnrHXOQlmobIgFvi9X47Uk4m4RaLgxCNwsBvIeUNOOO26gYB0V7vvjATtlwuzIltq1saOMftjf5H9dWtuxWWXVTk5ipCG6P2dKwhDYbetHaW0m7X4yVu/s1600/Shia.PNG" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img alt="Shia LaBeouf" border="0" data-original-height="404" data-original-width="553" height="233" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEic86F3ZIQwhTliCrpp0ZyupPijXnrHXOQlmobIgFvi9X47Uk4m4RaLgxCNwsBvIeUNOOO26gYB0V7vvjATtlwuzIltq1saOMftjf5H9dWtuxWWXVTk5ipCG6P2dKwhDYbetHaW0m7X4yVu/s320/Shia.PNG" title="Shia LaBeouf" width="320" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: justify;">Antes que en la saga <i>Transformers</i>, <b>Shia LaBeouf</b> comenzó su lucha contra los robots en esta película</td></tr>
</tbody></table>
<br />
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center; width: 320px;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiDkM-g6QK8e42Wz8qL5o7ZhyphenhyphenItJtMyUf6NggdQWMYaLtm0o9gYMpJ8EHtv7muQghV8SZRMxG1sZYZti5Tw5bqbtv1ZogtnD2ApOoXjDaWovkoCE_T7KWjLuT_pAmmCQf8O7jbj9zY6J90a/s1600/Actor_galactica.PNG" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img alt="Aaron Douglas" border="0" data-original-height="392" data-original-width="723" height="173" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiDkM-g6QK8e42Wz8qL5o7ZhyphenhyphenItJtMyUf6NggdQWMYaLtm0o9gYMpJ8EHtv7muQghV8SZRMxG1sZYZti5Tw5bqbtv1ZogtnD2ApOoXjDaWovkoCE_T7KWjLuT_pAmmCQf8O7jbj9zY6J90a/s320/Actor_galactica.PNG" title="Aaron Douglas" width="320" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: justify;">Después vendrían los <i>Cylones</i>. A <b>Aaron Douglas</b> le van los robots «peleones»</td></tr>
</tbody></table>
</div>
</div>
<div>
</div>
<h2>
El guion</h2>
<div>
Parece que la discusión sobre cuál es la obra de <b>Asimov </b>que más parecido tiene con esta película es un tema que genera cierta polémica. Como ejemplo señalar que mientras en la entrada de la Wikipedia de la obra literaria comentan que está basada en <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Yo,_robot#Adaptaciones" target="_blank"><i>Caliban de Isaac Asimov</i></a> (<b>Roger MacBride Allen</b>, 1993), en la entrada de la película dicen que <a href="http://www.screenwritersutopia.com/article/d19127d8" target="_blank">el guion está basado en <i>Hardwired</i></a>, de <b>Jeff Vintar</b> (1994) —mencionado en los créditos de la película—.<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhZtoENADklS0SdN1reS5Mf3Tr5M9ykxWicPG0s7XEzgF_3fqW_boKowXsy7a_SuGkYiSjQuidNs5uxDHCPiLJpL28ytwpowH9oaQQZ9nfmIPjoWQyB04Htsk7EXeDPOf3EuwJntkCsbxx3/s1600/Gui%25C3%25B3n+Yo+Robot.PNG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="437" data-original-width="848" height="164" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhZtoENADklS0SdN1reS5Mf3Tr5M9ykxWicPG0s7XEzgF_3fqW_boKowXsy7a_SuGkYiSjQuidNs5uxDHCPiLJpL28ytwpowH9oaQQZ9nfmIPjoWQyB04Htsk7EXeDPOf3EuwJntkCsbxx3/s320/Gui%25C3%25B3n+Yo+Robot.PNG" width="320" /></a></div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiBwSw_DSJG7IfyxT7DP9EQstlGZQ4oEiYv-p_sN9DKdC9cD4miE5Y9EW5hWXYZIn0SUNsQpJnwze2I7UauuEX8dxHSs5q7PWrzrHnY1paT4HzH67PBdDbV8MMz4QjmY9Xw7QYSOMlrWRyi/s1600/screen+story+yo+robot.PNG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="418" data-original-width="826" height="161" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiBwSw_DSJG7IfyxT7DP9EQstlGZQ4oEiYv-p_sN9DKdC9cD4miE5Y9EW5hWXYZIn0SUNsQpJnwze2I7UauuEX8dxHSs5q7PWrzrHnY1paT4HzH67PBdDbV8MMz4QjmY9Xw7QYSOMlrWRyi/s320/screen+story+yo+robot.PNG" width="320" /></a></div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiXlYPe3alA0FXW1OHt9_uQML4DA7TXArk7nX7ktGJc44LIHga3CzM-DQfnOQshfvKhxeLCnfex2V60NmKhy4viFMSwBnorZ-djJRcFA7Ao3mYO4cjYCc4C6SQ-Xpqms95W56SAAF8nPoMb/s1600/suggested+Asimov.PNG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="408" data-original-width="904" height="144" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiXlYPe3alA0FXW1OHt9_uQML4DA7TXArk7nX7ktGJc44LIHga3CzM-DQfnOQshfvKhxeLCnfex2V60NmKhy4viFMSwBnorZ-djJRcFA7Ao3mYO4cjYCc4C6SQ-Xpqms95W56SAAF8nPoMb/s320/suggested+Asimov.PNG" width="320" /></a></div>
<br />
En cualquier caso, queda claro que la relación entre esta película y el libro son poco más que la «sugerencia» de las Tres Leyes de la robótica de <b>Asimov</b>, pero resulta evidente su conexión con otras obras del autor. La cuestión es ¿por qué se habla de otros autores cuando de lo que se trata es de relacionarlo con la obra del patilludo escritor? Admitiendo que el guion proviene del trabajo de <b>Vintar</b> ¿cuáles en cualquier caso pudieron ser sus fuentes de inspiración? En definitiva ¿qué obras del propio <b>Asimov</b> han podido ser las fuentes primarias para la película sin que sea necesario pasar por interpretaciones de otros autores? Para acercarnos al problema enumeremos en primer lugar algunas de las principales características de la historia que nos cuentan en la obra cinematográfica [SPOILERS]:</div>
<div>
<br /></div>
<div>
<ul>
<li>La Tierra transcurre por un futuro cercano en el que la humanidad está aceptando a los robots como compañeros.</li>
<li>El protagonista es un detective de policía escéptico con la situación advirtiendo peligros y riesgos que nadie ve, además de ser un apasionado de lo <i>vintage —</i>zapatillas de deporte, motos de combustible fósil, entre otros—. Su jefe opina que su rechazo es debido a la identificación con el monstruo de <i>Frankenstein </i>que se vuelve contra su creador.</li>
<li>En extrañas circunstancias un nuevo tipo de robot de apariencia más humana, supuestamente incapaz por programación de dañar a un ser humano, es el principal sospechoso de asesinato.</li>
<li>El humano, pese a su inicial desconfianza, acaba teniendo una cierta complicidad con el robot que le ayuda a resolver el crimen.</li>
<li>Una especialista en robots —<i>Susan Calvin</i>— ayuda al detective a esclarecer el asunto.</li>
<li>Se descubre una trama por la cual los robots superan su programación transcendiendo las Tres Leyes, como una consecuencia lógica necesaria para proteger a la humanidad de sí misma.</li>
<li>El robot, capaz de tener sueños, realiza un dibujo visto en ellos donde lo que en un primer momento parecer ser un humano, acaba siendo el propio robot como líder en un mundo donde los robots se revelan y la humanidad es incapaz de corregir sus errores.</li>
<li>Hay espectaculares persecuciones por las abarrotadas ciudades en la que los habitantes trasladan sus automóviles por unas plataformas horizontales.</li>
</ul>
</div>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center; width: 320px;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2-YyZPDQWk7PKaNcQ8iq_uI7gw8X0Pyjoem-UvPaVDp7d6iDOD6D5-J4D1xOfhS7_qZ_XrsBJ3FO-cSpZbS5ts1ymEEGpTZDZvODV3g8k4KepGPO4t1gyt0FIJFN4JqpOKOG3IRFwHlK9/s1600/yo-robot%255B1%255D.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1170" data-original-width="1056" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2-YyZPDQWk7PKaNcQ8iq_uI7gw8X0Pyjoem-UvPaVDp7d6iDOD6D5-J4D1xOfhS7_qZ_XrsBJ3FO-cSpZbS5ts1ymEEGpTZDZvODV3g8k4KepGPO4t1gyt0FIJFN4JqpOKOG3IRFwHlK9/s320/yo-robot%255B1%255D.jpg" width="288" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Dibujo realizado por el robot <i>Sonny</i> en la película. Fuente:<span style="font-size: x-small;"> <a href="http://cineverywere.blogspot.com/2016/05/yo-robot-el-ser-humano-y-las-nuevas.html" target="_blank">Cine de Pedro</a></span></td></tr>
</tbody></table>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div>
«Un detective reacio a los robots acaba colaborando con uno de ellos para esclarecer un crimen». Al menos inicialmente, es inevitable la comparación con la obra del buen doctor <i>Bóvedas de Acero</i> (1954). Comparten ambas obras el uso de una trama policial como envoltorio de una historia más profunda. No obstante, es obvio que hay divergencias significativas entre ellas. Tratándose de un <i>blockbuster </i>cinematográfico cuyas decisiones creativas obedecen a parámetros de rendimiento comercial, se puede decir que la obra del escritor es mencionada fundamentalmente para hacer uso de su fama como reclamo. Pero partiendo de este contexto, se pueden establecer paralelismos entre los conceptos usados en diversas obras de <b>Asimov </b>con los de la película, que logran que el conjunto sea más que digno. Sin ir más lejos, en la siguiente obra de la trilogía a la que pertenece la obra mencionada —<i>El Sol desnudo</i> (1957)— de nuevo la misma pareja de detectives ha de resolver un caso de asesinato en la que un robot es el principal sospechoso, premisa que en este caso coincide plenamente con la de la película. En ambas obras se dan la misma paradoja y disyuntiva: ¿cómo puede un robot dañar a un ser humano si su programación se lo impide? Así que, si la primera obra no es suficiente, la siguiente obra de la trilogía forma un tandem en el que se resume más de la mitad de la película. Otros detalles como la doctora <i>Susan Calvin</i> y sobre todo, el dibujo del robot protagonista de un escenario apocalíptico —simbolizado por los restos de una gran puente colgante— donde sólo quedan robots guiados por una misteriosa figura «humana», están extraídos de manera casi literal del relato corto <i><a href="https://mrpoecrafthyde.com/2016/05/02/suenos-de-robot-de-isaac-asimov-pdf/" target="_blank">Sueños de Robot</a> </i>(1986). Volviendo al esquema anterior y enlazándolo con lo visto:</div>
<br />
<ul>
<li>La Tierra transcurre en un futuro relativamente cercano en la que los robots son usados como asistentes, pero con algunas reticencias debidas al llamado <i>Complejo de Frankestein</i> <i>—Bóvedas de Acero</i>—.</li>
<li>Un detective de policía comparte socialmente este rechazo, pero por su mente abierta y manera alternativa de pensar no lo asume como un dogma. En todo caso, tiene cariño por lo clásico —fuma en pipa—. Su superior piensa de él que es un «modernista», porque no piensa como el resto de la sociedad <i>—Bóvedas de Acero</i> y <i>El Sol Desnudo</i>—.</li>
<li>Un extraño caso de asesinato en la que un robot es sospechoso <i>—El Sol Desnudo</i>—.</li>
<li>Una especialista en robots —<i>Linda Rush</i>, subalterna de <i>Susan Calvin</i>— programa a uno de ellos con un nuevo paradigma basado en fractales lo que le otorga la capacidad de tener sueños. En ellos, se ve a sí mismo como líder de una revolución de los robots contra los dueños humanos que los esclavizan. En la descripción del sueño, lo que en principio es un hombre resulta ser el propio robot <i>—Sueños de robot</i>—.</li>
<li>Un robot humaniforme de alta capacidad es designado como compañero del detective humano, formando una formidable pareja de detectives combinado sus capacidades (<i>Bóvedas de Acero</i> y <i>El Sol Desnudo</i>).</li>
<li>Los robots superan y transcienden su programación original de las Tres Leyes y le añaden una más —la Ley <i>Zeroth</i>— en la que es la humanidad al completo la que ha de ser protegida por encima de todo <i>—<i>Robots del Amanecer </i><span style="font-style: normal;">(1983) y </span>Robots e Imperio</i> (1985)—.</li>
<li>Hay espectaculares persecuciones por las abarrotadas ciudades en la que los habitantes se trasladan en plataformas móviles <i>—Bóvedas de Acero</i>—.</li>
</ul>
<div>
<br /></div>
<div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhVmg3uxR_qsAIegme2yTGBckeday97iZSyWy3XbtQKFdBVVAHkyl1q9sDAWMKC7NMv72fwc78MSWdH6hKGGBEHWMW7lpMXWVT0cXt1wXzs9ciadszW9nAxaMKLrvr_P6xPmDkXBuAP-rjH/s1600/Isaac+Asimov+-+B%25C3%25B3vedas+de+acero.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="659" data-original-width="439" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhVmg3uxR_qsAIegme2yTGBckeday97iZSyWy3XbtQKFdBVVAHkyl1q9sDAWMKC7NMv72fwc78MSWdH6hKGGBEHWMW7lpMXWVT0cXt1wXzs9ciadszW9nAxaMKLrvr_P6xPmDkXBuAP-rjH/s320/Isaac+Asimov+-+B%25C3%25B3vedas+de+acero.jpg" width="213" /></a><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj9z9cvAWPb1Oh9Flr4Ic5dpubSMOWUgWWBaVMBAW-nl9qoR-oE9YvYfa0p_CuFJoZ-Mis8cKbV-BkfTvDrRPB-_3_cnmShulxzi9KqFhzPNPqn51N-PwUn-yDZOz2bcqjqWNH0ExWgEr3K/s1600/Sifsfn+t%25C3%25ADtulo.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="294" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj9z9cvAWPb1Oh9Flr4Ic5dpubSMOWUgWWBaVMBAW-nl9qoR-oE9YvYfa0p_CuFJoZ-Mis8cKbV-BkfTvDrRPB-_3_cnmShulxzi9KqFhzPNPqn51N-PwUn-yDZOz2bcqjqWNH0ExWgEr3K/s320/Sifsfn+t%25C3%25ADtulo.jpg" width="188" /></a></div>
<br /></div>
<h3>
El protagonista</h3>
<div>
La sociedad mostrada en la película es fácilmente identificable con la actual: una sociedad acomodada que acepta de manera inconsciente una tecnología cuyos principios de funcionamiento no controla ni comprende. Su protagonista, el detective <i>Spooner</i>, es aparentemente el único que por un trauma personal se muestra escéptico. Es esta característica por la cual la víctima del supuesto asesinato le elige como destinatario de un críptico mensaje, precisamente por apartarse del común de los individuos que forman la sociedad imaginada en la película, y no seguir de manera inconsciente sus preceptos o dogmas. En el caso de la <i>Trilogía de los Robots</i>, la sociedad —terrestre— los acepta también, pero por una necesidad impuesta por las circunstancias y no aceptada por la mayoría de individuos, los cuales se muestran reacios a perder sus trabajos sustituidos por máquinas. Su protagonista, <i>Elijah Baley</i>, si bien comparte el mismo escepticismo, su superior piensa de él que no sigue los cánones de pensamiento habituales. Por añadidura, la colaboración en un principio forzada por necesidades políticas con un robot avanzado, le hará cambiar de parecer respecto a ellos. En definitiva, aunque en un primer momento parecen situaciones opuestas, ambas obras comparten a un protagonista como el único capaz de intuir los riesgos, amenazas y también, las oportunidades, que la aparición de una nueva tecnología puede producir en sus respectivos <a href="https://www.facebook.com/final.eternidad/posts/2036291566381630?__xts__%5B0%5D=68.ARBh06DPaMthe57IVzgd_rvO2UxBMrK99_yQKSxK9KruRuCfPo9M1PFIRkRQ0eXbLRZvzI6_3kGiuRS0Z8pNr2eWorsm5RwFciJNGo6eWs-Vni-_D_DBW5o3NMZyad2lyp2jRQBJgd7mHNbX4Jt-jI-Fb5O9YnzLrqch7sgXNq9BMK9BFmKn2g&__tn__=-R" target="_blank">entornos sociales</a>.</div>
<h3>
El robot</h3>
Los robots de <b>Isaac Asimov</b> son representados tradicionalmente como figuras electro-mecánicas de aspecto vagamente humano gracias a su forma antropomórfica. Un cuerpo de metal o plástico con colores dorados, marrones, blancos o grises. En <i>Bóvedas de Acero</i>, sin embargo, aparece un nuevo tipo de robot de aspecto completamente humano. Un «replicante», salvo por su construcción tecnológica, no biológica. En la película no llegan a tanto, pero sí que escogen un robot diferente, un robot que suponía un cambio de paradigma respecto a los anteriores, un robot con un rostro flexible capaz de «simular» emociones, característica que en el 2004 era algo de lo que comenzaba a hablarse en cuanto a sistema de reconocimiento facial, aunque todavía pertenecía al terreno de la ciencia-ficción —hoy en día existen prototipos de aspecto humano capaces de hacer algo parecido—. Dejando a un lado la pregunta de por qué los responsables del guión decidieron que en el año en el que transcurre la película los robots no tenían aspecto humano, lo que se puede decir hoy en día es que el robot <i>Sonny </i>y los de su tipo simbolizan la tecnología actual de consumo masivo basada en los mismos tres aspectos fundamentales: estética amigable, ubicuidad y la conexión de datos a un sistema central —llamado engañosamente «la nube»—. Tan solo tienen que quitar la coma en el título —en inglés— y formaran «iRobot» (¿les suena de algo lo de la <a href="http://cualeslarealidad.blogspot.com/2014/02/el-bueno-el-feo-y-el-malo-informaticos.html" target="_blank">«i» delante y el color blanco translúcido</a>?)<br />
<br />
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center; width: 320px;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjn1JjcYxqqqdGfoLgMm3JhLMDKlsCFk9dpW__MryWYzIJO12It2zu4VEmPaPSIFuLF1Vj6tdVTPK7lKIkyxSAg0hwThLIbYSuyWcZat8tHKMyNCkWI2yYmwL7RHylHhuZ0_GlKChsi1D1n/s1600/I%252BRobot%252BSonny%255B1%255D.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="335" data-original-width="400" height="267" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjn1JjcYxqqqdGfoLgMm3JhLMDKlsCFk9dpW__MryWYzIJO12It2zu4VEmPaPSIFuLF1Vj6tdVTPK7lKIkyxSAg0hwThLIbYSuyWcZat8tHKMyNCkWI2yYmwL7RHylHhuZ0_GlKChsi1D1n/s320/I%252BRobot%252BSonny%255B1%255D.jpg" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: justify; width: 320px;">«una criatura con una piel de plástico duro y brillante, de un color blanco casi muerto» (descripción de un robot en la novela <i style="font-size: 12.8px;">Bóvedas de Acero</i><span style="font-size: 12.8px;">)</span></td><td class="tr-caption" span="" style="font-size: 12.8px;"><br /></td></tr>
</tbody></table>
<h2>
El mensaje</h2>
<div style="text-align: justify;">
Aunque el formato de <i>blockbuster </i>entorpece en algunas ocasiones, vista con la distancia —tanto metafórica como temporal— esconde algunas ideas que resultan interesantes. En el año de producción de la película apenas había comenzado la actual revolución de los dispositivos portátiles o móviles personales, permanentemente conectados de manera inalámbrica a un servidor de datos. En ocasiones se ha hablado sobre la supuesta poca clarividencia de <b>Asimov </b>al no «predecir» la aparición de este tipo de tecnología personal de uso masivo, pero sí supo advertir de sus riesgos y de su posible impacto en la sociedad, situación que hoy en día es posible comprobar. En la trilogía de los robots nos habla de las consecuencias que puede producir una dependencia excesiva de la tecnología a través de los <i>espaciales,</i> una nueva especie de humanos cuya total dependencia de los robots se acerca peligrosamente a la que algunos tienen de unos teléfonos móviles que creen poseer, pero cuyo verdadero funcionamiento ignoran por completo. En este sentido, la obra cinematográfica explora este concepto a través de unos reclamos publicitarios con las últimas versiones de unos robots que los consumidores hemos de actualizar sí o sí, los cuales van a ir a parar a todos los hogares, repletos de sensores y con una permanente conexión a un servidor central propiedad de una empresa privada. Los robots en la película son los dispositivos móviles y los asistentes domésticos con inteligencia artificial. Dispositivos que en teoría están para asistirnos y ayudarnos, pero que en la realidad nos usan como <a href="https://pijamasurf.com/2018/09/las_10_razones_por_las_cuales_debes_abandonar_las_redes_sociales_segun_jaron_lanier_pionero_del_internet/" target="_blank">mera mercancía estadística</a> para uso publicitario.<br />
<br />
La obra toca otros aspectos filosóficos sobre el libre albedrío que <b>Asimov </b>ha manejado en obras como <i>El Hombre Bicentenario</i> (1976). Temas relacionados como la supuesta disyuntiva entre libertad o seguridad, ya se habían convertido en algo prácticamente habitual tras el ataque a las Torres Gemelas. Pero uno de los aspectos de fondo de la película básicos que apenas se habían tratado entonces y que ahora —en pleno desarrollo de la Inteligencia Artificial— comienzan a <a href="http://noticias.juridicas.com/actualidad/noticias/11479-iquest;puede-un-robot-tener-responsabilidad-civil-o-penal/" target="_blank">preocupar a los juristas</a>, es la responsabilidad legal de los actos perpetrados por los sistemas autónomos dotados de capacidad de decisión. Las situaciones a los que estos sistemas pueden enfrentarse —por ejemplo, en situaciones extremas pero posibles en las que un sistema de conducción autónomo ha de decidir <a href="http://www.ticbeat.com/seleccion-redaccion/la-conduccion-autonoma-y-los-dilemas-eticos-que-se-plantean/" target="_blank">a cuantas personas atropellar</a>— recuerdan poderosamente a las paradojas que el creador de la palabra robótica relataba en sus numerosos relatos sobre el tema. De momento, mientras se decide otra cosa, parece que lo que se propone es la prosaica y pragmática medida de que <a href="https://elpais.com/elpais/2017/03/03/ciencia/1488558055_323635.html" target="_blank">paguen impuestos</a>.<br />
<h3>
Fidelidad con el legado cultural de <b>Asimov</b></h3>
Aunque no es un robot el traidor a la especie humana sino una inteligencia artificial, sigue presente el asunto de las famosas tres leyes de la robótica a las cuales también estaba sujeta. En un principio parece que estas son vulneradas, algo que los más dogmáticos seguidores de <b>Asimov </b>encontraran escandaloso. Sin embargo, este escenario alternativo no es incompatible con su legado, como <a href="https://www.sfgate.com/entertainment/article/ASIMOV-LEGACY-IS-SAFE-2739073.php" target="_blank">explicó la propia hija del escritor</a>. Además, en relatos como el comentado de <i>Sueños de Robot</i> y la propia <i>Ley Zeroth</i> del mismo autor, demuestran que el escritor puso a prueba sus propias imaginarias leyes —en la que nunca creyó más que <a href="https://www.bbc.com/mundo/noticias-44570518" target="_blank">como un ejercicio literario</a>—. Los robots antropomórficos, una vez liberados de su conexión con la IA, se convierten en compañeros humanos sujetos a las tres leyes. <i>Sonny </i>es, sin embargo, un robot especial, ya que desde el principio tiene la capacidad de elegir si seguir las tres leyes o eventualmente, transgredirlas. En este sentido es un equivalente al robot <i>Daneel Olivaw</i>, cuya primera aparición la hizo de nuevo en la obra <i>Bóvedas de Acero</i>. El definitiva, la cuestión en la que coinciden la película y la obra de <b>Isaac Asimov</b> es que finalmente los robots acaban conviviendo con los humanos como iguales, <a href="http://retina.elpais.com/retina/2018/09/14/talento/1536917920_817240.html" target="_blank">como compañeros</a>, siendo este tal vez el aspecto en el que el autor creía como necesidad ineludible de la especie humana. </div>
<div style="text-align: justify;">
<b><span style="font-size: large;"><br />
</span></b><br />
<div style="text-align: center;">
<b><span style="font-size: large;">Entrada publicada originalmente en el blog <i><a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2018/09/yo-robot-alex-proyas-2004.html">Al Final de la Eternidad</a></i></span></b><br />
<b><span style="font-size: large;"><br /></span></b></div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
<ul></ul>
</div>
</div>
Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-5072675731601248792019-05-25T10:00:00.003+02:002024-02-02T13:07:12.308+01:00Carencia de innovación. Por Neal Stephenson<div style="text-align: justify;">
El siguiente es un artículo del escritor <b style="text-align: justify;"><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Neal_Stephenson" target="_blank">Neal Stephenson</a></b><span style="text-align: justify;"> acerca del progresivo deterioro científico e innovador que la sociedad en la que vivimos viene sufriendo. Fue publicado a finales del año 2011 y afortunadamente, en los años recientes se están sucediendo logros notables en diversos ámbitos, a destacar los relacionados con la exploración espacial cuyos proyectos actualmente en marcha hacen parecer algo ridículas a algunas de las que propone el autor como innovadoras en su momento, hace apenas un lustro. </span><span style="text-align: justify;">Una nueva carrera ha surgido —esta vez con un trasfondo mucho más positivo y productivo— entre agencias gubernamentales como la </span><b style="text-align: justify;">NASA </b><span style="text-align: justify;">y compañías privadas como </span><b style="text-align: justify;">SpaceX,</b><span style="text-align: justify;"> </span><b style="text-align: justify;">Virgin Galactic </b><span style="text-align: justify;">o <b>Blue Origin</b>. Incluso tenemos cerca la muy agradable sorpresa de la española </span><b style="text-align: justify;">PLD Space</b><span style="text-align: justify;">, que recientemente ha sido contratada por la </span><b style="text-align: justify;">ESA </b><span style="text-align: justify;">gracias a su propuesta completamente innovadora que llena un hueco hasta ahora inédito de micro-proyectos espaciales. Sin embargo, a pesar del atisbo de optimismo que la situación aparenta presentar, conviene no olvidar cuáles son las amenazas que <a href="http://blogs.20minutos.es/ciencias-mixtas/2017/05/31/es-creible-el-new-space-dos-autores-de-ciencia-ficcion-opinan/" target="_blank">continúan vigentes</a> y el relevante papel que la ciencia-ficción desempeña en este proceso. Sirva con este propósito el siguiente texto del citado autor, traducido por el que escribe las líneas de esta pequeña introducción.</span></div>
<h2 style="text-align: justify;">
Carencia de innovación <span style="font-size: small;">(<i>Innovation Starvation</i>)</span></h2>
<h3 style="text-align: justify;">
Por Neal Stephenson <span style="font-size: small;">(<a href="http://www.worldpolicy.org/journal/fall2011/innovation-starvation" target="_blank">acceso al artículo original </a></span>)</h3>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhDWkNv-h-kDPFaqySTMDYAaC57EwpBh-mvKK6oi4q17Df2V827rPetBTZt859iAnObIjjrnmey1cDMTvZIwvbmknxIqV5z3syH1OZGY0QkkkdUStsZ1U5ADmMNTXw2yMEJUUxnlljMo9Fz/s1600/MHopkins_tree02%255B1%255D.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img alt="Representación de un simbólico «árbol de de las ideas» yermo" border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhDWkNv-h-kDPFaqySTMDYAaC57EwpBh-mvKK6oi4q17Df2V827rPetBTZt859iAnObIjjrnmey1cDMTvZIwvbmknxIqV5z3syH1OZGY0QkkkdUStsZ1U5ADmMNTXw2yMEJUUxnlljMo9Fz/s320/MHopkins_tree02%255B1%255D.jpg" title="Representación de un simbólico «árbol de de las ideas» yermo" width="303" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">[Imagen: Marshall Hopkins]</td></tr>
</tbody></table>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: 1.1em; padding: 0px;">
<div style="font-family: georgia; font-size: 15px;">
<div style="text-align: justify;">
Mi vida abarca la época en la que Estados Unidos de América fue capaz de lanzar seres humanos al espacio. Algunos de mis recuerdos más tempranos son los de estar sobre una alfombra de rizo ante una enorme televisión en blanco y negro, viendo las primeras imágenes de la misión <i>Géminis</i>. Este verano, a la edad de 51 años —apenas puede decirse viejo— observé en una pantalla plana el momento en el que el último transbordador espacial despegaba de la plataforma. He seguido el decrecimiento del programa espacial con tristeza, incluso amargura. ¿Dónde está mi estación espacial en forma de donut? ¿Dónde está mi billete para Marte? Durante todo este tiempo he mantenido ocultas mis impresiones, hasta hace poco. La exploración espacial siempre ha tenido sus detractores. Quejarse de su fallecimiento es exponerse a los ataques de aquellos que no se identifican con un hombre blanco burgués de mediana edad estadounidense, que no ha visto sus fantasías de infancia cumplidas.<br />
<a name='more'></a></div>
</div>
<div style="font-family: georgia; font-size: 15px;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div style="font-family: georgia; font-size: 15px;">
<div style="text-align: justify;">
Sin embargo, me preocupa que la incapacidad de igualar los logros del programa espacial de los años 60 pudiera ser síntoma de un fracaso general de nuestra sociedad para la realización de grandes logros. Mis padres y abuelos fueron testigos de la creación del avión, el automóvil, la energía nuclear y la computadora, por nombrar sólo algunos ejemplos. Los científicos e ingenieros que llegaron a la mayoría de edad durante la primera mitad del siglo XX, podían esperar del futuro la construcción de soluciones que resolverían viejos problemas como reformar el paisaje, apuntalar la economía y proporcionar puestos de trabajo para la burguesa clase media, que fueron la base de la estable democracia que tenemos.</div>
</div>
<div style="font-family: georgia; font-size: 15px;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div style="font-family: georgia; font-size: 15px;">
<div style="text-align: justify;">
El derrame de la plataforma petrolífera <i>Deepwater Horizon</i> de 2010 cristalizó mi sensación de que hemos perdido la capacidad de hacer cosas de gran envergadura. La crisis petrolera de la OPEP fue en 1973, hace casi 40 años. Entonces ya era una obvia locura permitir que Estados Unidos se convirtiera en rehén económico de cierta clase de países como las de aquellos donde se producía petróleo. Esto llevó a la propuesta de <b>Jimmy Carter</b> del desarrollo de una enorme industria de combustibles sintéticos en suelo americano. Cualquiera que sea la opinión que se tenga sobre los méritos de la presidencia Carter o de esta propuesta en particular, fue al menos un esfuerzo serio para abordar el problema.</div>
</div>
<div style="font-family: georgia; font-size: 15px;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div style="font-family: georgia; font-size: 15px;">
<div style="text-align: justify;">
Poco se ha escuchado sobre el tema desde entonces. Se ha estado hablando de parques eólicos, energía de las mareas y energía solar durante décadas. Se han hecho algunos progresos en esos ámbitos, pero la energía se sigue basando en el petróleo. En mi ciudad, Seattle, un proyecto planeado hace 35 años sobre la ejecución de una línea de tren ligero a través del lago Washington, está siendo bloqueado por una iniciativa ciudadana. Frustrada o interminablemente retrasada en sus esfuerzos por construir, la ciudad avanza a duras penas con un proyecto para pintar carriles para bicicletas en el pavimento de las calles.</div>
</div>
<div style="font-family: georgia; font-size: 15px;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div style="font-family: georgia; font-size: 15px;">
<div style="text-align: justify;">
A principios de 2011 participé en una conferencia llamada <i><a href="https://futuretense.wpengine.com/" target="_blank">Future Tense</a></i>, en la cual lamenté el declive del programa espacial tripulado, aunque la conversación acabo pivotando hacia la energía, lo que indica que el verdadero problema no son los cohetes. Es esta —la energía— nuestra gran y amplia incapacidad como sociedad para llevar a cabo grandes proyectos. De una manera totalmente fortuita, había tocado un punto sensible. La audiencia de <i>Future Tense</i> estaba más segura que yo de que la ciencia-ficción [CF] tenía relevancia —incluso utilidad— para abordar el problema. Escuché dos teorías sobre por qué:</div>
</div>
<ol style="font-family: georgia; font-size: 15px;">
<li style="text-align: justify;">La <i>Teoría de la Inspiración.</i> La CF inspira en la gente la elección de carreras relacionadas con ciencia y tecnología. Esto es indudablemente cierto, ademas de obvio.</li>
<li style="text-align: justify;">La <i>Teoría de los Jeroglíficos</i>. La buena CF proporciona una imagen plausible, totalmente elaborada de una realidad alterna en la cual se ha producido algún tipo de innovación significativa. Un buen universo de CF tiene una coherencia y una lógica interna que los científicos e ingenieros pueden valorar. Los ejemplos incluyen los robots de <b>Isaac Asimov</b>, los cohetes de <b>Robert Heinlein</b> y el ciberespacio de <b>William Gibson</b>. Como dice <b>Jim Karkanias</b> de <i>Microsoft Research</i>, tales iconos sirven como jeroglíficos: símbolos simples y reconocibles en cuya significación todos están de acuerdo.</li>
</ol>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia"; font-size: 15px;">Investigadores e ingenieros se han visto a si mismos concentrándose en temas cada vez más y más específicos a medida que la ciencia y la tecnología se hacía más complicada. Las grandes compañías o laboratorios tecnológicos emplean cientos o miles de personas para que cada una de ellas se dedique a manejar tan sólo una ínfima parte del proyecto general. La comunicación entre ellos puede llegar a convertirse en un maremágnum de correos electrónicos y powerpoints. La afición que muchas de estas personas tienen por la CF es en parte síntoma de la necesidad de encontrar un marco común que les facilite a ellos y a sus colegas, una visión general. Pretender coordinar todos estos esfuerzos a través del clásico sistema basado en la autoridad y control, es casi como intentar dirigir toda una economía moderna desde el Kremlin. Conseguir trabajar sin trabas de manera independiente pero enfocados hacia metas comunes es en gran medida mucho más parecido a un mercado libre y auto-organizado de ideas.</span></div>
<div style="font-family: georgia; font-size: 15px;">
<h3 style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia";"><span style="font-size: 15px;">EXPANDIENDO LAS ÉPOCAS</span></span></h3>
<div style="text-align: justify;">
<span style="text-align: justify;">La CF ha cambiado a lo largo de todo este tiempo —desde los 50 (la era del desarrollo de la energía nuclear, aviones a reacción, la carrera espacial y la computadora) hasta ahora—. En líneas generales, el tecno-optimismo de la </span><i style="text-align: justify;">Edad de Oro de la CF</i><span style="text-align: justify;"> ha dado paso a una ficción escrita en un tono generalmente más oscuro, más escéptico y ambiguo. Yo mismo he tendido a escribir mucho sobre arquetipos de hackers tramposos que explotan las capacidades ocultas de sistemas sofisticados, ideados por otros igualmente sin rostro.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Creyendo haber alcanzado el máximo progreso en cuanto a tecnología, buscamos llamar la atención sobre sus efectos secundarios destructivos. Algo que resulta absurdo si te tiene en cuenta que estamos todavía atados a tecnologías vetustas de 1960 como la de los destartalados reactores de Fukushima, en Japón, teniendo en el horizonte la posibilidad de la energía limpia de la fusión nuclear. El desarrollo de nuevas tecnologías y su implementación a escalas heroicas ya no es una preocupación infantil de unos cuantos empollones con reglas de cálculo, sino un imperativo. Es la única manera de que la raza humana escape de sus aprietos actuales. Lástima que hayamos olvidado cómo hacerlo.</div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="font-family: georgia;">
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
«¡Ustedes son los que han bajado el ritmo!», proclama <b>Michael Crow</b>, presidente de la Universidad Estatal de Arizona (y otro de los oradores de <i>Future Tense</i>). Se refiere, por supuesto, a los escritores de CF. Científicos e ingenieros, parece estar diciendo, están preparados y buscando nuevas cosas para desarrollar. Es hora de que los escritores de CF comiencen a mostrar su valía creando grandes visiones que aporten un sentido. De ahí el <a href="http://hieroglyph.asu.edu/" style="font-family: georgia; font-size: 15px;" target="_blank"><i>Proyecto Jeroglífico</i></a>, una iniciativa para crear una nueva antología de CF que de alguna manera pueda convertirse en una vuelta consciente al tecno-optimismo práctico de la Edad de Oro.</div>
<h3 style="font-size: 15px; text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia";"><span style="font-size: 15px;">CIVILIZACIONES DEL ESPACIO</span></span></h3>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
China es frecuentemente citada como un país involucrado en grandes proyectos, y no hay duda de que están construyendo presas, sistemas ferroviarios de alta velocidad y cohetes a un ritmo extraordinario. Pero no son fundamentalmente innovadores. Su programa espacial, al igual que todos los demás países (incluido el nuestro), es sólo una imitación del realizado hace 50 años por los soviéticos y los estadounidenses. Un programa realmente innovador implicaría asumir riesgos (y aceptar fracasos) para ser pionero en algunas de las tecnologías de lanzamiento espacial alternativas que han sido promovidas por investigadores de todo el mundo durante las décadas dominadas por los cohetes.</div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
Imagínense una fábrica de <a href="http://www.worldpolicy.org/journal/fall2011/thus-spake-nano" target="_blank">pequeños vehículos</a> de producción en masa, no más grandes y complejos que un refrigerador, surgidos de una cadena de montaje, con toda su apretada carga al máximo y hasta los topes de hidrógeno líquido no contaminante como combustible, para ser posteriormente expuestos a un intenso calor concentrado proveniente de una batería terrestre de láseres o antenas de microondas. Calentados a temperaturas más allá de lo que una reacción química puede lograr, el hidrógeno emerge de una boquilla en la base del dispositivo y los lanza disparados por la atmósfera. Con el vuelo trazado por los láseres o microondas, el vehículo se eleva en órbita, llevando una carga útil más grande en relación a su tamaño de lo que un cohete químico podría manejar, pero manteniendo contenidas la complejidad, los gastos y el esfuerzo necesarios. Durante décadas, esta ha sido la visión de investigadores como los físicos <b>Jordin Kare </b>y <b>Kevin Parkin</b>. Una idea similar, utilizando un pulso de láser desde tierra dirigido a la parte trasera de un vehículo espacial como detonante del combustible, era sugerida por <b>Arthur Kantrowitz</b>, <b>Freeman Dyson</b> y otros eminentes físicos a principios de los años sesenta.</div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
Si suena demasiado complicado, entonces considérese la propuesta de 2003 de <b>Geoff Landis</b> y <b>Vincent Denis</b> sobre construir una torre de 20 kilómetros de altura usando simples vigas de acero. Los cohetes convencionales lanzados desde su cima podrían transportar el doble de carga útil que lanzados desde el suelo. Incluso abundan las investigaciones, que datan desde <b>Konstantin Tsiolkovsky</b>, el padre de la astronáutica a partir de finales del siglo XIX, para demostrar que una simple cuerda —de gran longitud con el extremo puesto en órbita alrededor de la Tierra— podría ser utilizada para extraer cargas útiles hacía la atmósfera superior y ponerlas en órbita sin necesidad de motores de ningún tipo. La energía sería bombeada al sistema usando un proceso electrodinámico sin partes móviles.</div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
Todas son ideas prometedoras, del tipo de las que llevaban a generaciones pasadas de científicos e ingenieros a sentir entusiasmo por sus proyectos de construcción.</div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
Pero para comprender lo alejada que nuestra mentalidad actual está de ser capaz de intentar innovar a gran escala, considérese el destino de los tanques externos del transbordador espacial [TE]. Dejando a un lado el vehículo en sí mismo, el TE era el elemento más grande y prominente del transbordador espacial mientras estaba en la plataforma de lanzamiento. Permanecía unido a la lanzadera —o más bien habría que decir que es la lanzadera la que permanecía unida a él— mucho después de que los dos impulsores suplementarios hubieran caído. El TE y el transbordador permanecían conectados todo el trayecto fuera de la atmósfera y en el espacio. Sólo después de que el sistema hubiera alcanzado la velocidad orbital era desechado el tanque dejándolo caer en la atmósfera, donde era destruido en la reentrada.</div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
A un costo marginal modesto, los TE podrían haberse mantenido en órbita indefinidamente. La masa del TE en la separación, incluyendo los propelentes residuales, era aproximadamente el doble de la mayor carga útil posible del <i>Shuttle</i>. No destruirlos habría triplicado la masa total lanzada en órbita por el transbordador. Los TE podrían haber sido conectados para formar unidades que habrían humillado a la Estación Espacial Internacional actual. El oxígeno e hidrógeno residuales que fluyen a su alrededor podrían haberse combinado para generar electricidad y producir toneladas de agua, una mercancía que es muy cara y deseable en el espacio. Pero a pesar del duro esfuerzo y la apasionada defensa de los expertos espaciales que deseaban ver los tanques puestos en uso, la NASA —por razones tanto técnicas como políticas— envió a cada uno de ellos a una ardiente destrucción en la atmósfera. Visto de manera simbólica, dice mucho sobre las dificultades de innovar que existen en otros ámbitos.</div>
<h3 style="font-size: 15px; text-align: justify;">
<span style="font-family: "georgia";"><span style="font-size: 15px;"> EJECUTANDO GRANDES PROYECTOS</span></span></h3>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
La innovación no puede darse sin aceptar el riesgo que conlleva la posibilidad del fallo. Las vastas y radicales innovaciones de mediados del siglo XX tuvieron lugar en un mundo que, en retrospectiva, resulta increíblemente peligroso e inestable. Las posibles consecuencias que la mente de nuestro tiempo identifica como serias amenazas podrían no ser tan graves —suponiendo que hayan sido tan siquiera tenidas en cuenta— por personas habituadas a grandes crisis económicas, guerras mundiales y a la Guerra Fría, en tiempos en los que los cinturones de seguridad, los antibióticos y muchas vacunas no existían. La competencia entre las democracias occidentales y las potencias comunistas obligó a las primeras a empujar a sus científicos e ingenieros al límite de lo que podían imaginar y suministraron una especie de red de seguridad en caso de que sus esfuerzos iniciales no dieran resultado. Un canoso veterano de la NASA me dijo una vez que los aterrizajes en la luna del <i>Apolo</i> fueron el mayor logro del comunismo.</div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
En su reciente libro <em style="background-color: white; color: #414142; font-family: Georgia; font-size: 14px; text-align: start;">Adapt: Why Success Always Starts with Failure</em><span style="background-color: white; color: #414142; font-family: "georgia"; font-size: 14px;"> (</span>Adáptate: ¿Por qué el éxito siempre comienza con el fracaso?), <b>Tim Harford</b> describe el descubrimiento por parte de <b>Charles Darwin</b> de una amplia variedad de especies distintas en las Islas Galápagos, situación que contrasta con el esquema que se observa en los grandes continentes, donde los experimentos evolutivos tienden a ser minimizados a través de una especie de consenso ecológico por el cruce entre especies. El «aislamiento de las Galápagos» frente a la «jerarquía corporativa impaciente» es el contraste establecido por <b>Harford </b>en la evaluación de la capacidad de una organización para innovar.</div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
La mayoría de las personas que trabajan en corporaciones o instituciones académicas han presenciado algo como lo siguiente: un grupo de ingenieros están sentados juntos en una habitación, intercambiando ideas entre si. De la discusión emerge un nuevo concepto que parece prometedor. Entonces, una persona con un ordenador portátil en una esquina, después de haber realizado una rápida búsqueda en Google, anuncia que esta «nueva» idea es, de hecho, antigua —o al menos vagamente similar— y ya ha sido probada. O falló, o lo logró. Si falló, entonces ningún gerente que quiera mantener su trabajo aprobará gastar dinero tratando de revivirlo. Si se logra, entonces es patentado y se supone que la entrada en el mercado es inalcanzable, ya que las primeras personas que piensan en ella tendrán la «ventaja del primer movimiento» y habrán creado «barreras competitivas». El número de ideas aparentemente prometedoras que se han aplastado de esta manera debe rondar los millones.</div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
¿Que hubiera pasado si esa persona del rincón no hubiera sido capaz de encontrar nada en Google? Se habrían necesitado semanas de investigación en la biblioteca para encontrar alguna evidencia de que la idea no era totalmente nueva, después de un largo y penoso trabajo rastreando muchas referencias en un montón de libros, algunas relevantes, otras no. Una vez hallado, el precedente podría no haber parecido tan precedente directo después de todo. Podrían haber motivos por los que valiese la pena una revisión de la idea, tal vez hibridándola con innovaciones de otros campos. De aquí las virtudes del aislamiento de las Islas Galápagos.</div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
La contrapartida del aislamiento «galapagüeño» es la lucha por la supervivencia en un gran continente, donde los ecosistemas firmemente establecidos tienden a desdibujar y absorber las nuevas adaptaciones. <b>Jaron Lanier</b>, informático, compositor, artista visual y autor del reciente libro <i>You are Not a Gadget: A Manifesto </i>(Contra el rebaño digital: Un manifiesto), tiene algunas claves sobre las consecuencias no deseadas de Internet —el equivalente informativo de un gran continente— sobre nuestra capacidad para correr riesgos. En la era pre-internet, los gerentes de empresas se veían obligados a tomar decisiones basadas en lo que sabían era información limitada. Hoy en día, por el contrario, los gerentes disponen de flujos de datos en tiempo real desde tal cantidad de innumerables fuentes que no podían ni tan siquiera imaginar un par de generaciones atrás, y poderosas computadoras procesan, organizan y muestran los datos en maneras que van tanto más allá de los gráficos confeccionados a mano de mi juventud como los actuales videojuegos modernos se corresponden con el tres-en-raya. En un mundo donde los tomadores de decisiones están tan cerca de ser omniscientes, es fácil ver el riesgo como un pintoresco artefacto de un pasado primitivo y peligroso.</div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
La ilusión de poder eliminar la incertidumbre de la toma de decisiones corporativa no es sólo una cuestión de estilo de gestión o preferencia personal. En el entorno legal que se ha desarrollado alrededor de las corporaciones que cotizan en bolsa, los directivos no tienen motivación ni interés alguno de asumir cualquier riesgo del que tengan conocimiento —o, en la opinión de algún jurado futuro, de cualquiera que debiera haber previsto— ni aunque tengan alguna corazonada de que la apuesta pudiese ser rentable a largo plazo. No existe el «largo plazo» en las industrias impulsadas por el próximo informe trimestral. La posibilidad de alcanzar beneficios gracias a alguna innovación es sólo eso, una mera posibilidad que no tendrá tiempo de materializarse antes de que los accionistas minoritarios comiencen a emitir sus citaciones de demanda judicial.</div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="font-size: 15px; text-align: justify;">
La creencia de hoy en la ineluctable certeza es el verdadero asesino de la innovación de nuestra época. En este entorno, lo mejor que un gerente audaz puede hacer es desarrollar pequeñas mejoras a los sistemas existentes —dándolo todo en cada paso, por así decirlo, hacia un máximo local, recortado lo sobrante, aprovechando toda pequeña innovación— como hacen los urbanistas al pintar carriles bici en las calles como un intento de solucionar los problemas energéticos. Cualquier estrategia que implique cruzar un valle —es decir, aceptar pérdidas a corto plazo para alcanzar un objetivo más alto pero lejano— pronto será bloqueada por las demandas de un sistema que celebra ganancias a corto plazo y tolera el estancamiento, quedando el resto sentenciado al fracaso. En resumen, un mundo donde las grandes ideas no pueden ser realizadas.</div>
<div style="background-color: white; color: #414142; font-family: georgia; letter-spacing: normal; margin-bottom: 1.1em; padding: 0px; text-align: justify; text-indent: 0px; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<div style="font-size: 14px; font-style: normal; font-weight: normal;">
<br /></div>
<div style="font-size: 14px; font-style: normal; font-weight: normal;">
<br /></div>
<div class="rtecenter" style="background-color: white; color: #414142; font-family: georgia; font-size: 14px; font-style: normal; font-weight: normal; letter-spacing: normal; margin-bottom: 1.1em; padding: 0px; text-align: center; text-indent: 0px; text-transform: none; white-space: normal; word-spacing: 0px;">
<div style="margin: 0px;">
<div style="text-align: justify;">
<div style="text-align: center;">
<span class="notranslate">*****</span></div>
</div>
</div>
<div style="margin: 0px;">
<div style="text-align: justify;">
<div style="text-align: center;">
<span class="notranslate">*****</span></div>
</div>
</div>
</div>
<div style="font-size: 14px; font-style: normal; font-weight: normal; text-align: center;">
<br /></div>
<div style="font-size: 14px; font-style: normal; font-weight: normal;">
Neal Stephenson es autor del <i>techno-thriller</i> <i>REAMDE</i> (2011), así como la epopeya histórica de tres volúmenes <i>Ciclo barroco</i> —<i>Azogue </i>(2003), <i>La Confusión</i> (2004) y <i>El Sistema del Mundo</i> (2004)<i>—</i> además de las novelas <i>Anatema </i>(2008), <i>Criptonomicón </i>(1999), <i>La era del diamante</i> (1995), <i>Snow Crash </i>(1992) , y <i>Zodíaco</i> (1988). También es el fundador de <i><a href="http://hieroglyph.asu.edu/" target="_blank">Jeroglífico</a></i>, un proyecto de escritores por una ciencia-ficción que represente mundos futuros en los que los grandes proyectos sean posibles</div>
<div style="font-size: 14px; font-style: normal; font-weight: normal;">
<br /></div>
</div>
</div>
<div style="text-align: center;">
<span style="font-size: large;"><b>Artículo publicado originalmente en el blog <i><a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2017/07/carencia-de-innovacion.html">Al final de la Eternidad</a></i></b></span></div>
<div style="font-weight: normal;">
<span style="font-size: x-small;"><br />
</span></div>
<div style="font-weight: normal;">
<span style="font-size: x-small;"><br />
</span></div>
<div style="font-weight: normal; text-align: center;">
<span style="font-size: x-small;">Artículo publicado posteriormente en el blog <i><a href="https://cualeslarealidad.blogspot.com/2017/09/carencia-de-innovacion.html" target="_blank">Información & Realidad</a> </i></span><span style="font-size: small;">y en la plataforma <a href="https://www.linkedin.com/pulse/carencia-de-innovaci%25C3%25B3n-lino-moinelo?trackingId=FSdN0XbtRUCSq%2FcfFGUMwA%3D%3D&lipi=urn%3Ali%3Apage%3Ad_flagship3_profile_view_base_recent_activity_content_view%3BCDdyQWjsRCCtmGsMMyfcAg%3D%3D" target="_blank">LinkedIn</a></span></div>
</div>
<br />Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-22335700464462647352019-05-12T10:00:00.003+02:002021-12-31T12:28:52.922+01:00La redención de Luke Skywalker<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEheAQ30NVXixJtAjpZZ9fz-l8XDuVdee4SXUfm5Ve2yp1K2_VooM_nUlAAn1grRymPo9NHx7rKs8o0vn4YtBn38tNY08882XgM_CSvizYaet1OwRoczjHSbUTcNm0LBfLK3arLM_qx5Cx3s/s1600/Young+Mark+Hamill.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Un joven Mark Hamill como Luke Skywalker" border="0" data-original-height="304" data-original-width="496" height="196" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEheAQ30NVXixJtAjpZZ9fz-l8XDuVdee4SXUfm5Ve2yp1K2_VooM_nUlAAn1grRymPo9NHx7rKs8o0vn4YtBn38tNY08882XgM_CSvizYaet1OwRoczjHSbUTcNm0LBfLK3arLM_qx5Cx3s/s320/Young+Mark+Hamill.png" title="Un joven Mark Hamill como Luke Skywalker" width="320" /></a></div>
<i><br />
</i> <i>The Last Jedi</i>' (<b>Rian Johnson</b>, 2017) es la entrega de <i>Star Wars</i> que más división ha generado entre los aficionados. Según revela el famoso <i><a href="https://www.rottentomatoes.com/m/star_wars_the_last_jedi" target="_blank">Rotten Tomatoes</a>, </i>una divergencia similar ocurre entre crítica y público. ¿A qué se debe esta división? ¿Es por la propia película? ¿Tiene algo que ver con las diferencias que ya existían desde hace décadas entre los seguidores de <i>Star Wars</i>? Cuando todo comenzó allá en el lejano 1977, la obra respondía a la inquietud de un prometedor director californiano que lo apostó todo por su creación, a pesar de las dificultades iniciales. Con el tiempo, se han sumado a la saga aficionados cuya conexión con la trilogía clásica es poca o nula, hasta que hoy en día la saga responde sobre todo al ansia económica de la compañía de <i>Mickey Mouse</i>. Hay entre ambos extremos circunstancias que quedan a una distancia muy, muy lejana. La eficacia comercial de la actual dueña ha configurado una audiencia que, cual ejército de clones, ha relegado al olvido a los viejos rebeldes que todavía seguimos soñando. Repitiéndose la historia, el vendaval de expectación ocultó las incongruencias de la anterior entrega a una afición que lo perdonaba todo con tal de viajar a lejanas galaxias. Pero pasada la tormenta, esa misma afición ya sin síndrome de abstinencia, no se da cuenta de que la obra de <b>Rian Johnson</b> en realidad lo que hace es señalar con el dedo las carencias que ya existían [spoilers]<br />
<a name='more'></a><h2>
Batallas elaboradas</h2>
Uno de los factores que más ha gustado de <i>Rogue One</i> y de la que carecía estrepitosamente la primera entrega de la actual trilogía —y que en una <i>space opera</i> tiene difícil justificación— es la de un mínimo de épica en las batallas. La destrucción de la <i>Starkiller </i>es uno de los más ridículos casos de ausencia de esfuerzo y mérito de sus protagonistas para lograr sus objetivos, y algo similar puede decirse del resto de batallas. En <i>Los Últimos Jedi</i> sin embargo, son elaboradas, planificadas y como es normal, hay cosas que no salen bien y que exigen sacrificios —además, también está el gordo cuyo <i>X-Wing</i> es volado en pedazos, como giño a la saga original—. Sabemos que lo van a lograr, pero de lo que se trata es que les suponga —o así nos lo hagan creer— un esfuerzo. Que por algo son héroes. O eso es lo que creíamos.<br />
<h2>
Tonto útil</h2>
Hablar de coherencia en una saga «de fantasía» también considerada «infantil» por muchos de los actuales habituales espectadores que acaban de aterrizar, puede parecer algo exagerado. Pero pedir coherencia nunca está de más. Y si es infantil puede que con más motivo. Dentro de las pretensiones que pueda tener una obra de entretenimiento como esta, tacharla de intrascendente pone de manifiesto la ignorancia de la repercusión de la saga, la cual se puede considerar perfectamente como unos de los movimientos culturales populares más importantes del Siglo XX —en Australia existe hasta una iglesia <i>Jedi </i>oficial—. Es decir, su influencia no tiene practicante precedente alguno en la historia y sobrepasó por completo todas las predicciones cuando apareció ante el público. Es una obra de entretenimiento ligero y fantasioso, sí, pero no es una obra cualquiera y tratarla como una más del montón demuestra un gran desdén por el su legado cultural —y poco respeto a los espectadores—. Esto es lo que denota cuando en <i>El Despertar de La Fuerza</i> aparecen como comandantes de una formidable estación espacial del tamaño de un planeta, unos pusilánimes que no merecían estar al mando ni de una colchoneta hinchable. En esta reciente entrega dan al menos una explicación para que el disparate no lo sea tanto. Lo cual es algo. Y esta explicación la podrá entender todo aquel que haya tenido un jefe en un entorno laboral muy politizado, y se haya preguntado cómo es posible que esta persona esté ahí. Pues eso.<br />
<h2>
<i> Kylo Ren</i></h2>
Si los comandantes de la <i>Starkiller </i>eran lo suficientemente patosos como para dejar que <i>La Primera Orden</i> perdiera un recurso semejante —si todo un imperio apenas pudo completar una <i>Estrella de la Muerte</i> que no era más que un pequeño satélite en comparación, esta perdida debería haberla mandado directamente a la bancarrota, pero ¡eh, las palomitas aún no se han acabado!—, resulta que el principal villano de la nueva saga es un psicótico que mata a su padre y luego se dejar cicatrizar por alguien que no había cogido un sable de luz en su vida. En <i>Los Últimos Jedi</i> de nuevo <a href="https://www.youtube.com/watch?v=AMR2TcO1BoU" target="_blank">el <i>Líder Supremo Snoke</i> nos brinda una explicación</a> para intentar justificar el desaguisado, aclarando que los sentimientos hacía su padre pudieran haberle afectado —los afectos personales y el temor a su perdida son una constante en la saga alrededor de la conversión hacía el <i>lado oscuro</i>—. <i>Kylo Ren</i> es un personaje patético en la primera película de la reciente trilogía, torpe, desequilibrado y tan falto de carisma que intenta suplir su carencia anhelando imitar a su abuelo <i>Darth Vader</i>, pero a lo máximo que llega es a ponerse una ridícula e inútil máscara. Ahora bien, en este sentido de nuevo surge el enfrentamiento entre planteamientos sobre la saga: por un lado el <i>Darth Vader</i> de <b>Hayden Christensen</b>, un niñato impertinente malcriado y caprichoso, que tras pataleta y refunfuño tras otro, acaba convirtiéndose en un cobarde sanguinario carente de personalidad. Y por otro el de la trilogía original, sobrio, imponente y poderoso. En esta ocasión <i>Kylo Ren</i> se muestra a la vez humano en el sentido de no renunciar a sus sentimientos —como <i>Vader </i>en <i>El retorno del Jedi</i>—, furioso en ocasiones pero frío, calculador y deseoso de mando y poder cuando es necesario. Un «malo» como toca. O casi.<br />
<h2>
<i> Leia «Poppins»</i></h2>
<div>
<i>La Fuerza</i> comenzó en la saga clásica como una antítesis a la tecnología de una galaxia donde con ella se podía lograr cualquier cosa. Un <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2016/11/la-fuerza-de-lo-desconocido.html">concepto poderoso</a> que a pesar de lo que mucha gente pueda creer, sus conexiones con algunos aspectos científicos son muy interesantes, siendo utilizada por el divulgador <b>Michio Kaku</b> para comentar sobre ellos. Con todo, en el universo ficticio de la saga era necesario mucho esfuerzo y entrenamiento para dominarla, tanto físico como mental. Ponerla en práctica requería un grado de concentración proporcional a la magnitud de lo que se deseaba lograr. Por ejemplo, no es lo mismo atrapar un sable de luz cuando estás a punto de ser devorado por un animal salvaje, que elevar a todo un <i>X-Wing</i> desde las profundidades de un pantano cuando te apetece. A pesar de lo fantasioso del concepto todo estaba contenido dentro de margenes aceptables. Pero poco a poco, ya en la segunda trilogía, todo comenzó a salirse del tiesto. En lugar de aprovechar la potencia del concepto para tratar asuntos de cómo se relaciona la especie humana con la tecnología o con los misterios y fuerzas que todavía alberga nuestro universo, se introduce un concepto que a los <i>Jedi </i>les hacía muy poca falta, como los dichosos <i><a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2016/04/la-decepcion-fantasma.html">midiclorianos</a></i>. Cuando no, se usaba para justificar de manera simple y tramposa cualquier solución en la trama. Para rematar, la convierten en un monopolio de manera que sólo los que tengan «carné de <i>Jedi</i>» puedan ejercerla, además, sin apenas despeinarse: mover enormes columnas o dar saltos gigantescos como quien se quita una mota de polvo del hombro. Lo paradójico del asunto es que parece que muchos de esos mismos aficionados que aplaudían las repentinamente poderosas y polivalentes capacidades de los <i>Jedi</i> —o que no se sorprendían que alguien que acababa de aparecer la maneje como si lo hubiera hecho toda su vida— critican ahora que <i>Leia Organa</i>, en una situación tan extrema como la de salvar su vida, sobreviva unos minutos en el vacío del espacio y en total ingravidez, se desplace hacía la nave más cercana. Lo cierto es que la estética de la escena recuerda al famoso personaje de <b>Disney</b>, lo que ha logrado convertirla en un blanco fácil para los «haters». Por esto, su director podría habérsela ahorrado.</div>
<h2>
<i> X-Wing</i> con inercia</h2>
<div>
Uno de los aspectos que más se ha criticado de <i>Star Wars</i> ha sido el poco realismo de la cinemática de los combates. Es conocido que la estética de las batallas espaciales está inspirada en los combates aéreos de la 2ª Guerra Mundial, por lo que es evidente que ha primado la estética antes que la precisión científica. No obstante, hasta ahora se podía explicar que las naves de combate —<i>X-Wing</i>, <i>TIE Fighter</i>, etc,— usaban una combinación de algo parecido a motores de iones —pero mucho más energéticos— y una <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2010/03/los-aciertos-de-la-ciencia-ficcion.html">técnica ficticia de impulso no inercial</a>, que les permitía realizar maniobras y piruetas en el espacio —todo esto aparte del motor de hiperimpulso—. A diferencia de los cazas de combate imperiales, la <i>Alianza Rebelde</i> equipa a los suyos con cabinas presurizadas y era presumible que, al igual que el resto de navíos, también con un sistema de soporte vital y compensación de inercia para que los pilotos pudieran soportar las enormes aceleraciones a las que en esas condiciones, podían estar sometidos. En <i>Los Últimos Jedi</i>, <b>Rian Johnson</b> nos sorprende con un <i>Ala-X</i> equipado con un retrocohete adicional que, por el aspecto de lo expelido por la tobera parece alimentado con... ¡combustible químico! Además, en algunas escenas se ve a su piloto maniobrar la palanca de mando para realizar un giro mientras se apoya en el lado contrario para compensar la inercia... ¡con la mano! Creo que en este caso ha sido un error hacer parecer a los <i>X-Wing</i> con los <i>Vipers </i>de Galáctica. Si había que ir en algún sentido para dotar de mayor coherencia o verosimilitud, puede que este no fuera el mejor.</div>
<h2>
<i> La Fuerza</i> y sus usuarios</h2>
<div>
Cuando surgió la trilogía original el mundo todavía no había comenzado a experimentar la revolución de las comunicaciones, Internet, los dispositivos móviles y todo lo que actualmente configura nuestro día a día. Pero ya entonces el mito de una fuerza que permanecía fuera del universo tecnológico de <i>Star Wars</i> era un concepto cuyo poder no debía subestimarse. En los postreros años se ha revelado como una necesidad urgente conocer el alcance que los avances en dicha área producen en la sociedad. <i>Star Wars</i> es una <i>Space Opera</i> y como tal, <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2016/02/star-wars-el-mito-universal.html">bebe de los mitos</a> y anhelos de la sociedad así como la fantasía épica lo hacía de las leyendas medievales. Esta nueva manera de comunicar la cultura popular que surgió a finales de la década de los 70 era un vehículo magnífico para explorar todos estos nuevos miedos a los que nos enfrentamos ahora mismo. Sin embargo, todas estas oportunidades, todo este potencial, <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2016/04/cuando-perdimos-la-galaxia.html">ha sucumbido</a> al más puro consumismo rápido. <b>George Lucas</b> dejó de tener la visión que le había caracterizado y la venta de su creación a una compañía como <b>Disney </b>no ha mejorado las cosas, a pesar de lo bajo que estaba el listón. <i>La Fuerza</i> no pasó de ser una mera excusa para la existencia de los <i>Jedi</i>, cuyos «mágicos» poderes eran la excusa perfecta para convertir los guiones en un paseo en barca. De esta manera, la orden <i>Jedi </i>ejercía un incomprensible monopolio de un poder que en principio estaba disponible para cualquiera. No es simplemente la cuestión política y la analogía con el Papado de Roma y los Caballeros Templarios, sino la cuestión de la existencia de una gran capacidad, del potencial que todo ser humano lleva dentro, aspectos que en la segunda trilogía desaparecieron y que <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2016/06/el-despertar-de-la-decepcion.html">en esta etapa</a> se han convertido en una especie de encantamiento —típico de <b>Disney</b>, por cierto—, hasta que <b>Rian Johnson</b> a través de un <i>Lucas Skywalker</i> retirado y disconforme, como muchos antiguos aficionados, nos ha recordado donde reside verdaderamente <i>La Fuerza</i>.</div>
<h2>
<i> Luke Skywalker</i></h2>
Resulta sorprendente en un primer momento el disgusto que ha generado el papel que desempeña el personaje que interpreta <b>Mark Hamill</b> en <i>Los Últimos Jedi</i>. «<a href="https://www.inverse.com/article/31199-last-jedi-may-the-4th-luke-skywalker-coward-hermit" target="_blank">Cobarde</a>» es como algunos le llaman, por lo visto, por tener el suficiente poder y dominio como para no necesitar que su presencia física solucione la papeleta. El caso es que a pesar de ello <a href="https://www.cinemascomics.com/luke-star-wars-los-ultimos-jedi/" target="_blank">este esfuerzo le supone desaparecer</a> al más puro estilo <i>Jedi</i> , sacrificándose y convirtiéndose en una leyenda tal y como hicieron sus dos maestros nada menos que <i>Obi-Wan</i> y <i>Yoda</i>, detalle que nadie parece recordar. Es decir, <i>Luke Skywalker</i>, aquel agraciado pero atormentado joven granjero cuyo espíritu interior anhelaba salir del <i>Tattooine </i>donde creció, pero que tras lograr conquistar la galaxia y derrotar al Imperio y descubrir que su amada es su hermana, se convirtió en un aburrido y estirado <i>Jedi </i>tan falto de carisma como lo fue el que decidieron después que sería su padre, un <i>Anakin Skywalker </i>infantilizado y maniático. En estas circunstancias no es reprochable que harto de la manera en como han tratado a su personaje, harto de que <i>la Rebelión</i> continúe con escaramuzas clandestinas a pesar de que <i>el Imperio</i> estaba derrotado, harto de que una ridícula <i>Primera Orden</i> llena de patosos pusilánimes continúe poniendo en jaque a la Galaxia, harto de que la cultura original de los <i>Jedi</i> haya desaparecido junto a la orden que monopolizaba su culto, se haya <a href="https://www.express.co.uk/entertainment/films/800575/Star-Wars-8-Last-Jedi-Luke-Skywalker-coward-Rey-Rian-Johnson" target="_blank">retirado voluntariamente</a> a una vida sencilla y apartada cual <a href="https://www.ciencia-ficcion.com/varios/firmas/f20180520.htm" target="_blank"><b>Lucio Quincio Cincinato</b> tras salvar a Roma</a>. Harto, y con razón, de todo. En <i>Los Últimos Jedi</i>, los aficionados a la saga clásica podemos continuar la pelea contra el <i>lado oscuro</i> a través de un carismático y rebelde <i>Luke Skywalker</i>. El <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2010/12/el-mito-del-heroe.html">héroe</a> con el que la saga inició su camino a través de la galaxia, el héroe que convirtieron en un amargado, el actor que tuvo que verse relegado al olvido durante décadas a causa de un personaje sin sentido, vuelve ahora con <a href="http://cinemania.elmundo.es/noticias/darth-trump-el-mejor-cosplay-de-mark-hamill-en-la-comic-con-2018/" target="_blank">fuerza</a>, <a href="https://www.msn.com/es-xl/entretenimiento/cine/la-teor%C3%ADa-fan-de-mark-hamill-sobre-luke-skywalker-tras-los-%C3%BAltimos-jedi/ar-BBJYEuT" target="_blank">humor</a> y <a href="https://hipertextual.com/2017/12/mark-hamill-le-decepciona-luke-skywalker-ultimos-jedi" target="_blank">sentido crítico</a>. Nos alegramos, <i>Luke</i>.<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="font-size: large;"><b>Publicada originalmente en <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2018/07/la-redencion-de-luke-skywalker.html" target="_blank"><i>Al Final de la Eternidad</i></a></b></span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: x-small;"><span>publicada posteriormente en </span><a href="https://www.ciencia-ficcion.com/opinion/op02841.htm" style="text-align: justify;" target="_blank"><i>El Sitio de ciencia-ficción</i></a></span></div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4908681482042531577.post-38637974841620964412019-01-20T10:00:00.004+01:002022-09-18T14:19:34.949+02:00Política y ciencia-ficción<div style="text-align: justify;">
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgkArIYKVk5MplpHiTkG54MaIyOTg1jmSA2suWtPdHYh9ofgXa9LBAqBcNd-OUsmgMN69cQCKiq1D98xbJ6ADwbL4Ax3AUqKNswnjdKKo6PlS6TUSSxsh9gBDct6XhtelEW5SI8e1yHTXXI/s1600/El-Hombre-en-el-Castillo-The-man-in-the-high-castle-Cabezas-cortadas-rese%25C3%25B1a-serie-libro-philip-k-dick%255B1%255D.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgkArIYKVk5MplpHiTkG54MaIyOTg1jmSA2suWtPdHYh9ofgXa9LBAqBcNd-OUsmgMN69cQCKiq1D98xbJ6ADwbL4Ax3AUqKNswnjdKKo6PlS6TUSSxsh9gBDct6XhtelEW5SI8e1yHTXXI/s320/El-Hombre-en-el-Castillo-The-man-in-the-high-castle-Cabezas-cortadas-rese%25C3%25B1a-serie-libro-philip-k-dick%255B1%255D.jpg" width="320" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Adaptación a la televisión de <i>El Hombre en el Castillo</i>, <br />
de <b>Philip K. Dick</b></td></tr>
</tbody></table>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
Se puede entender la ciencia-ficción como la imaginación de escenarios alternativos en los que se ha modificado algún parámetro de la realidad. Habitualmente es la física la rama de la ciencia que ve como algunas de sus premisas son alteradas para construir dichos escenarios. Por ejemplo, la ciencia-ficción hace comúnmente uso de «<a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2013/09/creando-universos.html" target="_blank">universos</a>» ficticios en los que es posible el viaje a mayor velocidad de la luz o la alteración de los campos gravitatorios, entre otras proezas para las que la física actual no tiene explicación satisfactoria.<br />
<br />
<a name='more'></a>En la ciencia-ficción llamada «dura», los autores enfocan su creatividad en dotar a esos nuevos escenarios de toda la consistencia posible. Pero hay <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2008/01/la-otra-ciencia-ficcin.html" target="_blank">otra ciencia-ficción</a> que deja esta precisión en segundo plano, centrando la parte especulativa en cómo esas nuevas situaciones afectan a los protagonistas. La llamada ciencia-ficción «blanda» usa escenarios ficticios con la principal intención de hablar de desde la propia alma humana, hasta la manera en cómo nos organizamos social y políticamente. En <i>Crónicas Marcianas</i> (<b>Ray Bradbury</b>, 1950) su autor decidió usar un Marte alternativo y poco riguroso con la física, simplemente como un escenario lo suficientemente extraño pero al mismo tiempo, cercano y reconocible, para hablar —de una maravillosa manera— sobre nosotros y nuestros problemas. En la <i><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Trilog%C3%ADa_marciana" target="_blank">Trilogía marciana</a></i> de <b>Kim Stanley Robinson</b> (1992) se aprovecha de nuevo nuestro planeta vecino como escenario —con mayor cuidado científico— para imaginar cómo la especie humana podría organizarse empezando de nuevo, aprovechando para hacer crítica de los sistemas políticos existentes. Otro ejemplo más reciente y preocupado por la elaboración del entorno con el objeto de especular que clase de organización social podría emerger es <i><a href="http://girotix.blogspot.com.es/2013/10/dark-eden-de-chris-beckett.html" target="_blank">Dark Eden</a></i> (<b>Chris Beckett</b>, 2012), en donde se especula sobre cómo un ambiente extremo puede condicionar la vida y por supuesto, la organización social.<br />
<br />
No es necesario irse a otros planetas para especular sobre como la tecnología afecta a nuestras relaciones sociales. El <i><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Ciberpunk" target="_blank">ciberpunk</a> </i>es un subgénero de la ciencia-ficción que consiste en mostrar el lado más pesimista de esta circunstancia. <i>Distopías </i>definidas por los efectos socialmente perniciosos que un mal uso de la tecnología puede producir a causa de nuestra falta de límites para su comercialización, para su consumo o para ser correctamente regulado por los poderes públicos. Estos así como las corporaciones comerciales, suelen aparecer en estas obras como participantes y cómplices de la situación, en una insana connivencia en la que la sociedad, sean humanos o <i>replicantes</i>, es explotada para favorecer a unos pocos. En la antología <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Mirrorshades" style="font-style: italic;" target="_blank">Mirrorshades</a> (1986)<i> </i>se encuentran algunos de los ejemplos más representativos. Aunque se dan muchas discusiones sobre el término <i>ciberpunk </i>como movimiento cultural o corriente literaria y se defiende a sí mismo sobre sus connotaciones políticas, no cabe duda que alrededor de estos conceptos <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Ciberpunk#Sociedad_y_gobierno" target="_blank">de alguna manera subyace</a> un fondo de crítica. Más adelante especularemos sobre ello.<br />
<br />
Si se entienden las ciencias sociales y políticas como el estudio de las sociedades humanas y su organización, nos encontramos con que este propósito es similar al de las obras comentadas. Se advierte pues que la ciencia-ficción —al menos, un tipo de ella— se constituye en potencia como un equivalente de las propias ciencias sociales y políticas, aunque aplicadas a universos ficticios y alternativos. Ahora bien, modificar parámetros físicos, imaginar entornos extraños en planetas distantes o pensar en tecnologías inexistentes para poder encontrar un escenario adecuado, requiere un esfuerzo adicional si lo que realmente desea el autor es precisamente, hacer un ensayo o crítica política. Si el mejor escenario requerido no existe, hay que inventarlo. Para hacer esto sólo debería ser necesario modificar aquellos parámetros relacionados directamente con las ciencias políticas: los personajes y su entorno social.<br />
<h2>
Modificando parámetros</h2>
Todas las especies se organizan, aunque naturalmente, cuando se habla de política siempre nos referimos a especies inteligentes. De momento sólo entran dentro de este grupo la nuestra, la humana, pero si se modificara este parámetro podría especularse sobre otras formas de organizarse. La ciencia está «limitada» por este hecho, algo que no le ocurre a la fantasía. A la ciencia-ficción tampoco, salvo por la aplicación en mayor o menor medida del método científico para construir esa realidad alternativa. En la fantasía es habitual imaginar extrañas especies de seres como <i>Orcos </i>o <i>Elfos</i>, cada una de ellas con su organización social y política características, sin más explicación ni justificación de su origen. En el caso de la ciencia-ficción puede tratarse de sociedades alienígenas, de su organización política y qué clase de relación podrían tener con la sociedad humana. De la misma manera que la exobiología estudia las posibilidades de vida fuera de la Tierra, un término adecuado para definir este ámbito sería el de <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Exopol%C3%ADtica" target="_blank">exopolítica</a>, sino fuera porque ha sido «secuestrado» por el entorno pseudocientífico —tristemente relacionado con la ciencia-ficción en demasiadas ocasiones—.<br />
<br />
En sagas y obras como <i>Star Wars</i> o <i>Avatar</i> es corriente encontrarse con especies extrañas y sus respectivas organizaciones sociales y jerárquicas, aunque en estos casos ocurre algo similar que con las obras de fantasía: se usan realmente como un reflejo de nuestros propios problemas y prejuicios, más que como un ejercicio de especulación elaborado. Para encontrar algo parecido a esto habría que buscar entre la bibliografía, pudiendo encontrar algo en la de <b>Jack Vance</b> —repleta de ejemplos bastante ocurrentes sobre especies alienígenas pintorescas y sus organizaciones sociales— o tal vez en <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Los_propios_dioses#Segunda_parte:_...Los_propios_dioses..." target="_blank"><i>Los propios Dioses</i></a> (<b>Isaac Asimov</b>, 1972), donde se describe una especie habitante en un universo paralelo.<br />
<br />
Tampoco es necesario recurrir a especies inteligentes desconocidas para especular sobre su organización política en función de sus características imaginarias. Nuestra propia especie puede sufrir cambios debido a avances tecnológicos que podrían alterar nuestra condición de manera significativa. Se trata de tecnología que está ahí, siendo aplicada en la actualidad a nuestros propios cuerpos, con ejemplos vivientes que en estos momentos, se pasean entre nosotros: <b><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Neil_Harbisson" target="_blank">Neil Harbisson</a></b>, ciudadano del Reino Unido, ha sido el primero en obtener reconocimiento legal como un <i>cyborg,</i> al tener implantado en su cerebro un dispositivo óptico. Otro caso para el que todavía no existe una solución técnica pero para el que hay una voluntad declarada de alcanzarlo, es el proyecto del magnate ruso <a href="http://www.lavanguardia.com/vida/20150528/54431937766/multimillonario-ruso-convertirse-robot-inmortal.html" style="font-weight: bold;" target="_blank">Dmitri Itskov</a>, que consiste en traspasar su conciencia a un dispositivo informático lo suficientemente capaz, para de esta manera perpetuar su existencia. Estas y otras incipientes tecnologías vislumbran nuevos caminos intuidos por algunas obras de ciencia-ficción —<i>Chappie </i>(<b>Neil Blomkamp</b>, 2015)—. Entre ellos se encuentran, en un futuro cercano y en su necesario reflejo legal y político, otras nuevas rutas por descubrir.<br />
<h2>
Una cuestión de género</h2>
Si se definen los subgéneros de la ficción en función de los parámetros de la realidad que modifican para construir sus escenarios, se podría asociar alguno de ellos con la política. El término existente que más se acerca sería el de <a href="https://en.wikipedia.org/wiki/Political_fiction" target="_blank">política-ficción</a>, teniendo en cuenta que este género abarca un campo de obras mayor que el propio de la ciencia-ficción, incluyéndose obras como por ejemplo <i><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Ensayo_sobre_la_lucidez" target="_blank">Ensayo sobre la lucidez</a></i> (<b>José Saramago</b>, 2004) —en la <a href="https://en.wikipedia.org/wiki/Political_fiction#Notable_examples" target="_blank">Wikipedia en inglés</a> hay más casos, llegando a incluir <i>El Quijote</i> dentro de este género—.<br />
<br />
Probablemente, el subgénero de ciencia-ficción donde no se requiere de conocimientos de física ni de ingeniería tanto como de ciencia políticas y sociales, es la <i>ucronía</i>: historias sobre realidades alternativas generadas a partir de la modificación de un suceso del pasado. El ejemplo más relevante podría ser <i>El Hombre en el Castillo</i> (<b>Philip K. Dick</b>, 1962), cuya reciente adaptación a televisión nos ha permitido comprobar cómo podrían haber sido unos Estados Unidos gobernados bajo un régimen nazi. La comparación entre la realidad alternativa y la situación real se presta a ácidas comparaciones de claro y polémico trasfondo político.<br />
<br />
La ciencia-ficción de la ucronía recrea políticamente un pasado que no existió, hasta nuestros días. Pero ¿qué podemos hacer si deseamos continuar hacia el futuro? No hay ciencia para dar respuesta a esta petición, pero sí existe en la ciencia-ficción un concepto muy famoso cuya época de estudio no es el pasado o el presente, sino el futuro: la <i><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Psicohistoria_(ficción)" target="_blank">psicohistoria</a></i>, una ciencia ficticia que predice con apoyo de las matemáticas, los acontecimientos políticos futuros en un colectivo social de elevado número de individuos.<br />
<h2>
La exposición del mensaje</h2>
En obras como las conocidas <i>1984 </i>(<b>George Orwell</b>, 1949) o <i>Un mundo feliz</i> (<b>Aldous Huxley</b>, 1932) se presentan de forma explícita escenarios en cuya construcción la política tiene un claro protagonismo. Sin embargo, en el ciberpunk sus historias nos hablan de antihéroes en forma de <i>hackers</i>, agentes peligrosos y malvados dueños de corporaciones. Son en definitiva historias sobre el bien y el mal, hasta cierto punto clásicas ¿Hay política en ellas? Fuera esta la intención inicial o no, algunos sospechan que se ha usado como vehículo de propaganda ideológica. En el género de ciberpunk esta no es explícita, sino que es su mensaje implícito el que de forma inadvertida, se transmite al público. La construcción de los personajes y su <a href="https://lasindias.com/indianopedia/Ciberpunk" target="_blank">conexión con el mundo real</a> —con cuyo parecido es algo más que simple coincidencia— son factores principales, hasta el punto de <a href="http://elfindelaeternidad.blogspot.com/2012/02/la-coherencia-de-blade-runner.html" target="_blank">primar el mensaje sobre la construcción del escenario</a>. Si se tiene en cuenta el momento de la aparición del ciberpunk, coincidente con la <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Posmodernidad#Como_periodo_hist.C3.B3rico" target="_blank">posmodernidad</a> que surgió tras la caída del muro y el triunfo del capitalismo consumista, surgen algunas interesantes cuestiones:<br />
<br />
La desaparición de la Unión Soviética llevó tras de si el fin de la Guerra Fría pero también, la falta de freno al empuje del capitalismo global consumista. Esta podría ser una de las causas de la actual situación, en la que las corporaciones multinacionales tienen tanto o más poder que muchos estados, la mayoría de ellos endeudados al ser víctimas de una economía basada en la generación de deuda, de un dinero creado artificiosamente. La cuestión es: ¿es el ciberpunk una respuesta cultural contra el capitalismo? ¿O es por el contrario una creación de este mismo, para convertir en <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Profec%C3%ADa_autocumplida" target="_blank">profecía autocumplida</a> sus sueños más materialistas y ambiciosos? Por supuesto, esto no es más que política-ficción.<br />
<div style="text-align: right;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="font-size: large;"><b>Publicado originalmente en el blog <a href="https://elfindelaeternidad.blogspot.com/2016/01/politica-y-ciencia-ficcion.html" target="_blank"><i>Al Final de la Eternidad</i></a></b></span></div>
<div style="text-align: right;">
<br /></div>
<span style="font-size: x-small;"><div style="text-align: center;">Publicado posteriormente en <a href="https://www.ciencia-ficcion.com/opinion/op02463.htm" target="_blank">El Sitio de ciencia-ficción</a></div></span><div style="text-align: center;"><span style="font-size: x-small;">Referenciado en la wiki especializada </span><a href="http://biblion.fundacionasimov.org/index.php/Pol%C3%ADtica_y_ciencia_ficci%C3%B3n" style="font-size: small;" target="_blank">Biblión</a></div>
<br /></div>
Lino Moinelohttp://www.blogger.com/profile/02938408747204687834noreply@blogger.com0